RENOVACION concepción de sus derechos y de sus convicciones, los sentimientos intenilidades, en la escrupulosa sos. Teneradores de la actividad moral adaptación de su deber la armonía enérgica, pueden existir en todos los social y la solidaridad humana, en hombres; la aptitud para el entusiasJa diguidad con que rechaza recoin: mo no es el monopolio de los creyentes pensas castigos sobre attirales, se ni de los libres pensadores. Lo cierto guro de obtever iobetisa satisfacción es que bo puede obrarse de una maneIntima si su acción es doblemente des. Ta desinteresada, con fuerza y CODS interesada. tarcia, si no se tiene alguna creencia. La obligación la halla cada cual en alguna esperanza. Njoguda toral versi mismo y en el ideal que se adopta. daderamente seria ha pegado esta Además, hay muchos creyentes crimi. verdad. Para unos el ideal es de orden nales para que pueda decirse que la exclusivamente metafísico, trascendenreligión es un sostén moral de detnos tal; para otros se desprende de los trada ineficacia. hechos por la razón. Por otra parte, no es necesario ser. La razón y la lógica dan idea de la servidor de un credo cualquiera para justicia social. La moral racionalista dedicar las fuerzas vivas del ser hu utjlizará, pues. la aptitud de entumano al culto de un noble ideal. So. siasmarse en el sentido de la justicia bre este asunto, véanse las interesan. y de la humanidad; coloca, además, tes consideraciones que, sobre la su ideal en la sociedad y no fuera pi influencia de la moral racionalista y sobre el mundo; recurre ante todo rechazando la aberración de las reve un sentido social que los místicos ig: laciones impiestas sin demostración noran por completo. Justicia y solidalas gentes crédulas, expone el profe. ridad, he ahl las dos necesidades sor Tabureau. primordiales, esenciales y elementales.
Lo que impulsa al hombre apli que subordina todos sus pręceptos.
car su facultad de desinterés y le exal Sobre este capítulo emite estas exceta, es el interés mismo que atribuye al dentes reflexiones. objeto que quiere alcanzar; es el sen Pidiendo a la conciencia la obe timiento del valor que atribuye al fin diencia la ley de justicia, tenemos que se propone; el hombre es moral una noción del deber que reposa sobre en la medida en que el objeto fin de nuestra razón, sin necesidad de intersu actividad moral es susceptible de vención de ningún principio de orden interesarle y de entusiastarle. En úla trascendental, nístico; basta para destimo análisis, el atractivo la belleza cubirla la simple facultad de entendiseductora de su ideal es lo que suscita miesto, Esta nación del deber consien él la constancia, el sacrificio, la derada en abstracto no les permitirfa moralidad.
el estimulante necesario para vencer Como se ve, las condiciones en que sus debilidades sus pasiones; pero si una moral alcanza la mejor eficacia, se considera la vida en concreto, no consiste en que proponen un fir que se puede menos de reconocerse el prestiel hombre atribuye un valor superior gio que de hecho ejerce la idea de jis y en que cread el citado psicólogo que tiva. Si se dice un hombre: eso es se llama la fe. ini. injusto, siente en sí elevarse una proLa moral positiva, como todas las testa; si percibe una injusticia se sen.
morales, tienen por objeto originar la tirá conmovido y querrá que cese.
en el sentido psicológico de la pa. Considerando la vida de nuestra lebra, es decir. Ole OTODOne al hom época. vemos la fuerza inmensa del hre un ideal, un fia que exaltará en el sentimiento de solidaridad, que remueve los sentimientos morales. La fe, como las multitudes y les induce las acciolo reconoce todo el mundo, no perte nes generosas. Todo el que ha vivido nece exclusivamente un sistema de cerca del pueblo he sentido la intensicreencias determinadas; las fuertes dad de la potencia de acción del prinEste doamento es propiedad de la Biblioteca Nadonal Miguel Obregón Lizano del Sistema Nadonal de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.