RENOVACION PÁGINAS LITERARIAS La hoja de parra.
Las dos de la tarde acabau de dar pues lo esencial era que al aparecer su en el gabinete, amueblado con el Injo amiante aun tuviese suelta la sedosa aparatoso insoleute propio de una nadeja que le inspiraba tautas frases cortesana vulgar enriquecida de proc lisonjeras, dándole ella pretexto para to, cuando. Magdalena, envuelta en estar con el escote entreabierto y los ligeras ropas de levantar, y aun ten. brazas desuudos, puestos en alto hahloroso el cuerpo por el frescor slel ciendo mil einbelesadoras monadas.
baño, atizó los leños de la chinienca Vu buen rato pasó escogiendo y y aproximando al fuego el muebtecillo apartaudo medias. y pligtillas que le que le servía de tocador, encima del babían mandado de una tienda; púsose cual fué colocaudo cepillos, peines, luego uvos zapatos nuevos para contarretes; frascos, polvoreras y cuanto Fencerse de que le varían un bonito había jieniestet para peinarse; eli se pie, antes de pagarlos, y, por último gaida inclinó el espejo liacix si, se se probó un cubrecorsé y una bata, sentó, y, sin llamar la doncella. co permaneciendo en açloración dest niismęczó soltarse el largo y abuloso ma ante el armario de luna, complapelo, antes casta ito. thuy obscuro, ciéndose nas que en los pri de aliora teñido de rojo caoba como el de las galas, eu su gallarda figura de malas venecianas a quienes retrató Tizia. drileña esbeita y en su gentil cabeza 10. Janiás peruitia Magdalenia que de fijer dominadora y altiva. nadie le ayudase en aquella important Eru rubia y umy blanca, verdade1 te operación del pcipado; primero, portemente hermosa y bien fotinada, aulle horfor justintivo que otra utjer le que algo gruesa, como si eri. plena juInanosease la cabeza, y adeinás porque veritud pretendiera la carne ahogar deseaba estar sola cuando 511. Amante, la belleza. Tenía las facciones delicascgún costumbre, iba siempre a la das, los ojos obscuros, cle mirar expre: misura liora para deleitarse en coil sivo, y los gestos y ademuanes tan enér.
templarla, bien arteilauado en 110 si gicos y desenvueltos, que un tiemupo 11611, en tanto que sus manos primo delataban la vivacidad de su carácter rosas se hundían y surgían de entre y el empeño de inostrar una gracia las matas de cabellera fortunido altos jutás provocativa y lilure de lo que xt1 y hajos, bucles, ondas y rizos. hasta propia índole consentía. Ann no deladejar prieto y sujeto el nono con lor. tahan sų lenguaje y bioctales completa quillas doradas, uuientras los pelillos perversióu; tuis va salva desplegar revoltosos de la nuca, que llaman to Inodo de recursos seguros, el licènciolanos, Andghani sueltos en torno de so desparpajo y la franca deshonestisu quello como rayos de un nimto roln. cad de quieli para vivir se poue precio, Por. coquetería por dar tiempo esperando acrecentar con el estímulo qiie dueño y señor llegara, iba lo el deseo y con el impudor la gabancia, más despacio posible, levantándose Coniprendía el poder de sus atractivos veces para distraerse en otras cosas: y lo extremala, siendo tan coniplaciente y 111111osa al concederse como lectores de Rexavacix axrider: 211 lurat vdespótica para comuar stianiantea haya ito este interesan prilouin cririnn Je nan milo 11. 1s eminentenariores nous te, que la quería poco y la estimala Controlu prorfus. Puroce Maher sita nscrit airos. Para minter 21 ienos; pero ballitha en ella dulcísino Villesle tror subores respetables de terorul cu pleo sus sentidos porque era her: Contrn fairnnosalida rodrihto y asistente noche con fruicken los espectáculos del vifundo Tuatro Ulisapia, mosa, y completa satisfacción su yale. CUADdUn mis sustraciosas entsotenisientos en los hartios haine.
nidad porque le costaba fillichio.