CLAVE Tribuna Marxista La burocracia dominante de la Segunda Internacional constituye la parte menos independiente, al mismo tiempo que la más podrida y miserable de la sociedad burguesa. Cualquier cambio de las condiciones políticas, hacia la derecha o hacia la izquierda, es mortal para ella. De ahí sů tendencia a la prolongación del statu quo; de ahí su empirismo forzado, es decir, su temor de enfrentarse al futuro. La política del Comité Ejecutivo de la Segunda Internacional puede parecer un crucigrama a quien, a pesar de la evidencia, considere la socialdemocracia como un partido de clase del proletariado. Todo encuentra su sitio, cuando uno se da cuenta de que la socialdemocracia es un partido burgués, que llena la función de freno democrático en la lucha clasista del proletariado, Dan se queja de que la acción de los empíricos. que viven de buenos salarios, ha paralizado básicamente y debilitado a la Internacional. Durante cinco meses, después de su sesión de enero, el Comité Ejecutivo no reaccionó. según dicė Dan ni ante uno de los acontecimientos internacionales de indudable gravedad (Checoeslovaquia, Alemania, etc. El (Comité Ejecutivo) ha caído hasta un estado de anabiosis política. Es posible que la misma muerte que se ha convertido en sino de la Internacional Comunista amenace a la Internacional Socialista. se queja el lider de los mencheviques. Es posible que los primeros disparos: de la guerra rompan la unidad internacionalsocialista del proletariado más aún de lo que lo hicieron el año catorce. 0, posiblemente, la unidad. se romperá antes de que estalle la guerra. Las palabras es posible suenan fuera de tono, tratándose de procesos determinados hace mucho tiempo y de sus resultados previstos. Pero, todo da igual. Los girog retóricos en labios de un menchevique adquieren fuerza propia. eso significa que el agua les llega hasta el cogote. Dan no lo oculta.
Su pronóstico condicional. en relación con la Segunda Internacional. es éste: Su transformación en una especie de liga de naciones. la amenaza con la misma muerte por cuya virtud, ante nuestros ojos está feneciendo (si es que no ha fenecido ya) su prototipo de Ginebra: con la muerte por parálisis progresiva. esto resta añadir que la parálisis progresiva principió en agosto del año de catorce y ahora está entrando en su fase final.
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