José María Zeledón

376 RENOVACION tais.
tento de motín del cual es casi seguro con aplauso? Por lo demás, cuánto ce.
triunfo hubieran derivado lebramos que la salida låvad enconsus ideales.
trado el mordisco. que ti venga de No, es preciso que nuestros adver las rabias del antro criyas lobreguesarios no tengat razón cuando fios ces suis pensamientos iluminados 120 gritan desde los sillones de su como debeo retornar jamás, didad, que nuestro clamor lo hace La iglesia católica, por boca de sus envidia y que el odio interesado es el. sabios y piadosos doctores, siempre fermento de nuestras convulsiones ut. distinguió a la mujer con Sit auatenua Sacudamos al fin la cadena de opra vergonzoso: Qué tlicho que aún se bio que nos esclaviza: yerga para atajarle el paso al ver que Seamos alguna vez sinceros, y de rompe los frenos de la incapacidad y ciaremos al mundo si es la revolución despedaža los vientos del ridículo la. por la putrata el sólo anhelo de nues infalibilidad de las sentencias doctotra fantasía, o si efectivamente lleva. ralestini. mos delante de nosotros la lámparilla. de una poble ilusión cuando pos agi. 18 atim um Gasta su tiempo inútil tamos en esta que han llamado lucha cartelmente la reacci redentora tantos merodeadores de la re atraernos con el desacción. plante de la diatriba, los. wiriini. desfiladeros de su derrota. Respondemos la: Ya lo dijimos al comepzar nuestras carta Carta. carta con que cari labores, y ahora lo repetimos con porá un amigo fiosamente nos invi. fiado empeño. acudir en de. Elogios y censuras piedras y flofensa de las señoritas graduadas de res, illos serán lanzados desde los balBachiller en el Liceo de Heredia, soez: cones de todos los criterios, y no recon.
mente acometidas por la revista cató geremos ni unos ni. otras; pues no lica que se llama Le Nave. in hemos venido discutir nuestros mé. Entendemos que tal defensa está de ritos que sólo la propia conciencia sa: más en el presente caso. Las gentiles brá juzgar con acierto. Necesitamos apazonas que encabritando ideas pak nuestro tiempo y nuestra energia para. san boy gallardameuteá nuestra vera ir con ellos a la conquista del idealo. 10 hau menester el secular escudo ya Bien comprendemos que la clerigasonil que en todo tiewpo dio socorrido lla piilitauteLitaute muda de uno pieza cuanampara las debilidades femetidas do debió repeler con energía las esto No sou bachilleras. No quieren ser cadasmortales que dirigimos a su abogadas. armazón pittarrajeada trata ahora de. Pues bien sabido tienen ellas que levantar camorra creyéndose ainpara. ingresan una lucha brava en la cual da por visibles influencias oficiales. No eden pretender campar, con fal. se resigna al desdén en que tenemos das. su arrogancia desde que la derrota. El profesionalismo en que se enre. electoral recién pasada y la angustiosa dan, nos repugna eu los hombres. Pa penuria en que se arrastrau sus órgara las mujeres, para nuestras pobres nos de publicidad en un país que por il mujeres atascadas todavia ex canones suyo habrían tenido, eliminaron ante. de concilio y lodacal de dogrias, hace nosotros su entidad como fuerza con. attestra buena voluntad una excep. tendora linia. ción. Al fin y al cabo su entrada en él. Mas, como los: árabes. del cuento, tiene todos los encantos de un afag. Vamos a la mecà. 1: Ece y todos los traqueteos de un rom. Como habríanos de detenerijos pimiento. Por qué no decir que por espantar los canes que anuncian nues. este solo aspecto de su empresa, la tro paso triuufal con su algazara. miramos, con regocijo y la seguiremios JOSÉ MARÍA ZELEDÓN IMP. ALSINA, San José. Costa Rica