RENOVACION 175 Henri Bergson (1)
La existencia de que estamos más por el mismo lado, bajo el mismo ánseguros y la que conocemos mejor, es gulo; sin embargo de esto, la visión sin duda alguna nuestra propia exis. que tengo de él en cada momento su.
tencia, pues de todos los demás obje. cesivo, es diferente de ln que le precetos sólo tenemos tiociones. que se pue de, por lo menos en cuanto que la deu llamar exteriores y superficiales, thisma visión y el objeto han envejeci.
en tanto que nos percibimos a noso do un instante. La memoria es la qtte tros mismos interiormente, profunda pone alguna cosa de este pasado en ineote. Pero que observainos enton este presente. Mi estado de alma, ces. Cuál es en este caso privilegiado avanzando por la ruta del tiempo, se el sentido preciso de la palabra rexis inflama continuamente con la duración țiri. Para dar contestación estas que va recopilatido; bac que va recopilando; bace, por decirlo cuestiones, resumiré en cuatro pala. así, una bola de nieve consigo mismo.
bras las conclusiones de ùn trabajo con mayor razón debe suceder con los anterior.
estados más profundamente interiores: Observo, ante todo, que voy pasan afecciones, sensaciones, deseos, etc do de estado en estado, Tengo calor o que no corresponden, como una simple tengo frío; estoy triste o estoy alegre; percepción visual, a un objeto exterior trabajo o no hago pada; comtemplo lo invariable. Pero es muy cómodo 10 que ne rodea o pienso en otra cosa. prestar atención a este cambio ininteSensaciones, sentimientos, voliciones, rrumpido, y no anotarlo sino cuando representaciones; he aquí las modifica se hace suficientemente perceptible y ciones enmedio de las cuales pasa mi capaz de imprimir al cuerpo una nueva existencia, y que la coloran sucesiva actitud y una dirección pueva la mente. Por lo tanto, yo cambio sin atención. En este preciso momento es cesar. Pero decir esto no es decir lo cliando se da 400 cuenta de que ha.
suficiente. El cambio es mucho más cambiado de estado; Por más que, eu radical de lo que a primera viste se realidad, nosotros cambiamos concréerla.
tinuamente y el estado mismo no es Habla, en efecto, de cada uno de otra cosa sinó un cambio.
mis estados, como si cada uno de ellos Por consiguiente, debe decirse que formase uu blogue o un trozo de con no existe una diferencia esenciat entre junto. Digo bie al decir que cambio; pasar de un estado a otro y persistir pero el cambio me da la idea de que en el mismo estado. Si el estado que consiste en el paso de un estado al es persiste el misnioi es más variado de tado siguiente; de cada estado toman lo q11e se cree, puede decirse que, a do en particular y aparte, creo que la inversa, el paso de un estado a otro permanece siendo lo que es durante se parece, más de lo que uno se podría todo el tiempo que se produce. Sin imaginar, a un mismo estado que se embargo, un ligero esfuerzo de atención me revelaria que no hay afección, pero precisamente porque nosotros cevolición, o representación que no se tramos los ojos a la incesante varia: modifique a cada momento; si ua es ción de cada estado psicológico, nos tado de alma dejase de variar, su du hallamos obligados, cuando la variaración dejaría de transcurrir.
çión se hace tan marcada que se imTomemos el más estable de los es ponę sobre nuestra atención, a hablar tados internos: la percepción visual de del fenómeno, como si un liero esta.
uo objeto exterior inmóvil, por ejemplo. El objeto peruianece el misuo; Filósofo franodis recibido hace pocos días es la Academia Francesa y que por lo curiosa de su sista yo puedo mirarto de la misin?
MA. Vana boy la etención de todo el mundo.
16 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica