372 REPERTORIO AMERICANO AHORRAR DISCIPLINA BANCO ANGLO COSTARRICENSE AHORRAR tiranos; y aceptaron el riesgo de la destrucción y masa que Marte, el rojo fanal alerta de los total y propia, antes que abandonar la qui horizontes telúricos. Claro que esta hipótesis mera del imperio único y universal. De con de destrucción inteligente de un mundo, patado, hubo también en el planeta perdido, rece provenir de esa zona epopéyica en que se es condición sine qua non de una Grocios, Tolstoyes y Gandhis, pacifistas, soentrelazan y confunden la ciencia y la poevida disciplinada ñadores, utopistas, poetas; pacifistas befados y sía: de la febril fantasía de Milton, el Dante, maltrechos, derrotados con huevos apestosos, o Verne, donde se confunden las utopías de porque predicaban la paz y auguraban la ca felicidad y bienestar humanos, que se complatástrofe inminente. Todo fué inútil; en ese cen en dibujar los cerobros bondadosos, con niundo incógnito, de que sólo nos quedan los los juicio finales y los terrores milenarios que, es la más firme base del buen éxito fragmentos como los de un ánfora griega, se como deseo de venganza contra la especie, traLA SECCION DE AHORROS libro también la última guerra. Una humani. zan los rencores de los místicos. Ocurren estas dad madura para el odio supremo, hastiada ultra visiones en las encrucijadas más siniesdel quizás de sus progresos, hinchada por exceso tras de la historia: cuando se exalta la superde orgullo y sabiduría maléfica, desencadeno sensibilidad de los alucinados. Ya, con el mis.
con sus armas último modelo, de que se enva mo fragor con que se oirían en el mundo henecían sus laboratorios y sus técnicos secretos. breo los proféticos anuncios de invasiones arias, la desintegración en serie, desgajando conti los físicos nucleares franceses han advertido el mentes, arrancando ciudades de cuajo, gangre peligro de la desintegración en serie que nando océanos, hasta romper la entraña del puede provocar una guerra atómica. Qué im.
hermoso astro, mayor que Marte y menor que porta? La codicia de los grandes fabricantes de (el más antiguo del aís)
la Tierra, cuyas cenizas podemos contemplar. armamentos, que ganaron miles de millones en está a la orden para que usted Arduo trance de una humanidad como la nues la pasada guerra, se da el lujo de ignorar serealice este sano propósito tra, fraternal, inquieta, trágica, amante del nejantes advertencias. Igualmente, la ignoranpeligro, de cuyo seno brotaron geniales pero cia y el odio de los que no han llegado aún al funestas iluminaciones.
concepto de humanidad, y viven divididos por Nunca ha parecido a los cosmógrafos aceralucinaciones de rencores y de envidia, de batada la explicación de que el planeta transjos apetitos, continúan predicando la urgencia marciano, ahora esparcido en asteroides, como de la guerra que, acaso no haga saltar en peinfortunado collar de perlas sobre el terciopedazos al planeta, pero que, indudablemente, prodigiosos de una explosión planetaria, ante lo de la noche, pudiera interpretarse como el destrozará incontables millones de vidas. Ya nuestro punto de vista geocéntrico y antropo.
fallido intento de integración de otro planeta el clásico hispánico, dibujando en sombras una morfo, como aviso ejemplar colocado en la rucalavera escribió el verso inmortal: La amta histórica, para advertir a los hombres del por un anillo de material nebuloso sin sufi bición se ríe de la muorte.
peligro de ir demasiado lejos en el manejo de ciente ardor y energía para lograr unificarse.
En tanto esclarézcanse más estas cuestioMenos aún, ha ganado consenso la hipótesis de los secretos naturales, separando la sabiduría nes, los asteroides continuarán seguramente au técnica de la fraternidad moral y del sentir huruptura del astro por el impacto de un cometa. La mísera pequeñez de los planetas en la nientando en número y significación; restos manitario.
inmensidad, hace sumamente improbables tales encuentros; correctamente, los cometas evitan tales choques, y más bien con toda elegancia saludan al pasar, barriendo los suelos con su penacho. La eficacia de la ley del acercamiento fatal, de radios, que ocasionaría la catástio, tal como en los anillos de Saturno, y como Por Juan MARIN se espera de la Luna y de los satélites internos (En el Rep. Amer. de Júpiter, queda aún por demostrar. Queda, por tanto, abierta a estudio la primera solu. A:í como el célebre Coronel Lawrence pu nos de los desiertos de Arabia y Siria, de Irak ción, la de una catástrofe inteligentemente probicó hace unos años sus Siete Pilares de la Sa y Transjordania, identificándose totalmente vocada, o por ventura, tan audaz como im birluria. Seven Pillars of Wisdom. ahora con el espíritu de la raza árabe. Más bien diprudentemente creada, por seres que llegaron a Glub! Pacha que parece haber recogido la cho, con el espíritu del beduíno, porque, seemular con Zeus participando del secreto de antor ha arabizante de manos de aquél aca gún él, es en el nómade que perviven puras y los dioses, el manejo del rayo destructor. ba de dar a publicidad, con una actualidad que alquitaradas, todas las virtudes de aquella raza Estaríamos, por tanto, frente a los asteroino puede ser más palpitante, su Story of the que un día dominó la mayor parte del mundo des, ante el mayor asesinato de todos los tiem Arab Legion. El mismo halo de misterio y de civilizado creando una cultura propia y bien pos: el de un mundo necesario para llenar el aventura que rodeó la vida y aun la discuti característica. El libro es, en sí mismo, un vasvacío notorio en el orden matemático del sisteda y dudosa muerte de Lawrence de Ara to y entusiasta tributo al pueblo árabe, a su bia. ha envuelto a lo largo de treinta años ma solar, mundo que habría tenido diámetro valor, a sus reglas de chevalerie y a su trahasta de 000 millas, más de la mitad del las andanzas y actividades de Glubb Pacha en dicional hospitalidad. Numerosas anécdotas, de la Tierra, con volumen hasta de un cuarto el silencio y la aridez de los desiertos de Asia vividas por el autor en sus innumerables anMenor. Ha sido sólo el dramático conflicto de la masa terrestre, es decir, mayor diámetro danzas entre tribus amigas y hostiles, ilustran que asola hoy las venerables tierras de Palestisus conceptos y rubrican sus afirmaciones. Es, na el que ha venido a sacar a luz y a colocar en verdad, un mundo desconocido el que nos en pleno tablero de la actualidad internacional ofrece el Brigadier Glubb en esta obra, pues ANTONIO URBANO a este Oficial inglés. Su existencia era conocida aun aquellos que como nosotros vivimos en como la de un misterioso personaje al servicio el seno de un país árabe y en medio de una del Imperio británico; la guerra en Palestina colectividad predominantemente islámica, conlo ha mostrado en su calidad de Comandante fesamos haber ignorado mucho la mayor en Jefe de la Legión Arabe, al servicio de uno parte diríamos de lo que el autor nos cuenta de los siete países que forman la Liga Arabe: sobre el modo de vida de los beduínos, sus TELEFONO 2157 Transjordania. En las cuatrocientas páginas de costumbres, sus tradiciones, sus fiestas y sus APARTADO 470 este libro ameno que se lee como una novela artes. Aun cuando estas cosas son marginales moderna llena de acción y movimiento, el Bri en relación con el título del libro, no dejan de gadier John Bagot Glubb nos cuenta como desser por eso menos importantes y cautivadoras.
Almacén de Abarrotes de el año 1920, poco después de salir gradua Refiriéndose al objetivo concreto de la obra, al por mayor do de la Escuela Militar de su patria, sintió Glubb Pacha comienza por ubicarnos en ese cl llamado del desierto. desde esa época, sin mundo confuso y convulso que eran el CerSan José Costa Rica transiciones ni descanso, sin debilidades ni al cano y Medio Oriente después de la Guerra ternativas, ha combatido y ha educado, ha or Mundial I, cuando la revuelta de Lawrence y ganizado y construído en medio de los beduí el Emir Hussein habían liberado a todos esUn libro de Glubb Pacha, el sucesor de Lawrence de Arabia EL GREMIO Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica