dioso aborto que ha de febrero de 1917; lo que explica el granCLAVE Tribuna Marxista te el atraso histórico de la revolución mexicana, como sucedió también con la rusa sido la revolución mexicana, pese a la alharacà de los lacayos criollos de las clases dominantes.
Él intento de revolución democrático burguesa realizado cuando Juárez, dió origen a un paradójico fortalecimiento de las clases feudal clericales debido ante todo a la carencia de una base industrial suficiente, hecho que determinó la existencia de una burguesía apenas perceptible. El movimiento de 1910 presenta el caso típico de las revoluciones burguesas en los países atrasados, semi coloniales de América Latina. La burguesía nativa gestada a su calor, impotente por nacimiento y ligada umbilicalmente a la propiedad agraria y al amo imperialista, ha sido incapaz de resolver las tareas históricas de SU revolución. La base de la revolución mexicana fué el gigantesco incendio campesino; pero los campesinos, incapaces de forjarse una política propia y una dirección, fueron solamente carne de cañón, sobre la cual se elevó la flamanté burguesía nativa. Ambulando de mano en mano, de Soto y Gama a Obregón, de Calles Graciano Sánchez, los millones de miserables campesinos no han visto resuelta su situación, ni por las dotaciones realizadas por Cárdenas, ni mucho menos por la voraz burocracia que podríamos llamar ejidal. La salida está, no ya en la revolución mexicana TRIUNFANTE, que creó nuevos amos explotadores, sino en la que vendrá; que será en cierto sentido burguesa, en tanto que destruirá complemente el feudalismo en el campo entregando toda la tierra a los campesinos; pero que será proletaria, porque llevará al poder a los obreros derribando a las actuales clases dominantes.
La revolución mexicana, en tanto que burguesa, debía de liberar al país del yugo imperialista. La historia de ella es una cadena de concesiones, forzadas e inevitables unas veces, ventas asquerosas al imperialismo otras, salpicadas con impotentes intentos de rebeldía y contorsiones grotescas de los agentes imperialistas, como Lombardo, que baila al son de Wall Street. Ayer creyó que tocaban a guerra y ofreció entonces la sangre de los obreros y campesinos de México al democrático imperialismo yanki. Hoy ve que tocan a neu tralidad y en la Habana clama por la neutralidad; mañana Yankilandia tocará a guerra y Lombardo tomará su puesto de 48