RENOVACION combatir la seva tendencia es el de que las hibridaciones políticas son imposibles. Dos gaebrados politicos dándole lecciones al país!
Wuy bien si hubieran traillo al debate alguna idea, la exposición de algún propósito elevado y goble; spero Buscitar primero la agitación para buscar deapuce pretextos que la juistifiquen, tocar primero a rebato para descubrir después el peligro a que deba co rrerse; compotter primero la tonarta para después idear la letra que haya que ajustar a stt ritino, eso to puede parecernos más que fuerza perdida y bulla estéril, propia para alborotar a los muchachos y sacar a luz toda 1a prenuleria de las declamaciones antipapa les y entiinquisitoriales, pero absolutamente 798 para cuanto signifique un adelanto po sitivo en la marcha de las ideas, una conquista sola en el sentido del pensamiento libre No resisto a la tentación de apoyarme una vez más, en la opinión del escritor uruguayo, cuyas ideas concuerelan en este particuLar con la miss y expresan mi pensamiento mejor que pudiera hacerlo ini incompetente plutlla. Llamo muy especialmente la atenciou sobre lo que habre de copiar ensegrulda, de todos los que en un país se oponen con todas sus fuerzas al desarrollo de la idea que dió origen a la forilación de un partida antijacobino, y que no es otra cosa que el reconocimiento de una tendencia, definida de tiempo atras en nuestras luchas políticas, Tendencia que si hasta ahora tio cuenta con toda la opinión que merece, no ha sido por que el pensamiento generoso que la inspira arezos de potencialidad, sino por falta del apóstol que, para llevar a cima la palinge nesia social y política, erupiece por transfor mar en sí mismo la idea en sentimiento, No cabe duda de que la filiación directa de esta escgela serlo liberal se teplotita la flosofia revolucionaria del siglo XVIII, JA Glogotia que fructi6có en la terrible lógica aplicada del ensayo de fundación social del jacobiniano, y que, por lo que respecta al problema religioso, culminó en el criterio que privaba en las visperas de la reacción Bco católica de Chateaubriand y Bonald: y divulgaban Les ruis was de Palmira: cuando se adiniraba a Holbach y a Le Mettrie; cuando las religioncs monstruosas, urdidas calculaçlamente por unos cuantos impostores solapados y astutos, para seutar 8u predominio sobre un hato de imbéciles, soporte despreciable de las futuras creencias de la humanidad.
el criterio histórico era, en aquella filosofía, cotno lo es hoy en las escuelas qike la han recibido en patrimonio, la aplicación rígida e incxorable de quos mismos priucipiog al juicio de todas las épocas y todas las instituciones del pasado, sin tener en cueuta la relatividad de las ideas, de los sentimientos y de las costumbres; por donde fases enteras de la historia; LA Hdad Media, la Espada del siglo XVI, el catolicismo, el feudalismo, erat condenados de platio, sin la piadosa excepción de ut beclio o Dolbre, como estériles, perversas, xfrentosus y estúpides. Si renunciando a la Iinplacabilidad de sus odios, aquella Giosofia se levantaba alguna Vtt a la Esfers de la tolerancia, jamás palaba de la tolerancia individu lista y displicente de Voltaire o de Bayle, que no se funda en intuición de simpatía, en penetrante poder de comprensión, como la de un Renón o un Sainte Beure, sino en una nola fría lenidad intelectual. toclos estos rasgos característicos se mantienen en las escuelas que representan, más o menos adaptado a las condiciones del petisamiento contemporáneo, el mismo espiritu; con la litereucia. 00 favorable, ciertanente, para estas. de que le filosofía de la Enciclopedia tenía, para sus apasionamientos e injusticias, la disculpa de la grande obra de demolición y allanamiento que buabía de cumplir para cooperaz to los destinos del mundos. luego dice: El sentido de la obra intelectual del siglo xix ea, ca suma, la tolerancia; pero no sólo la tolerabcia material, la que protege la 110nidad de las personas, la que se refiere derechos y libertades consignables en constitaciones y leyea; sino también, y principal mente, le tolerancia espiritual, la que stade a las relaciones de las ideas entre ellas mis.
mas, la que las hace comunicarse y cambiar Influencias y estímulos, y comprenderse y opliarse recíprocamente: la tolerancia afirmativa y activa, que es la gran escuela de (1) Obra citadi. 1) Obra citada Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bbliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.