YIDA, TERDAD 101 Uo dia un joven preguntaba que nopela podía obscquiar a su aovia. Se le hizo la observacion de que en la lectorá cs en donde se encuentra uno de los medios mejores para levantar a su prometida, y le fueron citadas varias povelas que podian aşadarlo en esa tarea generosa. Lo que yo quiero contest6 un libro en el que la protagonista sea abnegada en su amor, que llegue basta el sacrificio por Bu dorio. Esto es, en la lectura que los jóvenes facilitan sus respectivas amadas buscan aquello que pueda ayudarles a despertar la pasion en cllas, lo que pueda colocarlos por encima de los demás, dunca lo que trate de levantar el espíritu de la mujer. Siguiendo esa intencion se prescan novelitas como Carmco, Maria, Pablo y Virginia, las de Carlota Braemé, en fin, todas aquellas que tieper mas de sentimentalismu que de inteligcocia.
17 No voy al baile, dice un joven a soovia y espera con actiedad la contestacion obligada, sabe muy bien que la piña debe decirte que tampoco ella irá y, en efecto. tal estremo se ha llegado que las señoritas privan de muchas diversiones únicamente porque su pretendientelęs dice que el no puede asistir a esas reuniones.
18 El primer desco que espresa un joven cuando erupicza sus relaciones amorosas con una señorita cu el de que po mire, ni hablc a sos dovios anteriores, negándole de esc modo la libertad que la forencita debe tener al elcgir ses amistades.
19 En lon bailes, las mujeres están obligadas a danzer sia darse momentos de reposo, puesto que no pueden llaMarae así los jatervalos cortisimos que, entre dos piezas, Aquí se acostuinbran. Cuando alguna de ellas se escusa de tomar parte en una pieza dicicado que se siente fatigada, se fa lluma presumida y, a veces, la dejan descargar Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miquel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica