Lecturas de clase del Grupo Internacionalista 141 Panamá, y en medio de las claudicaciones galopantes de Gorbachov frente al imperialismo desde Afganistán hasta Berlín, Washington se figura que mediante el soborno, la intimidación y la invasión puede volver a ser el gendarme incontestable del hemisferio occidental. Ebrios de triunfalismo, los imperialistas norteamericanos tienen ahora la mira puesta en Cuba. Se acaban de formar comisiones especiales.
bipartidistas en el congreso norteamericano con el objetivo de eliminar a Fidel Castro en el lapso de 12 meses. Es el deber urgente de la clase obrera de todo el mundo defender a Cuba contra el imperialismo norteamericano!
Mientras tanto, los insurgentes izquierdistas salvadoreños, cuya poderosa ofensiva militar infligió recientemente fuertes reveses al régimen de los escuadrones de la muerte patrocinado por Washington, se encuentran más presionados que nunca con el triunfo de Chamorro en Managua. Nosotros decimos. Ninguna traición negociada en El Salvador. Triunfo militar a los insurgentes izquierdistas!
Los trabajadores nicaragüenses deben resistir la ofensiva de Chamorro y la contra El triunfo electoral de la contrarrevolución democrática amenaza ahora con una venganza sangrienta contra activistas sandinistas y militantes obreros. Justo después de anunciarse los resultados de las elecciones, un activista sandinista fue asesinado por una turba de linchadores derechistas. Decenas de miles de obreros, campesinos, víctimas del terror contra, y miembros de base del Frente Sandinista para la Liberación Nacional (FSLN) desean oponer resistencia a la sangrienta reacción que representan 10. 000 contras aún armados, y a la toma de su país por Chamorro y sus padrinos de la CIA que la subvencionan. Quieren quedarse con aquella parte de la tierra que ha sido confiscada, defender el derecho de sus hijos a una educación y una semblanza de atención médica, luchar por los ideales y las transformaciones sociales urgentemente necesarias por las que dieron su sudor y su sangre durante los largos años de guerra y privaciones. La tarea actual es la organización de milicias obreras y que los trabajadores se armen para defenderse.
Pero los sandinistas pequeñoburgueses, cuyo programa electoral difería poco del de Chamorro, y que nunca se habían comprometido con un claro programa de clase para consolidar y extender las conquistas de la revolución popular, han desarmado políticamente a las masas trabajadoras, las han desmoralizado y entregado a sus enemigos. El quimérico programa de pluralismo político. una economía mixta y una tercera vía. ni capitalista ni comunista. como lo dijo Ortega) ha producido sus frutos amargos.
Como descubrieron los socialistas de Allende en Chile: es peligroso enfurecer a los enemigos capitalistas sin destruir su poder de clase.
Pero todavía hay una cuestión enorme. Quién tiene las armas? El Ejército Popular Sandinista de 65. 000 efectivos fue creado mediante la destrucción de la guardia pretoriana de Somoza en julio de 1979. Después de las elecciones, Ortega se hizo fotografiar con Chamorro al tiempo que se profesaban amor mutuo. sus indignados y asustados seguidores Ortega les dijo: Esta no es una derrota. y ahora estamos en mejores condiciones para luchar, mientras su esposa afirmaba la tontería de que es en realidad una victoria y un desafío para el FSLN (El Día, México, 1º de marzo. Pero los fogueados combatientes que les dieron su merecido a los contras en el campo de batalla saben que sus vidas están ahora en peligro, y están lejos de querer entregar sus AK 47s suministrados por los soviéticos. La mezcla altamente inestable y explosiva de un gobierno Chamorro y un ejército sandinista, con la suerte de los mercenarios contras todavía incierta, y la Unión Nacional Opositora (UNO) de Chamorro muy lejos de encontrarse unida, podría fácilmente llevar a una nueva ronda de guerra civil.
Unas brigadas para la defensa de la revolución han repartido volantes en Managua exigiendo: No entregar las armas populares a la guardia somocista y asesinos del pueblo (La Jornada, México, 19 de marzo. Mientras tanto mujeres sindicalistas en Managua juraban aplastar a los contrarrevolucionarios, cueste lo que cueste. Sin embargo, el comandante sandinista Víctor Tirado les ordenaba defender las conquistas de la revolución mediante una oposición civilizada, constructiva y legal (La Jornada, de marzo) una especie de cretinismo parlamentario llevado a extremos suicidas. Otros comandantes advirtieron en contra de actos que pudieran provocar una intervención norteamericana. En realidad, el FSLN ha accedido a una situación que da a los Estados Unidos mejor excusa que nunca para intervenir militarmente, por ejemplo, a petición de sus títeres democráticamente elegidos.
La dirección sandinista claramente se encuentra bajo una presión enorme y está respondiendo de manera contradictoria. Las iniciales declaraciones conciliatorias a Chamorro han dado paso a una postura más dura, afirmando que no cederá el control de las fuerzas armadas. Lenin Cerna, jefe de la policía de seguridad estatal, juró: jamás obedeceré las órdenes de Violeta. la vez, Chamorro ha anunciado su intención de substituir a Humberto Ortega como ministro de defensa. Tal es la transición pacífica.
Robles Pictures Dirigente sandinista Daniel Ortega, en campaña electoral por la presidencia.