AGOSTO DE 1998 áreas del Tercer Mundo. las masas volvieron la vista hacia el islam como un consuelo cuando la independencia formal y la ideología nacionalista (a cuya cola iban los estalinistas)
no trajeron ningún cambio en las condiciones fundamentales de su explotación a manos del imperialismo y las dependientes clases dirigentes locales. De manera un tanto análoga a la cristiandad medieval antes de la Reforma, la Ilustración y la Revolución Industrial, el islam trata de controlar todo aspecto de las vidas de los individuos. Sin contener en sí mismo ningún programa para cambios progresistas económicos o sociales, el islam es una expresión ideológica de estancamiento en estas sociedades; de ahí que las estructuras religiosas son fundamentalmente baluartes de la reacción y la contrarrevolución. Algunos temas de la rica discusión fueron la centralidad de la lucha contra la opresión de la mujer y la defensa de las minorías étnicas; el desarrollo de poblaciones importantes de inmigrantes de estas regiones en los países imperialistas, donde los obreros inmigrantes a menudo desempeñan un papel estratégico en la industria y donde la defensa de los inmigrantes de estas regiones es esencial para la unidad y la integridad del proletariado como un todo; y la lucha contra el comunalismo chovinista hindú antimusulmán en la India.
El núcleo de la revolución permanente es que en la época imperialista, sólo una clase el proletariado puede dirigir la revolución en un país socialmente atrasado para obtener las conquistas de la sociedad moderna, que fueron ganadas en la época anterior por revoluciones burguesas, arquetípicamente en Inglaterra y Francia. Pero en regiones que no tienen un proletariado significativo, las tareas de alcanzar los derechos democráticos y la emancipación nacional sólo pueden ser completadas como sucedió en el Asia Central después de la Revolución Bolchevique; es decir, en la más estrecha alianza con la victoriosa dictadura proletaria centrada en Rusia, Ucrania y los yacimientos petroleros de Bakú. Ejemplos actuales son el Tíbet o Afganistán; el destino del Tíbet está unido inextricablemente a la lucha por la revolución política vs. la contrarrevolución en China. El proletariado victorioso, por su lado, está obligado a proveer toda forma de apoyo material para ayudar a las masas trabajadoras de regiones atrasadas para alcanzar su liberación social. Así, el programa de la revolución permanente se basa en la centralidad del proletariado.
La cuestión de las generaciones del partido Durante los últimos años, la mayoría de las secciones de la LCI ha iniciado organizaciones juveniles. Desde los orígenes de la LCI en la Revolutionary Tendency en el SWP, nuestra organización reafirmó y trajo de nuevo a la práctica la posición anterior del movimiento leninista y trotskista sobre las relaciones juventud partido. Una organización juvenil de la LCI no es un grupo tipo frente; no es ni un oponente ni un substituto del partido revolucionario. Nuestras organizaciones juveniles están relacionadas autónomamente al partido, siendo organizativamente independientes y políticamente subordinadas (ver: Marxist Bulletin No. de la SL The Leninist Position on Youth Party Relations La posición leninista sobre las relaciones juventudpartido. Esta fórmula organizativa sirve a nuestros objetivos políticos, proveyendo un aprendizaje político a jóvenes revolucionarios y reconociendo que cada generación llega al marxismo siguiendo su propio camino.
Aunque aún son organizaciones inexpertas, los grupos juveniles afiliados a las secciones de la LCI se han convertido en componentes cruciales de la misma, trayendo a una nueva generación de jóvenes subjetivamente revolucionarios al trotskismo. Las organizaciones juveniles motivaron, argumentaron a favor y ayudaron a organizar una comisión especial de la Conferencia Internacional sobre el trabajo juvenil de la LCI, que incluyó una presentación sobre la historia de las relaciones juventud partido en el movimiento marxista y las tareas de los grupos juveniles de la LCI hoy en día. Esta sesión de la conferencia forjó una importante extensión a la Declaración de principios y algunos elementos de programa sobre el trabajo juvenil y nuestra oposición revolucionaria al ejército burgués y el sombrío futuro como carne de cañón que el imperialismo ofrece especialmente a jóvenes de minorías hoy día.
En reconocimiento del papel que estos jóvenes cuadros están desempeñando como dirigentes del partido en el trabajo externo y la lucha partidista interna, la Conferencia Internacional eligió a un pequeño número de miembros candidatos al Comité Ejecutivo Internacional. Estos camaradas representan más que la promesa de la futura dirección del partido; han sido ya probados en la lucha en más de una sección o área de trabajo de la LCI.
Igualmente esencial para la continuidad del partido revolucionario es la preservación de la historia de las generaciones previas del movimiento trotskista, cuyas lecciones deben ser aprendidas para que la LCI pueda servir efectivamente como la memoria colectiva de la clase obrera. La Conferencia Internacional escuchó informes de camaradas asignados al archivo central del partido, la Prometheus Research Library (Biblioteca de Investigación Prometeo. sobre su investigación en archivos a lo largo de EE. UU. para encontrar material sobre la lucha fraccional en la Communist League of America (Liga Comunista de los EE. UU. de 1932 33, que prefiguró la lucha decisiva entre Cannon y Shachtman sobre la cuestión rusa en 1939 40. Esta lucha anterior contiene implicaciones significativas concernientes a las tareas de los marxistas revolucionarios cuando se encuentran en circunstancias reducidas, y también implicaciones muy fuertes concernientes a la centralidad de una perspectiva proletaria y la continuidad del marxismo revolucionario en nuestra época.
Este período también marcó la transformación de Cannon en un dirigente del partido que puso la lucha por la claridad política y la unidad del partido sobre principios políticos por encima de las animosidades personales y el fraccionalismo.
En esta transformación fue también importante la intervención directa de Trotsky en la sección estadounidense. Esperamos ansiosos la publicación del archivo documental que revela la historia entera de este período en la formación de un grupo de propaganda comunista cohesionado y efectivo, que luego pasó a desempeñar el papel de sección modelo para el movimiento trotskista durante la vida de Trotsky.
La Conferencia Internacional marcó una cohesión política cualitativa de nuestra internacional leninista, que es vital en este período de crecientes rivalidades interimperialistas y nacionalismo. Ninguna otra tendencia a excepción de la LCI puede confrontar y sobreponerse a la crisis histórica de la dirección del proletariado que, como Trotsky insistió, es la crisis del futuro de la humanidad. No pintaremos más fácil de lo que es la tarea de sacar de raíz la explotación capitalista y la opresión en todos los lugares del planeta, y no hay garantías. Pero no existe otro camino. Adelante hacia una IV Internacional reforjada, el indispensable partido mundial de la revolución socialista!