REGENERAOION.
16 causa que se defiende. No queremos des noble, digna, levantada y hermosa. en.
trozar el fanatismo? No queremos ins tonces los luchadores redoblan sus esfuertruirnos y progresar en la vida? No bus zos; cobran brios los débiles y solo los cocamos el modo do engrandecer nuestra bardes podrán seguir viviendo su vida de patria y de avivar y sostener el patriotis vergüenza y, de ignominia.
mo innato en nuestra raza. Miedo. Para Sírvase admitir la inteligente Srita. Sasostener la razón, no se tiene miedo, para ra Ramírez, aparte de nuestros respetos, decir la verdad no se ruborizan los labios, nuestra admiración por su energia y noble y para sostener la justicia, no se retrocede patriotismo y por su inmenso valor civil, ante el sacrificio de la vida.
que no tienen, avergüenza confesarlo, muVer formar las damas, serioritas y jó chos hombres que prefieren vivir unciyenes liberales sus respectivos Clubs, re dos al carro de los césares, que levantar la anirse para conferenciar y buscar el bien, cabeza con energia, para hacer oír la propara instruirse y desarrollar sus facultades testa de los hombres libres que ven ultrajaintelectuales y morales, es una obra mag dos sus derechos y abofeteada su dignidad.
na, justa y sublime.
Sinceramerte felicitamos a la Srita. Ram «Ila unión constituye la fuerza. mírez por su actitud, pues ella le acarreaDamás, señoritas y jóvenes entusiastas rá las simpatias de las personas honorables de ambos Laredos: yo os convoco en nom las bendiciones del pueblo esclavizado.
bre de los sublimes mártires de nuestra.
bizarría militar.
mos. jóvenes y otro de señoras y serioritas, para llevar por lema las sagradas instituciones de Juárez, para sostoner sus ideas, para combatir la bajeza y para formar en un Dícese que el militar debe ser, entre otras todo la poderosa invencible palanca del muchas cosas, pundonoroso, recto, justo, progreso.
valeroso, cumplido, etc. etc. etc.
Las personas que deseen mandar sus Además debe ser caballeroso y respetuonombres para organizar el Club, pueden so para con las damas. Uno de estos cabadirijirse a Ilerosos, rectos, pundonorosos, etc. olvidó.
SARA RAMÍREZ, aquello de «mi dios, mi dama y mi rey, Redacción de «La Crónica. según se verá por lo que en seguida deciLaredo, Texas, 30 de Abril de 1901.
Hastiado de la ociosa inútil vida de Hoy engalanamos nuestras columnas cuartel, en donde se agotan miserablemencon la anterior convocatoria, redactada te las energias y se embota la voluntad, por la bella inteligente Profesora Srita. ya que no el intelecto, porque pocos sol.
Sara Ramírez.
dados lo tienen, un subteniente de ArtiLa Srita. Ramirez, os ventajosamente lleria decidió demostrar su bizarria, y en conocida en la República por sus inspiradas lugar de marchar rumbo Sonora pocomposiciones poéticas y su indiscutible lear contra los yaquis o rumbo Yucatán patriotismo. Es una de las damas liberales a batir los mayas rebeldes, o bien rum.
que mayor empeño han tomado en la noble bo Guerrero medir sus armas con las tarea de levantar el espíritu público, y una de los surianos, marchó a la casa do sa esde las que con mayor ardor han levantado posa, y desenvainando la espada, golpeó la bandera liberal, apartándola valerosa con ella la pobra señora hasta que el asmente de las plantas de los déspotas en cándalo armado por el bizarro militar lladonde el partido de las sombras la había mó la antención de los vecinos y de la poarrojado para profanarla y pisotearla su licia, que tuvo bien conducir al revolton sabor.
50 anta la autoridad, pesar del continenCuando vemos que una mujer, virtuosa te enérgico y bélico ademán del hijo de y abnegada, emplea sus simpáticas, oner Marte.
glas en bien del pueblo; cuando vemos que Por lo asentado, se viene en conocimionla belleza y el delicado pudor femeninos, to que ese oficial no desdetia inedir sus no desdeñan la lucha, si esa lucha está en fuerzas con las de una mujer, y hace uso caminada la regeneración política y 80 de su espada, esa virgen espada de los micial de nuestra querida Patria; cuando vem litares de banqueta, que sirve para cintamos que la mujer pone su prestigio, al rear faldas femeninas en lugar de brillar servicio de la causa de la libertad, no po en los campos de batalla defendiendo la demos dudar que tal causa es justa, no po Patria.
demos dudar, tampoco, que tal causa es Degeneramos; ya el soldado no es el nom