3 que afirma que los hombres harán siempre la guerra porque siempre han guerreado en el pasado. Ina tal argumentación, si es válida para la organización revolucionaria, e válida para la clase om brera en su conjunto. En efecto. es fácil: constatar, la clase: 0brera se ha manifestado más bien en defensora que en destrụctora del orden capitálfsta, y que en unos momentos de por si trágicos más que decisivos como la primera y la segunda guerra mundial impe rialista, las clases obreras en su casi totalidad se encontraron al lado de su burguesía nacional y no contra ella.
Si las organizaciones revolucionaris degeneran, no es a causa de su naturaleza maléfica. en sí, pero esto es debida por una par te a razones históricas, a circunstancias y condiciones precisas de la lucha de clases que es necesario esclarecer minuciosamente, y por otra parte, a una falsa concepción de su función y del papel que ellas se atribuyen en el interior de la clase.
Después is lo que debe retener nuestra atención mucho más que la simple constataoión de la degeneración de las organizaciones po líticas, es el hecho que, a pesar de, y no obstante las degeneracio nes sucesivas, explicables, por otra parte, la clase obrera no cesa de fomentar la creación de nuevos agrupamíontos en su seno, lo que sólo se explica por la necosidad absoluta sentida por la clase obrera de darse una expresión teoríca politica corrospondioute a es tos intereses fundamortales do clase.
Por ser una clase explotada económicamente, el proletariado está forzosamente sometido a la influencia de la ideologia de la clase en la sociedad. La lucha efectiva por su em iñcipación es im posible sin un esfuerzo teórico que le permitalibrarse de la influencia y de la presión ideológica de la clase enemiga que pesan sobre ella, El obrerismo es una realidad comple ja, dificil y contradictoria dentro de la cual se mueve la clase obrera. También se hace de ésta una imagen al igual idealizada que engañosa, la imagen de una clase homogenea accediendo automáticamente, individualmente y simultáneamente a la conciencia El temor supersticioso y la adversión que siente por toda tentativa de organización politica hace que el obrerismo aspire a una actividad revolucionaria esencial La búsqueda de una coherencia teórica, y se contente vaciándo de su contenido fórmulas tales como los obreres por ellos mismos.
10. Por paradógico que esto parezca, no es menos cierto que el obrerismo ha cambiado de la misma maneraque el puro leninismo.
Tanto para el uno como para el otro, la clase obrera y organización política existente separadamente de la clase que substituye a esta, para el obrerismo, son los obreros en su situación económica cargados de virtudes, que se separan de tendencias y elementos políticos organizados y se bastan a sí mismos.
Ahí donde leninismo y obrerismo płensan y operan en términos de separación e identificación absolutos los revolucionarios o peran una concepción, haciendo intervenir funciones distintas pero inseparables en la unidad total. Ahí donde entre organización de los revolucionarios y la clase,, los unos y los otros ven una oposi ción estéril o una identificación al igual estéril que peligrose, los revolucionarios descubren una relación necesaria y fecunda entre cl todo y una parte del todo.
11. Una organización que fundasus actividades sobre la sola infor mación es una organización que ha llegado a su fin. Rehusar