7 REGENERACIÓN.
11 he SA.
coino los otros, oscaso de conocimiantos ra abrirse paso ontre las sombras, hoy que jurídicos y miope de criterio. Sentenció a el servicio municipal del alumbrado públila familia del Sr. Bonilla pagar 16 do co pone la capital de la República la multa á sufrir en su defecto dieciseis misma altura que las más cultas ciudades días do arresto, por un imaginario delito del mundo?
que, on en el supuesto de que hubiese exis Ni en Nueva York, ni en París, ni en tido, lo motivaron las torpes porsecuciones Berlín, el policía lleva linterna. Aquí, coá un hombre honrado, de no escaso valor mo nuevo Diógenes, se alumbra con la llacivil.
ma del aceite, en medio de una atmósfera La fainilia Bonilla ha ocurrido al ampa inundada de luz.
ro de la Unión, único refugio que tienen Además de ser inútil la linternilla; adeesas victimas de los caciques de provincia más de la impresión que todo lo que es rique gozan de la incondicional protec dículo causa en el ánimo, impresión de la ción de los Gobernadoros. Pero la familia Bonilla, ni en la justicia fedoral ha encon darme, simboliza una alta función en el orBonilla, ni en la justicia federal ha encon que no debía ser objeto quien, como el gentrado auxilio, pues el Juez Menor y. Coden público, el uso del anacrónico farolillo rreccional quien ocurrieron las quejosas tiene graves y positivos inconvenientes.
en solicitud de amparo, también colabora en contra de ellas. El escrito de amparo Decíamos al principio que la linterna se se presentó el día 18 del pasado Octubre convierte en un fetiche: el gendarme la cui5 y 27 minutos de la tarde y el Juez, has da como las niñas de sus ojos, pues si peta las y media del 19, no había rece, aquel tiene que pagar su valor un dictado providencia alguna, ocasionándoso día de haber jūstificar que no pudo dequizá con esa dilación, mayores atrope dades del pagador del encargado del defenderla, lo cual es difícil ante las severillos y nuevas vejaciones la familia quejo tall. El gendarine, puos, consagra un braEstaremos pendientes de la secuela de 20 la mitad de su fuerza la protección de la linterna; la defiende con ol afán con este asunto.
Respecto los fundamentos vigorosos que un hombre defiende su hacienda, el que existen para conceder el amparo, pne pan de su familia.
den verse los que en esto número publicaEn una tierra donde, por desgracia, la mos, refutando un artículo do Clarín de policia no es respetada, debía de dotarse Oriente.
este cuerpo, de hombres, que porsus condiciones físicas pudieran fácilmente hacerse respetar. Esto, empero, es difícil, en un EL CULTO LA LINTERNA. pais de hombres débiles y mal alimentados.
El gendarme de Nueva York es un gigante, no ostenta más arma que sus puños El gendarme, en la ciudad de México, de martillo pilón; y si ol pueblo norte ametiene un fetiche, cuyo cuidado debe con ricano no estuviera educado en el respeto sagrar su atención, como que ello afecta la policía, respetaria los guardianes nada menos que los intoreses pecuniarios, que disponen de tan considerable fuerza relativamento exiguos, del guardián del física.
orden público: ese fetiche es la linterna. Aquí, el gendarme es débil, raquítico ¿Qué diríamos de un hombre que al to menudo, de menguada estatura: lo armamar el ferrocarril para emprender un via mos de un fenomenal y ostentoso rovól.
je, se calzara las espuelas, recordando los ver y de un formidable garrote; pero para viejos tiempos en que sólo caballo se via blandir estas armas, le concedemos sólo una jaba?
mano: la otra cuida el objeto sagrado, el Ésta y otras retlexiones por el estilo, pálido ojo cuya llama es eficaz, lo sumo, ocurron a los habitantes de la capital en pava anunciar al rijoso y al fracturador do presencia de los gendarmes encargados del cerraduras, donde se encuentra el encarservicio do policia nocturna y que, en la gado de su persecución.
ciudad mejor alambrada de toda la Amé El señor Gobernador del Distrito, que rica, descansan sa pálida linternilla de aceite al pie de un poderoso foco eléctrico la policía nocturna prestar servicios de en Europa y en Norte América ha visto de dos mil bujías. todos los viene las miontes esta pre hara dar un nuovo paso la policía de la primer orden, sin linternas ni faroles. no. la vieja reliquia histórica del tiempo de los ciudad en el camino de la modernización?
Al señor Batres con las linternas de los serenos, de la época feliz en que el agente de seguridad necesitaba de su linterna pagendarmes.