REGENERACIÓN.
11 1 1 fundándose en un simple escrito do la con. promoviendo on forma. que un «como se traria.
pide. Para concluir hard notar que la actitud Esa actitud hostil es terrible porque alarmante de la Secretaria de Justicia mo la soberania del Juez Menor, lo conviertivo que la Academia Mexicana de Juris te en un verdadero tirano. No hay reprudencia y Legislación elevara en 21 de curso, en contra de sus determinaciones y Agosto del año pasado, una solicitud, por el de responsabilidad como saben muy bien domás respetuosa, pidiendo la aclaración de lo que vale, no les ha de quitar nunca el la circular en el sentido de que no com sueño.
prendia lo3 escritos y demás documentos Todo despotismo comienza por manifesque las partes presentaran en juicio. Ape taciones de hostilidad sorda, embozada, alsar del respeto que campeaba en dicho ocur fileretazos que amohinan, pero que no deBo y pesar también de que se suplicabajan huella palpable; pero va ensoberbeuna aclaración en vez de pedirse una revo cióndose en la impunidad de que disfrutan cación, la Secretaría nada ha resuelto ence hasta llegar ser tirania manifiesta.
rrándose hasta ahora en ol más absoluto No es raro tropezar con jueces de largo misterio.
tiompo en el servicio, que ya ni siquiera FLORES MAQÓN.
ra se acuerdan por qué se decidieron ponerse en guardia contra los litigantes, y en la actualidad, muestran su hostilidad con EL TINTERILLO verdadero lujo en contra de cualquier liY EL JUZGADO MENOR.
tiganto, sin distinguir del tinterillo que haco do los artículos del Código de ProceYa varios periódicos han liablado algudimientos, juegos malavares, al abogado na vez del maridaje formado entre el agioprincipiante que tiene que pasar por las borcas caudinas del Juzgado Monor, como tista el tinterillo. Dos seres que se comprenden y se unon, simentándose la ayari el estudiante de medicina por las salas de cia sórdida del uno, en las promuciones to un hospital, ol abogado de mayor catemerarias del otro.
goría que suelo litigar anto dicho tribunal Por fortuna, aunque algunos de aquellos en descmpeño de un poder goneral que no muestran toner grandes intimidades con puede renunciar.
los juecos menores, quienes tutean con En esa sonda muchos de los Sres Jueces ostensible familiaridad no pasan de ser acti Menores olvidan lo que deben al compatudes estudiadas para desconcertar al deu fierismo, la clase social que porteneco dor y conseguir que por tomor un fallo el profesorado y su trato descortés, sus auinicuo, se avengan cualquiera transactos ofensivos hacen odiosos sus Juzgados, ción ruinosa quo nplaza el riesgo inniedia sin pensar quo esto redundă cn su daño, to, aunque con cargas abrumadoras. Es puos habian de quedarse con la única clase palmario que, en lo general la honradez de que los soporta, y el resto de Abogados los Sres. Jueces, ve con malos ojos ese van buscar los que no humillen, los contubernio que constantemente tienen que sabon dar cada quien lo que es suyo, la vista.
No está roñida la recta aplicación de la Pero como en el Juzgado Menor los li ley con el comodimiento, y si todos los Srs.
tigios de la usura son los que llenan las Juecos Menoros se pusieran en guardia tres cuartas partes do la lista de acuerdo, contra sus mismas buonas pasiones, quo aquella epugnancia ha llegado sor fruto Ics hacon llonarse de tanta indignación ande hostilidad sistemática del juez para con to ol litigante temerario, los abogados posel litigante. No hay promoción que no se tulantes no acoptarían los Jueces Monomire con repugnancia y siempre están más res, como hoy, con beneficio de inventario, dispuestos lanzar un «no ha lugar, un sino que irlan con igual gusto sus Juzga.