1 VIDA VERDAD 95 tra comprado la reputación de que se goza; ni quica grite hasta cansarse co nombre de uda pseudomoralidad bastante extraña, piliendo que se espulse basta de los pascos públicos a las prostitutas establecidas, mientras se codea con la alta y dorala prostitución, y permite que se reunan en todas partes las señoras y las niñas dle costumbres correctas con las que no lns tienen. esa juventud dccadente, que en donde quiera hace altares para ponär sus ídolos grotescos; que colabora cficaznieute en turuos y ferias para la construcción de teroplos que no se torniaan jamás para la realización de obras de Depelicerein piadnsa; que dobla acobardada la cerviz ante los necios sidúbolos de la estufticia sectaria; que contenapla sin cornutarse siquiera el infame secuestro de viñas infelices, y casi sieinpre bellas, llevado a cabo por los ministros de una religión de sombras y de piucr.
te. es el soporte principal de una organización sociál. vetusta que ya cruge ante el azote del viento de las ideas contemporíncus.
Sobre las frentes de los bombres que se preparati lidiar en las recias bátallas de la vida, y que formarán la juycitud de mañana, sopla ya una aura de verdad y de justicia. Ånte la adolescencia de estos días, los horizontes se ensanchan y paisajes desconocidos y bellos surgen de entre las brumas de u: pasado que va lentamente perderse en el abismo del olvido.
Es el verbo luminoso de Zola que pasa cantando salmus a la vida, al trabajo y alamor; es el acento dulce persuasivo de Tolstoi que vibra ea todas partes como eco de triunfalcs armonías; es la predicación filosófica de