Germinal Ars. Veritas et Labor Camilo Cruz Santos Ca Vendetta (Cuento Josefino. Pret Sto, Eloisa BASI caer de una rubia tarde de mayo, Alberto y yo, quellemente tendidos sobre la grama verde y húmeda de Sabana, conversábamos acerca de. Ogestros ensueños y esperanzas, inientras Telamos el bumo gris de nuestros cigarros desvanecerse leutapente en et espacio azal, Eramos viejos camaradas, juntos ħabíanos sentido la nostalgia del nido en uu internado lejano, y continuanog siendo siempre muy buenos amigos. La coaversación empezaba languidecer. Por rara coincidencia, aquel día nos tentaba inás el diablilió de la meditación que el de la charla. En qué pensábamos? Seria imposible decirlo. En todo, es decir, eu tada; en sucesos de la vida diaria que nuestros cerebros de veinte ailos llegaban con las complicaciones de intrincados problemas. Yo contemplada descuidadamente la agonía del sol en su lecho de arreboles rojos y de nubecillas de oro, que dejaban eotrever retazos del cielo 1fiu pido de verano, o la cordillera verdeascura que recortaba el incendio del oca50 con su mole faneosa y triste.
De pronto Alberto incorporándose, me dirigió la palabra con viveza, camo protestando de mi indolencia. Hace mucho tiempo ue dijo que deseo referirte uda historia Intima, cuyo recuerdo lastima mi corazdo.
Le escuchaba en silencio, pero mis ojos que le invitaban cootirdar, wien le decíant et interés que ine inspiraba su confidencia. Conociste Marieta?
Hice un signo vegativo con la cabeza, y el contin 118. Dlla y yo éranios amigos y nos queria nos mucho. Nuestras familias cultivabad luy buenas relaciones, y yo entraba con cierta libertad.
en su casa, en donde se mę trataba como anivo de coglia uma, Había tenido amoríos en otro tiempo y aventuras galantes de colegial, hasta que hay que resaltó demasiado côuica, casi ridicula, puso fin mis calaveradas estudiantiles curándonie del ainor platónico y de.
jándome ou el. alia los priiiteros desengaños.
Marieta era ona chicuela de quince años, morena, de ojos pegros; la.