REPERTORIO AMERICANO 297 Discurso del Señor Galo Plaza.
Presidente del Ecuador.
De izquierda a derecha: Lic. y Prof. Alejandro Aguilar Machado, Señor Galo Plaza, Presidente del Ecuador, Don Eduardo Salazar Gómez, Ministro de Gobierno.
Grato es para mí, en nombre de mi pueblo, dar la bienvenida a los representantes del Periodismo de América, en ocasión en que esta ilustre Asamblea trae la llama viva de las libertades públicas y la independencia del pensamiento, a la misma ciudad, al pie del Picbincha, de la hazaña de nuestros héroes de 1809.
América es siempre una anticipación del futuro. Aquí están representados los heraldos del pensamiento americano, en su proyección histórica permanente. América no depende del pasado, su vigon reside en un inconmensurable porvenir. Yo creo que en nuestra acción nacional y. continental, no debon intervenir las viejas tradiciones, la herencia de las rencillas, ni los conflictos de sistemas económicos importados a nuestras latitudes, desde la Europa feudal, con la Conquista. América tiene que servirse gallardamente de sus propias fuerzas, todavía insuficientes acaso, para aprovechar la reserva inmensa de sus recursos físicos y sus valores humanos. Por eso América tiene que cumplir su destino en el único clima compatiLlc con la mentalidad americana, con su temperamento y su Geografía, con la tradición que empieza y el futuro urgente: la fórmula democrática, nacional e internacional.
Sólo en ambiente democrático puede cumplirse la enorme tarea de justicia social e histórica que tenemos los habitantes del Nuevo Mundo: resolver el hambre y la ignorancia como problemas de nuestras mayorías desposeídas; y hacerlo en forma noblemente americana, es decir, con respeto absoluto para la libertad y la dignidad del hombre.
En el conflicto de filosofías que contempla nuestro mundo torturado de problemas, América ha definido ya su actitud entre Oriente y Occidente. No podía escoger otro camino que el de la democracia, fórmula digna y libérrima, pose a los panegiristas de métodos totalitarios y fáciles, de aceptación efímera y de desorientación como requisito ambiental.
La norma democrática, que es la de la libertad de pensar, de creer, de actuar, de trabajar, de ensayar, de respetarsa y de vivir, es la única compatible con la institución altivamente humana de la prensa. así como hay elevación en la política democrática, hay también la esencia ddmocrática en la cultura, con un papel decisivo de la prensa en el progreso, y especialmente en el deber del conocimiento mutuo. América, Continente desconocido para sus contempladores remotos y aun para sus propios habitantes, abstraídos en uno como archipiélago que se desmiente en la unidad geográfica, tiene la consigna impostergable de conocerse mejor. es de la prensa de América esa tarea radical de capacitación del hombre americano, libremente informado, democráticamente dispuesto, respetuoso de la razón y liberado gracias a un periodismo constructivo, del yugo de la ignorancia.
La sed de información americana es antecedente capaz de ricos frutos si recibe satisfacción oportuna y generosa. De un periodismo en tal sentido surge el milagro del esfuerzo, la germinación que logra el advenimiento de las técnicas, el trasplante de los métodos de otras latitudes, la comparación estadística, la discusión en la mesa redonda de los congresos internacionales, el intercambio fraternal de expertos y de estudiantes, de libros y de maestros, la ayuda de América para América: todo ello En la inauguración del Congreso Congreso Interamericano de Prensa, en Quito, el 11. de Julio de 1949 (Del folleto: La libertad de prensa en la Rep. del Ecuador. Quito, 1949. por la obra perseverante de la prensa, la radio pueblos exigen y entienden sin enunciados rey el cinematógrafo.
tóricos, no presupone ni el panegirico ni la Esta información, que nos hará recuperar exclusión de tal o cual doctrina política. Lo los siglos de tinieblas de la prehistoria, en la esencial es que la doctrina, el dirigente, el críprecisión del mundo actual, ha de facultar al tico, el defensor de la misma, piensen y obren hombre americano para elevar su nivel de vi en forma coincidente con las necesidades del da, por la justicia social, tanto en el mejora mundo actual. No se trata de izquierdas o demiento de sistemas, como por la mayor equi rechas; se trata de que se dé a los pueblos un dad en la distribución, y la economía orien liberalismo, un socialismo o un conservatismo, tación del esfuerzo.
que miren hacia el futuro, a partir del presenDigo que América es el Continente del fu te: que tengan el valor de despojarse de sus turo, no en simple recurso oratorio sino en prejuicios, y la nobleza de identificarse en el función de reconocimiento de la realidad de patriotismo.
nuestros pueblos. Desde mi punto de vista, Estimo que la más lógica posición democomo gobernante de un país joven del Mundo crática, exenta de extremismos, es la de una Nuevo, estimo que en política americana no se auténtica orientación liberal. Por tradición y puede actuar sólo de recuerdos, ni servir a un por convicciones creo en la idea liberal y aspipueblo sobre las huellas de una herencia de ro a mantenerla como norma inspiradora de runcillas, de mera discusión de sitios, de intem mi servicio a los ecuatorianos. Por tradición y perancia sin sentido, de discrepancias sin saldo por convicciones respeto la libertad de prensa de servicio. América, en estos momentos, no y seguité respetándola como hizo siempre mi puede agitarse al simple rescoldo de doctrinas, padre desde este mismo sitial que libremente de estructuras, de criterios de tipo siglo XIX. quisieron confiarme mis compatriotas. La norAmérica exige de su periodismo, de sus juven ma liberal es la norma tolerante que ha de pertudes, de sus dirigentes políticos, de sus gober mitir el mejor desarrollo político de nuestra nantes, una actitud, un programa, una persever República, en una competencia elevada de sus rancia de hoy, mitad del siglo XX: es decir, una partidos, mejor y más modernamente organianticipación del futuro, con clara visión de zados. Pero también, para resolver los problemundo. Pensar de otra manera es dar espaldas mas de un pueblo americano, se requiere tener a la realidad y hacerlo, en el periodismo o en de revolucionario y de socialista. Porque la el Gobierno, sería traicionar a un pueblo. clásica libertad teórica del liberalismo manchesEsta sensibilidad contemporánea, que es teriano, propicia a los discursos, a la indifecondición para realizar un progreso que los rencia y a las estatuas, es insuficiente para re Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica