Bourgeoisie

378 REPERTORIO AMERICANO creencias ideológicas que, no lo dudemos, habrán de salir robustecidas cuando honre al istmo centroamericano con la próxima visita que este democrático poeta nos tiene prometida.
ron otros barrios que dan grima: caras de acelga con el estigma de los zancudos; niños panzudos: tierra, lombrices; pobreza sucia, pobreza triste, andrajos, hambres que nadie asiste.
Nota: En 1930 publicó su primera obra, un breve folleto titulado Motivos de Son, que causauna verdadera revolución literaria, pues incorporaban definitivamente el ritmo de son al romance español. En 1931, apareció Sóngoro Cosongo; en 1934, West Indies Ltd. poemas de sentido social en su mayor parte; en ese mismo camino, en 1937, Cantos para Soldados y Sones para Turistas; luego, durante su estancia en España, España, poema en cuatro Angustias y una Esperanza, sobre la guetra contra Franco. En 1948, publicó en Buenos Aires una antología de su obra poética bajo el título de El Son Entero, en que aparecieron muchos poemas inéditos.
Delegado a varios congresos anti fascistas, culturales y pro paz, ha viajado extensamente por Europa y América.
Nicolás Guillén nació en Camagüey, una ciudad del interior de Cuba, el 10 de julio de 1902. Estudió primeras letras y bachillerato en su ciudad natal y dos años de leyes en la Universidad de La Habana. Abandonó los estudios para dedicarse al periodismo y la literatura.
En su juventud fué tipógrafo, pues su padre, que fué Senador de la República, tenía utia imprenta. Trabajando en su oficio fué como dió cima a sus estudios de Bachiller.
México, setiembre de 1949.
Managua Es un poema del libro inédito: Estampas íntimas y Poemas de la calle (En el Rep. Amer. Managua: Diciembre 7, La Purísima: Algarada, Algarabía, Algazara impenitente de bombas y cohetes, de tambores y pitos, de gritos, gritos, gritos.
a la Virgen María; mascaradas, farolillos ambulantes por las calles, Gigantona: al evocarte, las niñas de mis ojos se dilatan, se dilatan y quisieran volar, prenderse, al vuelo, del ruedo de tus faldas.
Managua, gama del verde y del azul en sus montañas, su lago, sus lagunas; lagarto, iguana verde, coruscante temblor de mariposa, luz de mangos, leche y pinol.
Bien te recuerdo: Pinolera hermosa.
con la tinaja fresca, la cabellera undosa clavada de jazmines y las anchas caderas reposadas bajo los emparrados de corredores amplios.
y flor.
Xolotlan, sueño que preñó a Rubén de ensueño: alas, astros, clas, cisnes y corolas.
Managua: añoranza, desde mi claraboya de París, de todo lo que probé en tus carnes: la gama y el aroma de tus frutas desde la piña al guapinol, los grasientos tamales, el tiste y el pozol; el aguardiente puro con boca de jocote, la sopa de mondongo el guacamol.
Managua, cabeza y puños de mi patria: en tu seno, vive mi madre aún; ampárame sus canas, su encogido temblor, puñal de doble filo clavado en mis pupilas, clavado en gris, ceñido al muro de esta aguja en donde vivo, claraboya aterida de París.
Managua, serpentinas del Sol sobre las aguas, montes y criaturas; ambrosia de luz carnaval y lujuria de colores en los atardeceres.
Cómo te añoro: Hamaca, beleño y paraíso del burgués tropical; cama muelle del indio, mecedora ambulante de mi tatarabuelo, cerquita de la mar o prendida en las ramas del manglar.
Managua, ampara, con amaños de la raza, todo lo que heredamos del Planeta cuando se repartió: América aborigen, América española, América redenta, América Central: Nada nos pertenece y todo es nuestro: para nuestros hermanos: la primicia, Inego, para la Humanidad.
La Patria: madre siempre y no madrastra de sus hijos.
Concierto cósmico a la orilla del Lago bajo el golpe de luz de los cocuyos; Programa: Osa Mayor, Osa Menor, Santa Lucía.
Cuarteto monocorde de ranas y de grillos al compás del jazz band en sordina, de la Rumba zumbada por las olas en la playa.
Cómo arden mis antojos por repasar tus casas y calles solariegas, cuyas estampas idas vivas están en mí: Aquellas enlutadas viejecitas, di familiar apodo Cachimbitas. polvorientas de Dios, goyescas de mi raza y de mi barrio, olor a catedral.
Managua, Mater de profecías, prolífica en poetas, magos, locos, políticos tunantes, gárrulos peluqueros, vocingleros generales pillanes y comadreros.
Managua de mi niñez, cargada de polvo y sol, Planagua, corazón de Nicaragua, ombligo de la paz entre viejos rencores de ciudades hermanas; Tavo Real pelotero, sic embargo, de América Central: clarin, fusil, cutacha, chamarra, cantimplora; camorras de Zelaya, Camorra y Picotazo Tu historia: un mal, un mal continental: Camorra y Picotazo contra tu libertad.
Luis IBARRA.
Paris, diciembre de 1948.
Santirilio en San Antonio, loco manso, guiñol santo, mueca y risa, canto y grito del chiquillo con galillo afilador. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica