REPERTORIO AMERICANO 131 LA COLOMBIANA dio de difundir imparcialmente la verdad y edu glo de carácter económico, de actividad induscar libremente al pueblo. Ah, no! La propa trial y mercantil, ha desarrollado en dimensioganda no es una luz; es una arma. No es ni nes gigantescas el anuncio, el aviso, el reclamo. El traje hace al caballero más ni menos que una arma. dice textual Propaganda, propaganda. Pero la propaganmente en Mein Kampf; una arma terrible en da, justificada en el terreno comercial ha invay lo caracteriza las manos de quien sepa utilizarla. HY qué dido indignamente al esfera ideológica y políterrible resultó en las suyas. tica. la continuidad, a la persistencia en su la SASTRERIA Con semejante arma no se eleva la mente empleo. dice también Hitler se debe el éxidel país, sino que deliberadamente se la rebaja. to de un anuncio, así sea comercial o político. Toda propaganda debe ser popular afirma No admite el caudillo nazi que, riendiendo tride FRANCISCO GOMEZ e HIJO Hitler y ha de adaptar su nivel intelectual a buto a la verdad, se reconozca lo que pueda la capacidad receptiva del menos inteligente de haber de bueno en el adversario. De ningún le hace el traje en pagos semanales los individuos a quienes vaya dirigida. De esta modo. Qué diríamos exclama zafiamen o mensuales o al contado. Acaba suerte, es menester que la elevación mental sea te. de un cartel que anunciase un nuevo ja de recibir un surtido de casimires tanto menor cuando mayor sea la muchedum bón si dijera de otros jabones que son bue en todos los colores, y cuenta con bre que se deba conquistar. Si se tratara, como nos?
operarios competentes para la conacontece con la propaganda destinada a llevar Con esa comparación, que equipara las fección de sus trajes.
adelante una guerra, de reunir a toda una na ideas políticas, los principios morales, a los ción en torno a determinado. círculo de in artículos de perfumería, se define, precisamenEspecialidad en trajes de etiqueta fluencia, jamás se pondrá bastante cuidado en te por el más funesto de sus propios capitanes, Tel. 3283 30 vs. Sur Chelles evitar un nivel intelectual demasiado alto. la estrategia de la mentira.
Esa propaganda se ha de limitar a muy po Se cuenta en la historia de la Grecia clásiPaseo de los Estudiantes cos puntos, presentándolos en forma de gritos ca que el austero Aristides aconsejó votar conde combate. Sin matices, sin comprensivos tra un determinado proyecto porque, en su quemos, entonces, la actitud del indígena ante términos medios, debe provocar simplemente opinión, era tan útil para la ciudad como conesta plenitud geográfica. Y, también, ante esos amor y odio. Exige verdades o mentiras, ja trario a la justicia. Los ciudadanos, de acuerdo dolores y llantos de la naturaleza: huracanes, más medias verdades ni mentiras a medias. con tan noble parecer, rechazaron el proyecto.
volcanes, sismos, un mundo de brujos teluriAsí, las verdades y las mentiras quedan colo Por algo el nombre de la antigua Atenas, al cadas en el mismo rango. Cuando convenga, cabo de veintitantos siglos, rasplandece todavía cos. Esa queja, esa ansia, esa protesta, silense utilizarán las mentiras, pero mentiras inte como una llama inmortal.
cios todos. no es una participación metafísica en los mismos fenómenos. Su pasiva resisgrales, grandes mentiras, mentiras también to Hoy como ayer, la salvación del mundo talitarias, repetidas miles miles de veces por tencia a la cultura blanca no es acaso una acdepende de que la utilidad sea pospuesta a la la prensa, por la radio, por el cartel, por el ci justicia y de que, por encima de las convetitud natural, digamos, la savia misma de sus nematógrafo, hasta incrustarlas en el cerebro y niencias, muchas veces efímeras o aparentes, existencias? El poblador del páramo. dice en el corazón de un pueblo. La estrategia de de un grupo, o de una secta, o de un Estado, Andrade Chiriboga al observarlo de cerla mentira!
realicen los hombres la divisa: Busco la ver ca, casi no come, ni duerme, ni se queja, ni Vivimos en el siglo de la propaganda. Si dad, amo la veracidad.
