9 clase del Grupo Internacionalista. sigue a la cola de los aclamados sandinistas, la tarea los trotskistas, cuya lucha se basa en el programa de la volución permanente, es de mantenerse como el partido je intransigente oposición obrera. Quienes proclaman que la revolución proletaria y socialista puede llevarse a cabo en Nicaragua en forma pacífica, al empujar al actual régimen bonapartista paulatinamente hacia la izquierda, bien pueden ser las primeras víctimas de sus propias ilusiones.
Puede que los dirigentes del FSLN crean que su programa de revolución democrático popular representa una etapa intermedia entre el capitalismo y la dictadura del proletariado. Pero la experiencia pronto demostrará que sólo una exhibición de fuerza podrá detener la tendencia de las masas trabajadoras a transformar la victoria sobre Somoza en una revolución social en gran escala. si acaso ellos no lo sabían ya, se están dando cuenta rápidamente.
Cuando la agencia de noticias cubana, Prensa Latina, le preguntó al alto comandante del FSLN Humberto Ortega. Cómo es que enfrentarán Uds. la lucha de clases que se desarrollará en esta etapa. el respondió. Para impedir que esta lucha se agudice, es necesario implementar el programa apoyado por el Frente y la burguesía antisomocista. Luego, debemos luchar contra diferentes tipos de desviaciones. Granma edición semanal en inglés. de septiembre de 1979 Que la lucha contra las desviaciones significa represión contra la clase obrera pronto quedó muy claro, sobre todo en torno a la reforma agraria. Aún cuando de alcance extenso afecta hasta un 60 por ciento de la tierra arable de Nicaragua se ha limitado a aquellas propiedades pertenecientes a Somoza y sus secuaces. Esto es justificado por el ministro de reforma agraria, Jaime Wheelock, con el siguiente argumento: Debemos mantener la solidaridad con los miembros del sector privado que apoyaron el desalojamiento de Somoza (New York Times, de agosto de 1979. Pocos días después, responsables del FSLN chocaban con un grupo sindical maoísta (Frente Obrero)
que organizaba tomas de tierras cerca de la ciudad de León.
De acuerdo con Wheelock, las pocas ocupaciones desordenadas eran atípicas; las haciendas fueron devueltas a sus propietarios originales y los campesinos recibieron tierras de Somoza en su lugar (Granma edición semanal en inglés. 12 de agosto. obreros industriales de Managua. reivindicando compensación por los salarios perdidos durante la revolución. La reacción del gobierno revolucionario fue ordenar a sus fuerzas armadas que arrojasen a los trotskistas en un avión rumbo a Panamá.
De acuerdo con el Washington Post (21 de agosto. en la manifestación de Managua del 15 de agosto las pancartas llevaban las consignas La Revolución está en las manos de la burguesía y Pļoletariado al poder. Sin embargo, los expulsados brigadistas bolivarianos fueron acusados de contrarrevolucionarios y provocadores extranjeros.
Por cierto, esta expulsión ha sido un golpe en contra de toda agitación independiente de izquierdas entre los obreros nicaragüenses y debe ser condenada rotundamente por todos aquellos que se dicen socialistas. Pero el Socialist Workers Party (SWP) norteamericano lo ha visto de otra manera. El SWP no protestó en absoluto. Al contrario, dió cuatro explicaciones distintas de la represión sandinista contra los dirigentes seudotrotskistas de la Brigada Simón Bolívar, de las cuales una consistía en la citación sin comentarios de la declaración del ministerio del interior nicaragüense. Es más, estas explicaciones del SWP no sólo apoyan descaradamente al gobierno del FSLN en contra de sus propios camaradas. sino participan en la caza de brujas ellos mismos. Una declaración del 21 de agosto del Comité Político del SWP titulada Propaganda imperialista contra Nicaragua dice. La Brigada Simón Bolívar fue organizada por el Partido Socialista de los Trabajadores (PST) de Colombia bajo la dirección de una agrupación internacional conocida como la Fracción Bolchevique. dirigida por Nahuel Moreno. En lo que concierne a la Brigada Simón Bolívar, la Fracción Bolchevique nunca consultó a la Cuarta Internacional sobre este proyecto o sobre la política que la Brigada seguía. Esta política iba en contra de la política trazada por la dirección elegida de la Cuarta Internacional. Por medio de la Brigada Simón Bolívar la Fracción Bolchevique llevó a jóvenes militantes de varios países latinoamericanos militantes que querían ayudar en la lucha contra Somoza a una aventura sectaria. Posando como una sección del Frente Sandinista de Liberación Nacional, la Brigada Simón Bolívar vino a Nicaragua desde afuera para participar en sus propios esfuerzos organizativos cuyos fines eran flanquear a los sandinistas desde la izquierda. Su táctica fue responder con propuestas más extremas a todo lo que los sandinistas decian, intentando asi conformar una contrafuerza a éstos. Esta grotesca idea que gente de afuera puede mediante maniobras capturar la dirección de la revolución de aquellos que surgieron como sus dirigentes en el curso de la lucha no tiene nada que ver con el trotskismo, con el socialismo revolucionario. El desafortunado episodio de la Brigada Simón Bolívar era justamente lo que la administración Carter necesitaba. Perspectiva Mundial, 24 de septiembre de 1979 En otro artículo del Militant del 31 de agosto, que trata de Los hechos sobre la Brigada Simón Bolívar. el SWP califica de choque provocador la manifestación obrera de Managua y acusa a los dirigentes de la Brigada de haber actuado de manera irresponsable. Una vez más, el informe de los hechos sostiene que los intentos de la Brigada en el sentido de flanquear al SLN) desde la izquierda no tenían nada en absoluto en común con la política de la Cuarta Internacional. con ostentación se lava las manos de cualquier asociación: La Cuarta Internacional no es, en ninguna forma, responsable de las actividades de la Brigada. Para venir de la boca de gente que formalmente pertenecen a la misma Internacional. es bastante.
Expulsión de la Brigada Simón Bolivar La supresión de las tomas de tierras desordenadas no es el único ejemplo de medidas tomadas para impedir que la lucha de clases se agudice. La más notoria fue la expulsión de varias decenas de militantes de izquierda extranjeros, en su mayoría autoproclamados trotskistas, relacionados con la Brigada Simón Bolívar (BSB) que se precipitaron hacia Nicaragua en las últimas etapas de la lucha contra Somoza. El incidente fue descrito en la revista Time (3 de septiembre) al final de un artículo que alababa a la revolución misericordiosa que seguía un rumbo intermedio. De modo sorprendente, la primera amenaza seria ha venido de un grupo de extrema izquierda. Sesenta trotskistas latinoamericanos denominándose la Brigada Simón Bolívar, descontentos con los proyectos del gobierno para la construcción de una economia mixta incorporando empresas públicas y privadas, incitaron una manifestación de 000