140 vlos VERDAD agudad en sus estudios. Con facilidad evocá sus recuerdos; su crcétente memoria a veces causą asombro; Juego.
si es mas pacieote, mas observadora y de mejor memorin que el hombre, podemos dedticir que, en las luchas de la inteligencia, puede sostenerse a la altura de su compaHero Por hoy, no la vemos levagter la frente orgullosa como la levanta el liombre, pero es debido a la educación deficicnte que recibic, resultado del egoísmo de muchos individuos que no qajerca encontrar ca sus hermanas, espasås e hijas, mujeres superiores cuya inspecció, inteligente les impediría entregarse a todas las aventuras a que están acostumbrados. 12. El primer taleato de las señoritas es saber ha.
blar con todos, ellas deben tener influencia directa sobre las ideas y las opiniones de la sociedad: para eso necesitan el estudio que también las libertará de cse prejuicio establecido por la ociosidad elegante que dice que la mujer es un ser agradable, pasivo, hecho úuicamente para la distracción y el placer del tiombre.
Los escritores eștériles que tanto abundant en nuestras regiones defienden el prestigio quc lian adquirido ta tre las señoritas que los aprecian porque tio saben peasar, diciendo que si las möjcres se educan adios sus encantos, adios sus gracias trastornadoras. como si las esposas y las madres con sus encantos y sus gracias y sin la inteligencia podrían velar por la comodidad de su marido y de sus hijos, educarlos y guiarlos en los estudios y en las ca presas industriales, comerciales y artísticas.
13. Si lag solteronas fueran instruidas podrían dedi.
car sus energías al magisterio, a las artes y a las ciencias Sociales sin ser llamadas bachilleras y no las veriamos busceodo, para su dignidad altrajada por la indiferencia,