José Prat

94. RENOVACION. Fuimos la oscura plebe fascinada que en la nave del templo arrodillada se resigua al horror de su destino. y que ante el oropel de la fachada.
inclina su bunildad y alire canino; fitimos la oscura plebe fascinaila que adora la injusticia consagrada. Fuimos el triste y colosal rebaño que entorpecido por un sueño extratio.
construye los palacios inauditos, r.
el que sufre y trabaja todo el año Para komentar el bien de los ahítos, fuimos el triste y colosal rebaño.
sumido en las tinieblas de su engafio.
Fuimos el nervio, la pasión, la brava. bestia que arrastra el peso que la enclava, la que aparta los diontes, el atleta. que con patentes másculas socava las oscuras. eutralias del plaueta. fuimos el nervio, la pasión, la brave. fuerza ducha del niunclo y de él esclava. Pero hoy aquella gjerva escurecida los esclavos del dolor convida. conquistar con su porción de holgura la gloria futuarcesible y merecida de hacer del mundo un oasis die restura; pero hoy a tielle sier ya escarnecida. 91 puede, en un gesto, renovar la vida. Vamos hacia la cumbre donde ondes el estandarte rojo y nuestra idea.
Vamos libertar og bumanos.
y difundir la surora que clares.
sin tasa para tolas por los llanos.
El estandarte que en la cumbre ordea signo de paz y de concordia sea. Sol de sangre.
Por indiensos caminos solitarios, En la sangre del šol busca su origen; huyendo de ignorrdos campanarios, torvos y extraños sentintiertos rigen los peregrinos yan faltos de aliento. su reflujo fatal hacia la qurora Y de aldeas siniestras y lejanas. y jadeante, vencida y sin aliento, les saludan, al paso, 145 campanes, se arrastra, latigueada por el viento, con natas que cabalgan sobre el viento. royendo el amargor que la devora, El horizonte bajo el sol se dore. mañana al triunfar, cuando derritse manchado por la sangre de una aurora. 14 absurda sociedad que la proscribe. que se teme la vez y que se espera. brillará como un sol nuestros ojos.
las nubes de amotinan y se enipujan Sus pupilas extrañas y cle nientes, y, como buitres, al huir, se estrujan empapadlas en púrpuras ardientes, eti el. espanto de la poche buere. parecerán dog corazones rojos.
Tiembla y cede la tierra bajo el peso Sus manos, impacientes de batalla.
se zbre un abisto en el dintel de beso renoveran la gigantesca hortalla y todo es sepulcrai, conio una luda; donde Alimenta el sof sus encarnados sólo se oye el rumor sordo y la quejar y, en la ruda apoteogis del incendio, de aquella muchedumbre que se aleja plebe se alzará como di competicio. con fatigas de tuer, hacia gu cuna.
de toilns los soliozos ignorados.
MANOEL UGARTE. in. CRÓNICAS SOCIALES. Epilogos.
Epilogos i.
noty El Doctor Paul será indudablemente un nuevo recurso Nuevos esfuerzos Gillie, catedráti de vida eti estas págiuas.
co de la Univer: Don Elias Jiménez Rojas también Titi y sidad de Bruse. reanudará desde el próximo dúmero las, José Prat, valeroso y conocido su labor interrumpida, con una sección Escritor libertario de España, y el De lodo y de todos, que tendrá sin duda Doctor Andrés Maria, médico distin el interés práctico que siempre tiene guido que ingresará pronto este país, la labor del sabio y distinguido amigo.
nos lian escrito sendas cartas portado Con tales perspectivas, está de fiesta ras de estímulo para la obra de nuestra el grupo que alienta y sostiene la obra Revista. En esas cartas nos prometen persistente que embarga nuestras euer su valiosa colaboración directa, que gías. Este documento es propiedad de la Biblioteca Nadonal Miguel Obregón Lizano del Sistema Nadonal de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.