RENOVACION Conversemos los obreros ¡Cuántas veces eu esos cortos cuanto Cuando así discurren los dichosos. y dolorosos intermedios de tristeza, eu os miro paşar beodos veces arrastrauque el desaliento setiores fugazmeute do la vida con desprecio, tentado estoy las cuadrigas de la voluntad, we he dedecir aquellas gentes: tenéis razón, prégiutado si 110 os hacemos viás biety sou ellos los culpables.
daño quienes de vuestro derecho os. Pero uo, quie al cabo se aleja de iui conversanios llevados por el afán nunca peusamiento la aulargura y el 50 de extinguido de libertad y de altivez! la esperanza enciende en mí la hoguera Os veo pasar ni lado en el trajín de siis resplandores.
de todos los instantes, indiferentes Ya. sé que la cuestió social entre las cosas que en torno se realizan. was nosotros es bieu diferente de la que eni cullando algunas de las frases sonoras tierras europeas tiene planteados incon que vuestros falsos amigos os re solubles todavía los arduos problemas galani cuando os acercau la alcancía de de la vida proletaria. La fertilidad de s119 antojos. al feros así aislados, y nuestro suelo y la beuiguidad de nuesal couteinplaros así inconscientes de tros climas: la ausencia en nuestro Vliestra verdadera situación eu la vida, atribiente siel priasma aristocrático y la 111e parece que sois niños en cuyas división tradicioual de nuestras proManos se ha intentado poner un jugue, piedades, nos han puesto en la mejor te peligroso: de las condiciones para formar la taLos críticos pertinaces de uitestro cioualidad ideal, aquella en cuyo seno empeño, que desde los iniradores de su puede y debe realizarse el reiviado de dicha rien de la procesión de puestros la Justicia y de la Paz.
idealismos misericordiosos, ratos pas. Pero sé, también que esas impoliderece que acertarai.
ralles condiciones van modificándose No liay tal proletariado entre 1105: gradualınente, y que el acaparanliento otros, dicen gritos los contentos dela de las tierras por lin lado y la creciente vida. En nuestra joveu sociedad, nadie exacción de los gobiernos que va chliperece de hambre. Ni los holgazanęs, pando con no saciada codicia la savia que siempre hallani ainparo, en el Es: de los productores, llevarán 21uestro tado en el sentimentalismo de las problema social un campo parecido gentes. Por la puerta de mérito, fan al eri que se debaten los dolores, de las entrado aquí hasta las más grandes diasas desheredadas eu Europa. Hoy alttias sociales y políticas, los hombres mismo en los campos de la Justicia.
esforzacios que han querido surgir. Puiestro lugar es inuy otro del que ocu: Entre los estadistas de más fuste y los pan claudo caeni o cila do demandau acaudalados de mayor riubo, eutre los aniparo, los hijos del bienestar social.
profesionales más eminentes y los in SI, vosotros abriréis al fiu los ojos dustriales inás afortunados, descuellan la verdad. Comprenderéis al fin que los hombres inás oscuros éir su origen. la lucha se acerca, cuando siutájs sus Nadie cortó las alas de su vuelo. Nadie primeras enllestidas, y os aprestartis se, interpuso en su avauce liacia la ella con la más edificante de las ener, mieta. Qué más pretenden los huruil gías.
des Aun 110 labéis sentido en todo su Además, con raras excepciones, el rigor las necesidades del combate. Por trabajo aquí no es exctavizante. nadie eso os encogéis de honibros y no hacéis se tiraviza, nadie se explota, y casi tos esfuerzos que estáis obligados, sienipre sou precisamente los patrones ci el sentido de puestro mejoramiento. quienes caen bajo la tiranía de sus. Marehad tras la verdad sin miedos.
obreros. y sin vacilaciones, mas no corrais des.