106 RENOVACION CONTRIBUCIÓN AJENA!
La Revolución Profanan, nuestro juicio, la révo.
lución los que la llevan sierppre en los labios y nunca en el corazón ni en el pensamiento. La profanan los que la vocean por calles y plazas y sori inca paces de realizarla. La profanan los que la desean sólo para la satisfacción de sus apetitos, y no cuidan, ni poco ni mucho, de indagar el remedio de los males que la patria afligen.
No es la revolución tipa torpe mere triz ni una desgreñada furia: es una matrona de yirit porte que aparece en las grandes crisis de los pueblos ma da de una antorcha con que purifica y alumbra. Abre las naciones nuevos rumbos y nuevos horizontes. y las lleva cou paso firme al reino de la justicia.
Hace estremecer a su vez todas las instituciones caducas y derriba los alcázares et quese encastilló el egoísmo.
Cómo se la evoca? No con voces ni con más o menos fingidos entusiasmos, sino esparciendo a la luz del día la de las ideas y guardando en la sombra las espadas. La ahuyentan los escándalos y las intempestivas yociferaciones, sólo buenas para que sus enemigos se alarmen y prevengan, Hablen menos de la revolución y obren más los que la traen siempre en jos labios; no vendrá fuerza de llamarla, sino de merecerla. P1 MARĢALL De articles, 223.
Errores del socialismo de Estado Los errores capitales del socialistho, secreto consiste en haber encontrado del socialismo autoritario, diría te esas leyes, Cuando 10 se conocían las jor provienen de confundir 1a Socie leyes de la naturaleza, para explicar dad con el Estado, y de creer que 12, el hombre el ruido del trueno, la catda sociedad tiene leyes distintas de la na del rayo. apelaba gia, arrastrá.
turaleza del hombre, cuando no es más base las plautas de las teocracias, que el complemento de esta misma Cuando 20 conocía las leyes de la sonaturaleza. Así conio en el universo ciedad, para asegurar su vida, para los agentes més impalpables y etéreos, realizar su destino, acudía el hombre la luz, el calor, ta electricidad, el oxí una falsa organización social, tin geno, el carbono, alimentan la vida, poder absoluto, un derecho celeste, formau los cuerpos, así las ideas, las de origen extrasocia. de origen diyifuerzas morales, esos agentes invisi. Do. Pero desde el momento que el bles, pero poderosísimnos, forman la hombre conoce las leyes sociales, sabe sociedad, reflejo del espíritu. f1smano, que no son en su fondo y en su forma realización de su vida terrena en toda sino las misinas leyes de su naturaleza.
su plepitud. La sociedad es un ser La ley característica de la naturaleza real, objetivo, con propia vida, com htimana, aquella mediante la cual se leyes tan naturales itevitables como distingue al hombre de todos los seres las leyes de la mecánica celeste, El que le rodean, sujetos tina fatalidad inevitable, fuerzas que no pueden En esta sección que by Igłciamos, y que entare romper; la ley primordial de la patticuidada por nuestro distinguido como padete José Peat. raleza humana, es la libertad. Por co11 consignar AA o pocas talagas de sincerida vent.
das voces de campos ajenos a nuestra, que robus ecuencia, a medida que la sociedad leceu sin onbergo, la nm05 dorriente do questras, sea más justa, se aproximará más la conviccionus libertaries.
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