Nihilism

166. RENOVACION el principio de sus decisionës. una do a la crrestión moral. Ni siquiera se concepción que, en apariencia, des. la ba desflorado. En moral no se trata dega la iniciativa individual, que pas de estudiar los productos de nuestra rece ver en la conciencia una resul actividad, sino de colocarnos en el tante pasiva, un efecto y 10 una momento mismo de su producción: No.
a, suscita innledjatatiente las más examinanios lo que está planteado, ti naturales sospechas. El objetivismo siquiera cómo lo planteamos: lo tramoral es el escepticismo moral, es el lado carece de interés para nosotros; nihilismo moral.
el tratar únicamente nos preocupa.
Pero esou fundados esos temores? Lo que desaparece con Levy Bruhl. Puedle toda la moralidad ser deduci lo que separa intencionadamente, es da, o miás bien, inducida de la inateria precisamente para nosotros el punto social? Basta plantear el medio y la de vista moral, y la nioral está toda sociedad el diedio y la sociedad am. en ese punto de vista, Si el sociólogo bientes, para que la moralidad sea? tiene el derecho de descuidarle, el filó.
No deja el objetivismo de los sociolo. sofo, que se ocupa de la psicología gos lugar a una interpretación de la moral como del hombre preocupado realidad por la conciencia individual? por el problema de la acción, tiene el Absorve el problema moral, o por deber de retetlerle, mejor decir, le supone?
Es preciso, piles, restituir a la conConocida es la concepción de la ciencin el sentido y el lugar que las anaturaleza socialo, desarrollada por tentativas objetivistas inal interpreta. Levy Bruhl. Del mismo modo que das o llevadas al extrenio amenazaban tenemos lice dos representaciones acerle perder. La iniportancia conside la enturaleza física, una sensible derable de la ciencia de las costumy sulijetiva y otra conceptual y olje þres no debe ilusionarios: ofrece sin tiva, así también debiéramos tener dos duda un punto de apoyo indispensa.
representaciones de la realidad no ble a la moral; pero 110 es la moral, ral, tina en la fornia de conciencia y ni siquiera la reemplaza. No huy mootra en la de leyes naturales. Así ral sinto para y por la conciencia, para como los sonidos y los colores tan el pensamiento reflexivo que tonia sido reemplazacios por las opclas del posicióu antes de obrar.
aire y del éter, asimismo fluiestros tica en causa cuan.
sentimientos y nuestras obligaciones do se trata de deterniinar, de adoptar habrían de reemplazarse por equiva una decisión, plantea, cii efecto, el lentes objetivos. Los hechos morales, problenia moral, o por mejor decir, ordenados entre los lieclios sociales, reduce todo el problema moral a una llegarían a ser asſ objeto de ciencia. sencilla cuestión de posición: posición La fåturaleza floral quedaria sonietida de la voluntad respecto de los diferenal niismo deterministno que la nattira tey fines posibles de actitud leza física.
que ha de adoptarse en una circtus.
Presentada la tesis bajo esta forma, tancia dada. Comparación y evaluaes irreprochable y pueden aceptarse ción de las soluciones eventuales y todas stis conclusiones como la evi. elección de la solucióii preferible; lle deucia misma. Los hechos sociales ahí el problema.
son científicamente deterinirables: las La moral es, pues, una determina.
costumbres, las lenguas, las religio cióit de actitud, la cuestión moral lo nes, todos los productos de la acti ces de preferencia y de evaluación.
vidad humana son, al mismo título ¿Qué es preferible: matar o 110 matas?
que los fenómenos físicos, regidos por Mentir o no mentir. Qué debo liacer?
leyes constantes, que se pueden des. Qué debo evitar?
cubrir y formular Como se ve, el problema moral se Pero si se ha respondido así a la distingue sencillamente del problema cuestión científica, no se ha respoudi científico. Un conociniiento ohjetivo cierto Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miquel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.