qu; dente: por la España gloriosa de los milicia derada, tiene la obligación de asumir en Amé nos, que defiende a la desesperada la libertad rica Latina la tutela que le asignan las cir y la cultura, solo están con franqueza, la cunstancias excepcionales en que vive; y por y el gobierno de México. Una at que posee una libertad que ninguna otra agru mósfera de simpatía popular, como posible pación de escritores y de artistas disfruta en mente no ha existido nunca en tanto grado, nuestras tierras, ha de sentir el imperativo do rodea hoy al nombre de México en la Amé estudiar y trabajar más que ninguna. De ella rica toda. Esa simpatía les crea a ustedes, deben surgir las consignas y los modelos; it. nos crea a nosotros. ya que ustedes me ella deben venir las consultas y las dudas. Lil han dado la dicha de poder hablar asi de tarea es inmensa pero no utópica. lo largii beres urgentísimos que no podemos eludir. de la historia siempre ha sido posible lo Porque esta libertad que en México se goza, era necesario.
con una amplitud que solo el desterrado pue Acepte la organización su destino honrosí: de saborear en sus íntimas delicias, no puede simo; satisfaga con su labor a la curiosida; durar por mucho tiempo. Sería suicida creer que despierta, responda con su esfuerzo a la lo, sería ceguera afirmarlo. Mientras el pro expectativa afectuosa con que América la si letariado del mundo no tenga entre sus manos gue. Su obra será entonces la más alta a que el poder no habrá libertad asegurada, ni cultu puedan aspirar los escritores y los artistas de ra absolutamente protegida, ni derechos del este pueblo: a conducir la batalla inminente hombre auténticamente respetados. En el dra sobre el frente cultural americano.
mático momento en que vivimos, la derecha Mientras ese día llegue, abóquese la orga ya ha aderezado armas para el esfuerzo su: nización a sus tareas inmediatas: arranque de premo. Tiene sobre nosotros la ventaja in cuajo los resabios, humanistas en unos, extre.
apreciable de su claridad de objetivos y de su mistas en otros; aprenda a enfocar con los méorganización poderosa. Cada día que dejemos todos modernos la completa realidad que la ropasar en la apatía o en el desorden es un triun dea; forme sus equipos de investigadores, y fo de la derecha, una nueva posición que ha adiéstrelos en la doctrina que esclarece y en la conquistado para la próxima ofensiva. No nos práctica que disciplina. En poco tiempo dará dejemos engañar por los progresos políticos a México y a América los modelos revolucioque no van precedidos o acompañados de una narios que todo un continente espera. al revolución en lo social. Inestables y frágiles, saberse así, escuchada y respetada, hasta su se deshacen al primer cuartelazo, se vienen más modesta y cotidiana labor podrá resonar abajo al primer sacudón.
en la América nuestra como aquellas palabras, Echemos pues sobre nuestros hombros la alentadoras y orgullosas, con las cuales el contarea inmensa que la América entera espera de de Saint Simon, precursor genial del sociade nosotros; que los escritores y los artistas lismo, quería ser despertado cada día: Arride todo un continente aguardan con ansiedad ba, señor conde, que os esperan grandes cosas de esta organización. Hermana mayor y abanpor hacer.
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