Si siguieramos el razonamiento de nuestros eminentes críticos llegaríanos a es 17 del proletariado en una etapa de su lucha histórica. Pero cuando se escucha, a nuestros severos jueces pronunciar sentencias que no.
les comprometen. con nada. la III Intemacional estuvo nuy lejos. de: ser la exprg sión más acabada de la conciencia revolucionaria de aquella época. y:esto por que nuestros jueces han descubierto que había errores, que la III Internacio nal no era: infallible, y que en su seno existían luchas de tendencias. Es una.
lástima que se detengan ahí sin decimos donde se encontraba entonces, esta ex presión. Se tiene mis bien la impresión que una tal expresión simplemente no e xistia en ninguna parte. Pero. porqué detenerse. en la III Intemacional y en 17 Porque no seguir y aplicar estė razonamiento retrospectivamente. Vear:10s la II Internacional. es bastante difícil iadmitir que esta II Internacional representara en su época.
una expresión más acabada de la conciencia revolucionaria que la IIIa ría negar la necesidad misma de la IIIa. Por consiguiente desaparece y queda borrada de la historia del movimiento obrero la II Internacional. la Ia en tonces. con su Mazzinistas, sus. Prouchonianos y sus Bakuninistas! Qué ensalada!
ta alegre y cuan edificante conclusión: No ha existido una expresión organizam da de la conciencia revolucionaria del proletariado. La historia del movimiento obrero y de su conciencia empicza con Socialismo ni Barbarie y otros Cardanes.
esto se Se reprocha a Lenin, al llegar a kusia. de haber lanzado la palabra de orden de la tierra:a. los campesinos y el derecho de la autodeterminación de los pueblos. Porqué al llegar a Rusia. Lenin defendła el derecho de la autodeterrinación de los pueblos desde hacía 20 años. Esta posición formaba par te del programa del Partido Bolchevique, y en varias ocasiones, mucho antes de 17 Lenin lal defendió en discusiones y polémicas suficientemente conocidas. La crítica de estas dos palabras de orden ha sido tomada de la rítica hecha por Luxemburgo a la Revolución Rusa. Sobre estos dos puntos compartimos. com: pletamente el punto de vista expresado por esta última. Son dos palabras de; or.
den pequeño burguts que debían hacen un intenso daño al no miento revolucionario, y que más tarde servirían comu trampolín para todas las tendencias oportunistas, eroes. absolutamente falso decir que los intereses ennediatosi de Rumi)
sia podían influenciar de manera alguna a Lenin eni la toma de estas posiciones. La tierra a los campesinos obedecía a la preocupación de desenina scarar, en. los hechos mismos, a todos los partidos, burgueses y conciliadores, Mencheviques y Social Revolucionarios, que no hacían más que engañar a los campesinos con pro mesas sobre la reforma agraria reforma que no tenian ni la intenciómi ni la po sibilidad de realizar. En esto, estos partidos no hicieron más que confirmar lo que Lenin y toda. la. Izquierda. Marxista no cesaban, de repetir desde hacía años: la burguesía en los paises, subdesarrollados no está más: en condiciones de cum. plir con la tarea histórica progresiva, y particularmente acabar con las estrucă turas y leyes feudales para imponer la propiedad campesina de la tierra como lo hicieron las burguesías de los paises, avanzados, al principio del Capitalismo.
Pero Lenin. cometía un error al pensar que estas tareas; inacabadas por la Burgu sía, podían ser tomadas a su cargo por și Froletariado. Si la: Barguesía no es ya capaz de cursplirlas, es porque históricamente estas ya no son realizables, no poseen mis un carácter de necesidad, no corresponden ya a las fuerzas prodụctiestán en oposición con las nuevas tareas que se imponen a la Sociedad.
vas.