i RENOVACION 155 Norte y Centro de Portugal. No tirani rece pedido de limosna al Todopodecon la testuz c01110 en Castilla, sino roso, nació al compás del golpe del con el cuello y la cruz de las espaldas, remo sobre las olas del saudoso mar, sobre las cuales se inclioa yugo. Por fin aparece la red sobre la. areuna pieza cuadrangular, de madera de na, arremolinanse en 11 torno, y al alcornoque; llena de dibujos y talla abrirla chispea al sol la plateada masa, dos decorativos, est cuyo centro se palpitante trás que de vida, de agonía.
destacan a zenudo las armas de Por: es tin espectáculo trágico el de tugal pasando sobre los bueyes. aquel montón de vidas expirantes que Tales yugos son una de las cosas se agitan al sol, junto a las olas. de más curiosas que bay que ver por que salieron, al rumor del fado eterno aquí. Varian sus motivos ornamenta del mar. Traen sustento de vida a los les, de trazado geométrico casi siem. hombres, y una vez más se nos aparepre; y en los que el señor Joaquín de ce conio na vasto cementerio ese océa.
Vasconcellos quiere ver un reflejo de no doude acaso se inició la vida y eu la decoración roinántica de las porta: cuyo seno palpita poderosa. Pero es das de los templos. Eo Oporto vf el que estas arenas toismas, lecho de otro día que ha empezado a formarse 1111ste, 10 son en su inayor parte; una colección de estos yugos, lo cual acaso, restos de caparazones de seres es muy plausible; pero tiene a la lar en un tiempo vivosť. ga un peligro, y es que, empezando a Le arena misma, éno és un vasto coleccionarse yugos en tin museo, se cementerio. No lo es el mar. acabe por construir nuevos modelos como hombre que lee, lleva, quiede ellos con destino a él.
ras que no, un pedante dentro, recor. No se hace acaso, con ocasión de daba yo las teorías de Quintón sobre un centenario, sellos para los colec. la cuna de la vida y cómo del mar cionistas? En cuanto el hombre da ed salimos Volveremos al mar?
coleccionar algo, ya este algo tiende a Métense bombres en la masa palpihacerse artificial y destinado a colec tante, bụndiendo en ella sus hroncea.
ciones, sin que falte quien suponga si dos pies, ya paladas, separando acá y habrá uti oculto dios marino entrete allá algún pescado, van llenando los Dido en fraguar nuevos tipos de dia rapicheles o redaños, especie de cesto tomeas para los que las coleccionan, de red en que dos bombres para cada o un dios Şilyano, fabricando nuevos: uno llevan la cosecha a tenderla en la insectos para los estomólogos, No se prena, donde se hace el cernimiento hacen acaso tipos de perros para los por mn tijeres. 1, aperrados. No puede ser mayor la analogfa con Y, entre tauto, los bueyecitos ru una labor agrícola. Los bueyes sacaron bios, cabizbajos al peso de ornamen del mar la dies del pescado, apareció tados yugos, soportando las armas de en la arena como en la era la parva, y Portugal, siguen playa arriba, trillan ahora viene el aventarla. do la arena y tirando de las cuerdas Sentadas en la arena van las mujede la red. Tes hacieudo el. apartado. Lo más de Cuando éste aparece ya a la vista, lo que sacan es espadilla mezclada de aflorando las cercanas Olas sus flota. Cangrejos, y po vale más que para dores, empieza un vocerío ritmico y abono de las tierras; de veinticinco a se van reuniendo hombres y muj res. treinta mil reis la redada, es decir, de El vocerio éste tiene, como el que le 130 a 160 pesetas.
vantau al botar al mar las barcas, al Si es sardina, llega a valer hasta go de rítmico, en efecto. Oyéndolo, y 300. 000 reis, esto es, unas 600 ptas.
oyeado sobre todo el canto con que. como cosa extraordinaria, de esas acompaban el remo, he llegado a sos que se recuerdan diciéndose, vén tal pechar si el fado, ese melancólico y día de tal año. se habla de alguna quejunbroso canto portugués, que på. redada que valió un conta, mil duros.
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