AGOSTO DE 1998 33 Trotsky en el exilio en Prinkipo, Turquía, a principios de 1931.
Hoy día la LCI posee los recursos financieros y la tecnología moderna de los que carecían los trotskistas en la época de Trotsky.
Esto nos ayuda en nuestra lucha por construir un partido internacional, centralista democrático, políticamente cohesionado.
AILITANT TURIN Qer Oposición de Izquierda Internacional (OII. y después la Liga Comunista Internacional (Bolchevique leninista) y finalmente en 1938, la IV Internacional. La IV Internacional no fue una internacional de partidos de masas como la Comintern, y nunca transcendió una existencia propagandística de una vanguardia escasa, parcial y dispersa. Pero Trotsky luchó por la aplicación concreta del centralismo democrático en la tendencia internacional y en los grupos combativos de propaganda que declaraban su adhesión a ella.
Algunos de los problemas que Trotsky enfrentó al establecer una Internacional son un buen ejemplo de porqué las cuestiones organizativas no son determinantes. La OII atrajo a todos los que habían acabado en malos términos con la Comintern de Stalin, algunos de ellos muy lejanos del trotskismo; estaban de acuerdo con Trotsky en sus críticas organizativas contra el régimen de Stalin, pero no con sus conclusiones políticas. Trotsky dedicó buena parte del resto de su vida tratando de luchar contra los agrupamientos centristas que habían sido atraídos de algún modo a la lucha de la Oposición de Izquierda contra Stalin.
La Liga Comunista Internacional de Trotsky parece haber sido tan débil y azotada por las presiones centristas como lo somos nosotros. Reunión tras reunión tenía que tratar con crisis políticas en una sección tras otra: los alemanes seguían intentando capitular a una escisión centrista del PC; los españoles de hecho capitularon a los centristas quienes por su parte capitularon a los nacionalistas catalanes; los italianos tenían cinco grupos pequeños todos los cuales decían defender a la OII, pero eran incapaces de trabajar juntos; los estadounidenses se rehusaron a participar en discusiones internacionales; los franceses estaban tan afligidos por luchas internas personalistas que el Secretariado Internacional no podía averiguar cuáles eran las diferencias políticas, si de hecho había alguna.
Como le comenté una vez a nuestra secretaria internacional después de un día bastante difícil, parece que tenemos Instituto para la Historia Social, Amsterdam tres ventajas sobre la LCI de Trotsky: No tenemos dos secciones que estén funcionando bajo gobiernos fascistas; nuestras secciones están de acuerdo con mantener sus obligaciones financieras, son capaces de mantenerlas y suelen recordar hacerlo; y no tenemos secciones en las cuales el único punto de unanimidad parezca ser el echar la culpa de todo al También tenemos otra enorme ventaja sobre la Internacional de Trotsky: la estabilidad financiera. Durante su vida Trotsky tuvo que depender de los derechos de autor, los cuales eran escasos e inciertos. La sección estadounidense luchó contra la extrema pobreza; Cannon describe los enormes esfuerzos para reunir suficiente dinero para publicar el Militant. Una consecuencia fue que los trotskistas en Latinoamérica y en el Sudeste Asiático no tenían prácticamente ningún contacto con el o el beneficio de los consejos de los camaradas europeos. Por contraste, nuestros recursos tecnológicos y financieros nos han dado la oportunidad de luchar contra las presiones políticas a las que estamos sujetos. La camarada Tanner ha dicho, y probablemente tiene razón, que nuestro actual es esencialmente el tipo de organismo que Trotsky luchó por construir en los años 30 y no pudo lograr.
Lucha fraccional y la democracia del partido Declaramos nuestra continuidad específica con el movimiento marxista a través del SWP, la sección estadounidense de la IV Internacional. EI SWP fue la única sección con vínculos intactos con el desarrollo del trotskismo; Cannon vino del CPUSA (Partido Comunista de los Estados Unidos) con una buena parte de los cuadros intactos. En Europa, las secciones estaban compuestas en su mayor parte por individuos atomizados y la Segunda Guerra Mundial destruyó cualquier cohesión que se había desarrollado durante la vida de Trotsky.
Los Estatutos formales del SWP son muy similares a los