RENOVACIÓN. 179 la muerte sobre la vida. Será des can; del arte verdadero, que no truida la ilusión que hace de la puede existir fuera de la más ilimihumanidad una esclava de su propia tada libertad, que no tolera poder ni obra, la propiedad. El bien más. autoridad alguna, en una palabra, grande de la humanidad es su poder ninguna fuerza antiartistica, antisoproductivo; esa es la fuente eterna cial. Se trata de arte puramente de toda dicha, y no lo que está ya humario que puede dar a la corrienproducido. Lo que la Naturaleza tę de las paşiones sociales que brocreó, lo que los hombres crearon y ta fácilmente así de los arrecifes saltransformaron, eso pertenece a la vajes, como de los bajos fondos humanidad, a los indigentes, y nadie populares un fin bello y elevado, ulti puede venir a decir: Todo eso me fin de noble humanidad (El Arte y pertenece a mai solo, y vosotros, los la Revolución. demás, sois solamente convidados, a Cómo desentenderse del elemenlos que yo soportaré el tiempo que to pasional humano que nos condume plazca y mientras. me produzca ce, por los cauces de la belleza, a la renta, y a los que despediré cuando realización de los más altos ideales?
me venga en gana. Lo que la Natu. IV raleza dió, lo que el hombre produjo, lo que el sér vivo necesita, es mío. Pese a la inconciencia de las mulWagner entrevé en los tiempos titudes, la obra de arte ejerce sobe nuevos, en el estado futuro de la rano influjo y a su magico soplo las humanidad, los hombres tal cual almas se elevan, se ennoblecen, se serán, libres de la última supersti Fumanizan.
ción, la negación de la Naturaleza. La obra poética dice Morote He ahí la fuente misma del arte la obra musical del sublime autor grandioso de Wagner. Sólo la Na de Los maestros cantores de Tristuraleza escribía en El Arte y la tán e Iseo. del Ocaso de los. dioRevolución Duede descifrarnos el ses. no es la. no es la producción de un gran destino del mundo: en la me tista que no es más que un artista, dida en que yo estoy contenida en sino el espléndido florecimiento de un yosotros, dice Natura a los hombres, alma que, por ser tan grande, por vivís y florecéis vosotros; en la me ser tan genial, aspira y logra expredida en que en vosotros no estoy, sar por la música mundos enteros os consumis y perecéis.
del pensamiento humano, ideales que es precisamente este sentido del lian sido y que ya no serán, visiones arte el que nos hace más sensible ła anticipadas de la Ciudad futura.
Naturaleza. No se trata afirma el gran público que siente las Siegfried de este arte moderno dis ansias de Libertad, de Justicia y de pensador de riquezas, cuya flora Verdad, sin él saberlo, acude al tezción es la podredumbre de las cosas tro a aplaudir los mitos. poéticos y y de las relaciones humanas vacías, musicales por los que ve a la Humasin alma, contra Natura (El Arte sidad ir caminando a la gloria final y la Revolución. no se trata de este de un planeta mejor, en que se reaarte infecto que no desdeña ni el lice el bienestar de todos. Sus héroes óbolo del pobre y se introduce en no son los héroes que, en defiaitiva; las entrañas mismas del proletariado mueren para dar la vida a hombres enervador, inmoral e inhumano y más perfectos, sino representaciones esparce en todas direcciones el yene de la terrible lucha por la perfecno de su savia; sino del arte inde ción, pendiente, fibre de todo convencio. es que, como sostiene el cama. nalismo; de la belleza en acción, rada Siegfried, Waguer se inspiró en de que nos habla Wagner; de la la antigüedad griega, en la cual la estética racional que proclama Dun Humanidad se elevó hasta las cum