114 Lecturas de clase del Grupo Internacionalista EVENGAR SANGRE EL SALVADOR!
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Igualmente, los trotskistas franceses denunciaron al gobierno de frente popular de León Blum por su perfida negativa a suministrar armas al bando antifranquista en la Guerra Civil española. Aun después de la derrota de la insurrección de Barcelona, Trotsky no rehusó apoyo militar al ejército republicano. Al contrario, escribió contra el grupo de Salemme: Propone la deserción del ejército leal o la insurrección militar. Si pedimos al soldado que deje de luchar entonces es necesario pedir al obrero (que, trabajando en las fábricas de municiones está dando ayuda material al gobierno leal)
que deje de trabajar. Respuesta a preguntas relativas a la situación española La situación de Nicaragua ahora es visiblemente distinta a la de España durante la Guerra Civil. Como en el caso de Cuba al principio de la década de los 60, no hay ahí ninguna dualidad de poderes sino un régimen nacionalista pequeñoburgués bonapartista que llegó al poder aplastando al aparato estatal existente (las dictaduras de Batista y Somoza y sus ejércitos mercenarios) y que no está aferrado al mantenimiento de las relaciones de propiedad capitalistas. Bajo el impacto del chantaje y la agresión de EE. UU. los sandinistas podrían ser obligados por Reagan a seguir el ejemplo cubano de expropiar a los capitalistas y consolidar un estado obrero burocráticamente deformado.
En Nicaragua de lo que se trata es de resistir la agresión imperialista, tanto económica como militar. En el volante. Defender a Nicaragua! de la campaña Nicadólares de la SYL señalamos que el embargo comercial es un acto de guerra, que podría conducir directamente a una invasión estadounidense. Anotando que Nicaragua necesita divisas para todo, desde armas y medicinas hasta repuestos de todo tipo, nuestro esfuerzo por recaudar dólares ha sido una expresión concreta de apoyo militar a la Revolución Nicaragüense ante el ataque yanqui. Ha tenido un éxito considerable recaudamos 25. 800 dólares en cerca de seis semanas debido precisamente a que existe una amplia conciencia de la necesidad urgente de ayuda material. Esta campaña da expresión concreta a nuestra consigna. Defender Nicaragua completar, extender la revolución! ubicando claramente nuestras críticas políticas al vacilante régimen sandinista en el contexto de una defensa revolucionaria contra el imperialismo.
La distinción entre defensa militar y apoyo político se remonta aún más allá de España, a la política de los Bolcheviques en agosto de 1917, cuando prestaron apoyo militar al régimen de Kerensky contra el general Kornilov, sin dar un ápice de solidaridad política al Gobierno Provisional que abrió las puertas a la Guardia Blanca.
Nuestra campaña por ayuda material a Nicaragua es una expresión de internacionalismo proletario según fue codificado por las Tesis sobre las cuestiones nacional colonial esbozadas originalmente por Lenin y adoptadas por el Segundo Congreso de la Comintern (1920. En relación a las naciones atrasadas y estados dominados por el imperialismo, las Tesis declaran. La obligación de todos los partidos comunistas de ayudar al movimiento revolucionario de liberación en esos países: el deber de prestar la ayuda más activa incumbe, en primer término, a los obreros del país del cual, en el sentido colonial o financiero, depende la nación atrasada.
Anotamos con interés que la única voz que se alzó en el Segundo Congreso en oposición a las Tesis en su una Workers Vanguard Washington, de mayo de 1981: La Fila Antiimperialista iniciada por la Spartacist League llama por la defensa de Cuba y la URSS contra el imperialismo.
totalidad fue el centrista italiano Serrati, quien dijo a los delegados de la Comintern: La verdadera liberación de los pueblos oprimidos sólo puede lograrse mediante una revolución proletaria y un orden soviético, no por medio de la unión temporal y accidental de los partidos comunistas con los llamados partidos burgueses revolucionarios. Este llamado a ortodoxia formal sólo servía para enmascarar su propio socialchauvinismo y su retirada al cadáver pestilente de la socialdemocracia que aunque profería frases huecas sobre la autodeterminación se negaba a apoyar los movimientos de liberación que combatían contra el colonialismo y el imperialismo.
La Rusia revolucionaria de Lenin y Trotsky prestó ayuda a muchos de esos movimientos, incluyendo a la Turquía kemalista cuando fue invadida por el ejército griego respaldado por Inglaterra en 1921. Esta fue también una medida necesaria de autodefensa, ya que el imperialismo británico continuaba siendo una amenaza militar constante para la revública soviética. Al mismo tiempo, la Comintern ayudaba en la construcción de un partido Comunista en Turquía. Tras expulsar a los griegos con auxilio soviético, Kemal Atatürk apuntó sus armas contra el naciente PC turco. Pero esto de ninguna manera invalidaba la ayuda original.
Los reformistas no distinguen entre apoyo militar y político, porque tratan de utilizar la amenaza y la realidad de la intervención militar imperialista para imponer la subordinación política a un programa procapitalista. La objeción a la campaña de la SYL pro fondos para la defensa de Nicaragua no es ultra izquierdista, sino derechista y abstencionista. Es parecida a las críticas hechas a los contingentes antiimperialistas de la SL por desfilar con banderas del FMLN en las manifestaciones de protesta sobre El Salvador. La External Tendency trató de adoptar una pose de seudoortodoxia, citando a Trotsky sobre la imposibilidad de presentar dos banderas a los obreros, un programa reformista para uso diario y