92 RENOVACION: No parecia sino que el olímpico metal un instante un dulce desmayo, un guerrero dignificando stis rasgos con suave desvanecimiento. Cuando alzo estatuaria apostura y dando a su mi la vista le sonreía un ble fulgor de rada la Gjeza de una reflexión metáli. ésineralda que era como una tranqui.
da, hubiera bimbado su fisonomía con la irradiación de esperanza: las pupi.
tina aureola de apoteosis. Siptio. por las de la Diosa.
Mistral y el Conde de Perigny Escribo estas líneas bajo una im. piraciones del viejo Felibre y de las presión de regocijo, hermosuras del cielo y de la tierra La velada de antenoche resultó una provenzales, que no nos parece posible hermosa fiesta. Es natural que así hacer el elogio de su alocucióu, aparfuera. más de la fama del confe tando el pensamiento de esta tierra y rencista, había el atractivo especiali. de aquel cielo. Hemos de decir por lo simo del tema: Federico Mistral y su tanto que el discuirso de antecocke es obra literaria. Podía haberse intin. lucido y espléndido como los veraciado al público esta confereacia con nos que maduran las paranjas de la la mistaa frase con que comienza uno Cote Azur, o acendran el aceite de de sus más lindos cuentos aquel ioge los olivares de Aix, vibrante y soporo nioso molinero provenzal que se llamó como un pino de las Alpilles, sencillo Alfonso Daudet: est de la fine fleur y delicioso como una artesiada de de farine provençale qu on va vous quince años, claro y abundante como servir cette fois, en la seguridad de las aguas del Ródano, cálido, del ca.
que la palabra fácil del Conde Perigny lor del entusiasmuo, cotuo la bahrla realizado la promesa. Mas él llanura alucinante que necesitó atraquiso hacernos el obsequio sin encare, vesar Mireya para ir a implorar a las cer su précio, como conviene a un tres Marias favor y protección para gentil hombre de su estirpe y de sus sus anhelos de virgen enamorada, condiciones. Razón de más para que Lo mismo que en plena Camarga hay estemos agradecidos a este noble también en la conferencia de Perigay caballero, todo inteligencia y entu espejistnos cuya fábrica inconsistente siasmos, que en momentos angustio. y sutil parece hecha con el humo de sos en que el pan diario nos llega las quimeras; igual que en el delicioso amasado con la agria levadura de valle, donde arrullaron los sonetos de gárrulas politiquerías, ofrece Dues Petrarca el dulce sueño de su novia tros apetitos de ideal, sonriente y ge ideal, ffuyen también en aquélla, fuenHeroso, el trigo divitio de la poesía. tes de aguas vivas y cristalivas, En efecto, el señor Perigay bos ha Como biano maestra que repita presentada en una forma sobria y ele las líneas borrosas de un dibujo, el gabte, el cuadro completo de la tierra Conde ha hecho surgir en mi memoria gentil del sol y las cigarras, la silueta con extraordinaria pitidez los recuervenerable del viejo patriarca de Mai dos que conservo de la expedición llane, las figuras inttörtales de sits que hice en Proveuza. Mientras le ola poenas, en una palabra, el hechizo sin he vuelto a ver Avignon, la pieja igual. del leyendoso Midi galo. Su sede de los papas, con sus murallas y conferencia es de verdad una evoca su castillo soberbio, Arles, la antigua ción magnífica del país ardiente, cu colonia de Ronja, con sus. Arenas yas bellezas Ha eticarecido Mistral con enormes, sus Alyscamps melancólicos.
el prestigioso encanto de sus versos. fastuoso teatro y su encantador San Tan penetrado esta este diserto explo. Trofimo; Les Baux, ciudad construida rador de puestros bosques, de las ins toda de granito, donde el estrago de Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nadonal de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud. Costa Rica