122 Lecturas de clase del Grupo Internacionalista parte del mismo ejército que los escuadrones de la muerte debe sufrir de tendencias suicidas.
En el campo sindical, FENASTRAS ha llamado por un foro nacional de todas las fuerzas que se interesan por la paz. Esta consigna fue realizada por la UNTS en mayo y nuevamente en julio del 86, incluyendo entre los participantes la violentamente anticomunista FENAPES (asociación de pequeños empresarios) y el Partido de Conciliación Nacional, durante décadas el instrumento de la dominación viigárquica y militar. Los trotskistas insistinius que un tal frente popular (o mejor dicho, antipopular) que ata los trabajadores a un ala de los explotadores no puede liberar a las masas salvadoreñas. Como ejemplo de lo que podría resultar señalamos la experiencia de octubre de 1979, cuando FENASTRAS se unió a otros sindicatos y al mismo PDC de Duarte para formar el llamado Foro Popular. Cuando oficiales del ejército, instigados por Washington, tomaron el poder para copar la ola de insurgencia laboral, el Foro participó plenamente. Fue esta junta revolucionaria que llevó a la guerra civil, y este Foro le prestó la cubierta popular para la escalada de la represión sangrienta.
Empezando con la administración Demócrata de James Carter, el gobierno estadounidense ha enviado más de mil millones de dólares a este diminuto pais centroamericano en su intento de ahogar la rebelión obrera y campesina. la imagen de moderado de Duarte y las tres elecciones si han sido un gran éxito de relaciones públicas entre los congresistas norteamericanos, quienes votan cientos de millones de dólares sin pestañear ante las certificaciones de derechos humanos por Reagan. En El Salvador, por el contrario, tanto el ejército como el FMLN hablan de una guerra de desgaste, mientras una población cansada de guerra anhela la paz. Pero es el actual auge obrero que apunta a la única salida posible de este baño de sangreuna movilización revolucionaria de la clase que tiene la fuerza para desarraigar la burguesía salvadoreña y sus asesinos profesionales. Por revolución obrera en El Salvador y todo Centroamérica!
Hoy día, se vislumbra una oportunidad revolucionaria en el istmo. Sin embargo, este momento no perdurará. Si los trabajadores no luchan por el poder, habrán nuevos baños de sangre. El proletariado salvadoreño puede ponerse a la cabeza de la nación oprimida, al luchar por un gobierno obrero y campesino. Pero para que los trabajadores se apoderen de San Salvador, apoyados por acciones guerrilleras audaces, hace falta una tajante lucha política contra los sindicalistas tradeunionistas y los guerrilleristas pequeñoburgueses (quienes resuelven sus diferencias políticas liquidando a sus rivales. quienes están unidos en propagar ilusiones suicidas en una solución negociada con los escuadrones de la muerte, sus amos capitalistas y sus padrinos yanquis. Una vanguardia bolchevique, forjada sobre el programa trotskista de la revolución permanente, es la clave para una salida proletaria a la sangrienta guerra civil salvadoreña. Debe ser una vanguardia internacionalista, que luche por defender, completar y extender la Revolución Nicaragüense, hoy día el blanco número uno de la campaña de guerra antisoviética de los EE. UU. El gobierno de Reagan ha hecho de El Salvador la primera línea de su guerra global contra el comunismo. La TEl responde. La defensa de Cuba y la URSS empieza en Centroamérica! Una revolución socialista, extendiéndose a México, que se debate actualmente en una crisis profunda, rápidamente afectaría a los mismos Estados Unidos. Los liberales y reformistas buscan presionar a los Demócratas, quienes a su vez votan los millonarios créditos que mantienen a flote al régimen duartista y ahora apoyan a los contras de la CIA en su guerra contra la Nicaragua sandinista. Los revolucionarios norteamericanos tienen una responsabilidad extraordinaria en proporcionar una solidaridad efectiva, librando una lucha clasista contra su propia burguesía rapaz, el enemigo principal de toda la humanidad.