Violence

RENOVACION CRÓNICAS: SOCIALES. Epílogos 41 Terminado el im la frontera; y tal situación asaz moLo conquista ponderable derroche lęsta intranquilizadora permitió sin del oro con que el Gobierno eubargo a los más cuerdos realizar caForma de este pals creyó de lladamente su progreso y saborear sio su deber agasajar los representantes aspavientos el embuste de su alttouo.
del gobierno de El Salvador, en todos miſa. Situación tan poco cívilizada, no los pensamientos no oscurecidos por la pareció correcta al eptusiasoio paternal fatalidad de un mentido destino nani expansivo de que vino adolecer en fiesto, ni corroídos por el orín de un inala hora el disfrazado imperio norteinterés oportunista, se alza conno una Americano. De allí emanan nuestras esfinge esta interrogación abritiladora: profundas tristezas de as tristezas del presente y nues.
Serán esos sacrificios desdorosos los tras vicisitudes políticas del porvenir.
únicos frutos de la fraternidad política Proipulgados por imposición del ceutroamericana que ahora se predica águila rapante del porte los tratados son de copas y ruido de 11onedas? de Washington, y por aceptación me Sin necesidad de ser profeta, pero ui drosa interesada la voz de los gosiquiera adiving, bien puede respons biernos sigliatarios, la vida oficial de derse; si. otros tambiéu piés desgra estas nacionalidades quedó de hecho ciados para el pueblo pusiláuime cuya circunscrita al molde diplomático de incapacidad para la protesta lo uince alle becerrería dorada que es la violencia yugo del oprobio, mil veces inás gro feudal del porvenir. sero y ultrajante que aquel que abate Vasí vamos danzando entre el círculo hasta la tierra la cerviz eutristecida de de Aqtiellas convenciones, obligados al los bueyes.
más indecoroso derroclie como ejercicio No bastará, uo, que pasemos cou de desgaste impuesto uuestras fuersuinisión desesperante por el bochorno zas por quien aguard: de que nos vean los imparciales gastan. Aniquilarnos con decencia, el instante ya do es fiestas y aleittyas el oro niendin cercano de Atestra laxitud.
gado los prestajaistas europcos, quie u medio de todo, ag curioso oir la sieinpre tienen uo hacha que aſlar en capdorosidad con que la Prensa de aquí las espaldas de esteril de estas nacion pregona el florecimiento autónomo de jies. Será también preciso que miremos nuestro país, y se ducle casi sinceramás tarde medida que el programa inente de que en Cuba, en Nicaragua, de nuestros conquistadores vaya reali en Panamá y en Honduras países de zándose correr por los campos que cers menos blanda que la guestra el otro riego inás fresco no tuvieron, la garrote del yankee esté campando con sangre enfermiza de sutuisión de nues proditorio desenfado. Si los que con tros campesinos.
tal licor de optimismo pretenden enSin tentes de recelo y aun siu la escasa briagar los centinelas de su conciencia, luz de una preocupación, es tarea sen recostaran sy dialéctica un viuuto cilla darse cuenta del por qué de lo que sobre el regazo del raciocinio, forzosaestá pasando.
mnente llegarían establecer que no Enantes vivían los países de Centro. tenenios por qué vanagloriarpos de un amuérica royendo su miseria política y sinple detalle que lo sumo comproenseñándose los dientes entre sí, pues barſa tristenieute lo innecesario de la tos los ojos vigilæutes en el renglón de violencia para con nosotros.
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