RENOVACION fondo, en el rico y poblado fondo de salía de su silencio rcplcto y fecundo.
su sér. El único recurso que quedó veces, sio embargo, cuaddo la opoentonces a los devotos de este ingen sición se tornaba clamorosa, Pacheco so talento (que ya los tenía inconta descruzaba los brazos y toniaba lenta bles) fué contemplar la testa de Pa. mente una nota con lápiz; y esta to.
choco, como se mira al cielo, con la ta, trazada con saber y con inadurí.
certeza de que Dios está detrás dispo simo pensar, bastaba para cohibir y niéndolo todo. La testa de Paclieco anopadar a la oposición. IEs que el presentaba una superficie lisa, amplie intenso talento de Pacheco llegó a y lustrosa. muchas veces junto inspirar en las Cátiaras, en las Cowi.
él, Consejeros y Directores Generales, siones, en todos los Centros, un salubalbuceaban moravillados. No es ve dable terror disciplinario iAy de aquel cesario más! Basta ver Aijuella testa! sobre quien fuera a desatarse colérico Pacheco formó parte luego de las tan inmenso talento. Ya tenía segura principales Comisiones parlamenta. una humillación. Así dolorosísimarias. Nunca, sin eubargo, accedió. bjevte lo experimentó el pedagogo.
redactar un proyecto, desdeñoso de que uu día se lanzó a acusar al señor las especialidades. Apenas alguna vez ministro del Reino (entonces Pachetonjaba en silencio una nota. cuan co dirigia c1 Reino) de descuidar la do salía de sti concentración, cstiran Instrucción del pafs! Ninguna recri.
do el dedo, era. para lanzar alguna winación podia ser más seusible a idca general sobre el Orden, el Pro. Aquel innepso espíritu, que en frase greso, el Fomento, la Economía. Ha marmorea y suculenta enseñara que bla ea esto la evidepte actitud de uti un pueblo sin Institutos es un puteintenso talento qué (como insinlid blo incompleto. Estirando el dedo bad sus amigos guifiando el ojo con (gesto siempre tan suyo. Pacheco finura) respera llegar atriba. Por lo aplastó al hombre temerario con estas demás, Pacheco wisdo epseñaba (es. palabras tremendas: Al ilustre dipubozando con sti gruesa miano el viielo, tado que me censura, sólo tengo que superior de ui Ala sobre una copuda decirle que en estas cuestiones de Arboleda) que el taleuto verdadero sólo Instrucción Pública, su excelencia debía conocer las cosas por las raması, ghí, en esos bancos, da gritos, y yo Este inmenso talento no podía de aquí, en este sillón, bago luz. Yo esiar de contribuir a los Consejos de la taba en la tribuna pública en aqucl Corona, Pacheco, en un cambio mi supremno momento; y no recuerdo ha.
nisterial (provocado por una trenoli ber oſdo jamás en una asamblea de na) fué ajnistro, e inmediatamcnte bombres upa tau apasionada racha de kę uotó qué faciza consolidación yi aclamaciones. Creo que fué a los pocos niera a dar al Poder el inmegso talento días cuando Pacheco recibió la gran de Pacheco, En su departamento (que cruz de la orden de Santiago. era el de Marina. Pacheco no hizo, El inmenso talento de Pacheco se durante los largos teeses de gobierno, tornaba poco a poco un credo nacional. absolutamente pada. como insinua. Viendo que inquebrantable apoyo daha ron tres o cuatro espíritus acerbos y aquel inmenso talento a las institucioestrechamente positivos, Mas por pri. nes a que servía, todos le apetecieron.
mera vez, durante este régimen, la Pacheco comenzó a ser Director Genenación dejó de sentir dudas e inquie ral de Compañías y de Bancos Cobi.
tudes sobre nuestro Imperio Co. jada por la Corova, penetró en el ¿Por qué? Porque estaba seguro de Consejo de Estado. Su partido reclamó que últimausente los suprenios intere ávida inente que Pacheco fuese su jefe.
ses de este Imperio habían sido con. Por los otros partidos se ayudaba cou fiados a un inmenso talento, al talento sumisa rererencia a su talento. Poco inmenso de Pacheco.
a poco se concentraba la pación en En las sesiones, Pacheco rara vez Pacheco.
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