vive. Es una sola negación. Es la misma actitud de Juan el Veguero, en el Cantaclaro de Rómulo Gallegos. El hombre oriental absorbe en sí mismo lo telúrico, lo panteista adquiere para él un sentido de unidad en sí mis(En el Rep. Amer. mo. El universo es uno, dicen, pero es uno dentro de mí mismo. Al indio americano el lo puramente geográfico, su accidentalidad, el ciones pre hispánicas. Después de tanto indamilagro geográfico le impide la unidad así conHe tenido el placer de leer el libro del his gar el interrogante se hacía más acuciante y cebida. Yo pienso, si acaso, en el ser que nos toriador brasileño Baptista Pereira, Civiliza menos satisfecho.
preocupa, no se da a la inversa, el sentido ción contra Barbarie, como grato obsequio de Adamítico? Sencillamente, no. El ser del unitario de lo universal, es decir, la unidad mi nuevo amigo Luis Terán Gómez, de Boliindio, en este caso, se halla en igual situación por la pluralidad. Yo diría que el indio se divia, quien lo ha traducido magníficamente. que todos los seres de la Humanidad. La caísuelve, sin perder su unicidad propia, apasioAparte la meditación que me ha reportado da de nuestro primer padre no es particular pa nadamente, en lo universal y su actitud pasiva, he aquí los buenos libros en sus primeras ra una raza. La más pura ortodoxia no admite no sólo ante lo blanco. sino ante el páramo páginas hube de encontrar una interesante in pueblos culpables y pueblos que no. En el pe mismo no es sino tal entrega en lo telúrico.
terrogante y motivo de estas líneas.
cado de Adán participamos todos los seres, nos Algo de dios Anteo siendo páramo ante el Define el historiador al indio americano dice la teología. La lógica también: si la caípáramo, hombre lago ante el lago, bombrecomo un sér adánico. adamítico. dice acer da se caracteriza por la adquisición del conohormiga ante el milagro de la hormiga. Como tadamente. En principio es una definición que cimiento, el indio americano la poseyó en granace la flor, como corren los ríos grandes en la me causó alegría. Mas, con la meditación a do sumo y aún la posee rudimentariamente Gran Sabana, el indio nace y aún vive. Quicuestas, no acertaba a comprenderla. Algo así. Me remito a los sabios juicios de la filozás, en el tránsito final, alcance a imaginar escomo pequeñitos caballos me corrían por la sofía existencial que representan Kierkegaard, trellas lejanísimas, impalpables, casi abstractas.
mente. Al final, quedé rechazándola y preocu Berdiaev y León Chestov, para no recurrir a Es posib que mis palabras sean demasiapado por el ser natural del indio. He leído, las fuentes directas de la Biblia. Rechazo, pues, do aventuradas. No me extrañaría. Ya dije, en estos días, cuanto me ha sido posible, in el carácter adánico del aborigen americano.
otras veces, que toca al joven estudioso ameridagando el pequeño dato, la pequeña luz, que Claro es, no es igual el ser del indio al cano investigar a fondo. Mas, por hoy, quéme diese claridades. Puseme en recrear, en la ser europeo, ni al ser asiático, no tiene contac dome en la creencia de mi propia teoría. Un soledad de mi estudio, ese milagro de geogra tos con las civilizaciones llamadas occidental poeta español, inmenso y hondo, Juan Ramón fía que América significa; hice por ampliar y oriental, aunque algún estudioso curioso pu Jiménez, que vive y conoce la realidad amerimis conocimientos históricos sobre las civilizadiera señalar parentescos que no es, en lo más, cana, ha dicho en reciente conferencia: Misino influencias posteriores, y en lo menos, ren ustedes los negros en el campo, los colores coincidencias históricas. El indio no cultiva la que se ponen, los movimientos que hacen, coSTECHERT HAFNER, Inc. razón a igual que el europeo, ni tampoco, el mo hablan y ríen y lliran y bailan, y verán Books and Periodicals particular panteísmo indúe, no el panteísmo ustedes como los asimila la naturaleza con tode Spinoza, sino muy peculiar, suyo. Qué es dos sus accidentes e incidentes. Donde dice 31 East 10th Str. New York 3, el indio? Pienso, repito mejor, ese milagro de negros. yo pongo indios.
Con esta Agencia puede Ud. geografía, de mayestática exuberancia, donde Este hombre nacido como un arbusto, que conseguir una suscrición al los ensayos de la naturaleza se han agolpado no puede desperdiciar sus palabras, como el en tantos fenómenos y milagros. Inclusive en árbo! no puede desperdiciar sus hojas, es todo Repertorio Americano paisaje. Páramos, selvas, alturas, ríos, mese un mundo concreto, La cultura blanca, cultutas, etc. adquieren su plenitud geológica. Bus ra del raciocinio abstracto, es incapaz, por si El ser del indio americano Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica