REPERTORIO AMERICANO CUADERNOS DE CULTURA HISPANICA Tomo XLIV San José, Costa Rica 1949 Jueves 10 de Febrero No. 22 Año XXIX. No. 1073 El miedo del del tirano Por Fabián VIDAL (En España Nueva. México, noviembre de 1948. y otras len la pena: Releamos a Tácito. Hay en sus obras un zación, puesto que la civilización es un espárrafo que dice así, poco más o menos: En fuerzo para liberar a la Humanidad de los tetiempos del Emperador Nerón, deambulaban mores que la atormentan.
por las calles y las plazas, en Roma Pero si en plena civilización es bruscamente grandes ciudades de Italia, y asimismo por los violado un principio de legitimidad y el poder campos que las rodeaban, soldados de a pie y es conquistado por un golpe de fuerza, el puede a caballo, mezclados con otros mercenarios, blo recae inmediatamente en el miedo y la de raza germana. en éstos, por ser extran barbarie.
jeros, confiaba Nerón sobre todo. El miedo y la barbarie! En esas horribles He aquí, lectores, un antecedente histórico palabras, se resume la situación de la España de la guardia mora franquista, acuartelada en actual.
el Palacio de El Pardo de Madrid. fines de septiembre, uno de los corresEl italiano Mosso estudió, en un libro fa ponsales en Madrid de la agencia estadounidenmosísimo, el miedo colectivo. Otro eminente se International News Service (al servicio de italiano, Guglielmo Ferrero, en su obra El po Franco, según todos saben. Knokblaugh, puder, publicada sólo meses antes de su llorada blica en Novedades de México un artículo renuverte en el destierro fué una víctima de lativo a las precauciones que toma el Caudillo Mussolini. ha estudiado el miedo individual para resguardar su vida, que cree amenazada.
de los dictadores. escoge, para ello, varios Describía El Pardo guarnecido por marroejemplos memorables. En un capítulo dedica quíes armados hasta los dientes, y sus alrededo a Napoleón, prueba que éste ha sido uno dores recorridos día y noche por guardias civide los tiranos más miedosos de los últimos si les y motociclistas que sólo dejan acercarse al glos. atribuye a ese miedo su perpetuo afán Palacio a quienes justifican, con exceso de dode hacer la guerra.
cumentaciones y contraseñas, que son gentes sin Citemos algunos párrafos de El poder. Va sospecha y de franquismo probado. Describía luego los viajes de Franco, sus autos blinda El hombre es el más miedoso de los seres. dos, sus escuadrones de sicarios, ya uniformaNace lleno de miedo y vive presa de sus terro dos, bien vestidos con traje civil, las rondas res. Pero si vive presa de sus terrores, se dis en las alcantarillas de las vías públicas por las tingue de los animales en que quiere ser va cuales ha de pasar la procesión caudillesca, los liente. Entre todas las contradicciones de la na registros de bohardillas y sotabancos en centeturaleza humana, la contradicción básica po nares de casas, la ocupación por la policía de dría ser muy bien ésta: el hombre es un ser ventanas, balcones, portales, terrados y azomiedoso que quiere tener valor e imponerse a teas, los convoyes automovilísticos y ferroviasus terrores: los reales y los imaginarios. rios cuya organización e itinerario se cambia Pero veamos. Se precisa establecer una dis en el último instante y sin que el hecho se cotinción. Hay el hombre vulgar y normal y hay nozca ni siquiera por los íntimos, todo el apael hombre de primer plano. Muchas veces sur rato complicado y costosísimo montado en ge éste en el pináculo, no porque haya mere torno de la obesa y menguada humanidad del cido su exaltación, sino porque las circunstan antiguo comandantín del Tercio, ahora aducias le fueron propicias Claudio fué elevado lado y solicitado. ay! por los archimillonarios al solio de los Césares, que había de deshon y estrategas de allende el Bravo, que, como rar su esposa Mesalina, porque un pretoriano ha dicho un publicista norteamericano, quieborracho lo descubrió escondido y temblando ren aliarse con el Diablo para salvarse del Indetrás de un mueble y en su embriaguez, se le fierno.
ocurrió llamarle Imperator.
El autor de Viento en los olivares, libro También dice Ferrero: En el origen de de que se han hecho varias ediciones en inglés, toda la historia que se extiende desde 1800 a francés y español, hombre sincero y valeroso, 1814, hay un exceso de miedo. El miedo que que fué Agregado de Prensa de la Embajada se apodera inmediatamente, desde el primer cstadounidense en Madrid, cuando todavía se principio de todos los poderes fundados por peleaba contra Hitler, ha afirmado en varias un golpe de fuerza. agrega: El terror se páginas de su documentadísimo volumen, que apodera del dictador en el mismo instante en el Caudillo tiembla siempre y que todo el que llega al poder, porque lo ha conquistado, mundo lo sabe en España. Esta afirmación violando un principio de legitimidad. Los no necesita demostraciones. Hubo algún tiraprincipios de legitimidad tienen la misión de no que no haya vivido entre terrores ocultos?
liberar al poder y a sus súbditos de sus te. Acaso se ignora que tales terrores son ordimores recíprocos, al reemplazar cada vez en nariamente la verdadera causa de sus crueldasus relaciones la fuerza por el consentimiento. des? No existe nadie más sanguinario y venSon, en consecuencia, los pilares de la Civili gativo que el cobarde que ha tenido miedo. el Dictador lo tiene siempre, de día, de noche, acompañado y en soledad, entre aplausos de multitudes alquiladas o abyectas, en el silencio de su dormitorio, a solas con su informe y monstruosa conciencia, que le acusa y a la vez le pone en guardia contra las justas venganzas de los tiranizados.
El gauleitet de Dantzig, Raunnich, en su libro Mis conversaciones con el Führer, revela que éste era acometido, repentinamente, sobre todo en las horas de la madrugada, de terrores espantosos. Se arrojaba del lecho, gritaba, lloraba, se golpeaba el rostro, veía fantasmas, oía voces infernales, pedía socorro y, al fin, sus servidores, que entraban alarmados, se lo encontraban caído en tierra, estremecido por convulsiones espasmódicas. Que hay almas negras, insensibles e impermeables, que no atraviesa el remordimiento jamás? Es posible. Pero allí donde se mella su flecha, penetra, agudo e irresistible, otro dardo: el dardo buído del miedo al castigo, al castigo que llegará algún día, bajando del Cielo como un rayo invisible.
Releamos también al jesuíta Padre Juan de Mariana. En su tratado Del rey y de la institución real, que dedica a Felipe III de Austria, dice. Sepa, sin embargo, el Tirano que ha de temer a los que le temen, que puede muy bien encontrar su ruina en los mismos que le sirven como esclavos. Suprimida toda clase de garantías, desarmado el pueblo, condenados los ciudadanos a no poder ejercer las artes liberales, únicas dignas de los hombres libres. cómo podrá al fin sostenerse? El Tirano teme para sí de sus vasallos, teme que los mismos que gobierna como enemigos lleguen a arrebatarle su gobierno y sus tesoros. No por otra razón, prohibe hablar de los negocios públicos, quitándoles, que es ya hasta donde llega.
la servidumbre, la facultad de hablar libremente y la de oír, la facultad de poder quejarse on medio de los hondos males que les afligen. Como no tiene confianza en sus súbditos, busca su apoyo en la intriga, solicita cui dadosamente la amistad de los príncipes extranjeros a fin de estar preparado a todo evento, compra guardias de otros pueblos de quienes, por ser bárbaros, se fia, muéstrase pródigo para los soldados mercenarios, en los que cree ha de encontrar su escudo.
El erudito hebraico Fabre Olivet, en su libro La Langue hebraique restituée, publicado a comienzos del siglo XIX y reimpreso en París en 1922, sostiene que los nombres de Cain y de Abel son simbólicos y encarnan filológicamente dos categorías de hombres, la de los tiranos y la de los siervos. escribe estas frases: Si los súbditos tienen siempre miedo del Poder al que están sometidos, el Poder teme siempre a los súbditos en quienes manda.
Cain tiene miedo de Abel, y de ahi que termine por maltratarle y darle muerte. Cuántos millones de Abeles inocentes han sido asesinados, en lo que va de siglo, porque las Caines europeos han tenido y tienen miedo? En la cifra incalculable, España, fay. figura con más de un millón de muertos. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica