56 REPERTORIO AMERICANO ASPECTOS DEL ARTE MODERNO El Otro. La Clave.
La Clave. Arte Intemporal. El Ojo Mágico Por SALARRUE (Er el Rep. Amer. Hay gran desconcierto en un amplio sector de los amantes de la Belleza a causa de los inusitados derroteros seguidos con gran entusiasmo por gran número de los artistas del presente para expresar sus sentimientos y pensamientos estéticos.
Las nuevas escuelas y expresiones personales esporádicas pastorean ojos y oídos hacia las regiones desconocidas donde crecen plantas que halagan el olfato pero que están en tal forma defendidas por espinas que hay que aprender poco a poco a cogerlas. todo es tan difícil cuando antes era todo tan fácil. El artista trató siempre de imitar las maneras de la Naturaleza; consciente o inconscientemente reguló y creó como ella hasta que Caballo griego arcaico Bronce. 800 a. de Algunos artistas modernos entendieron que había que alejar al otro, lo más posible, de las expresiones de la Naturaleza, que son entendidas, por lo general, como externas, y no por ello falsas, sino que son las sombras proyectadas en el fondo de la cueva de Platón y sólo participan de la realidad en cuanto actúan de acuerdo con la voluntad de los cuerpos que las proyectan, de las cosas en sí. que son la realidad del mundo de la conciencia.
El eterno argumento polémico es. son las ideas las sombras o lo son las cosas? EI artista moderno término medio, ha dado clara respuesta; errado o no, para él la idea es la verdad y por eso trata ahora de expresar ideas, no formas, aunque se valga de formas para la expresión de las ideas.
Algunos artistas de hoy día, sin sacrificar por entero el elemento sugestivo de la forma conocida exteriormente, saben apretar estas formas a modo de extraer de ellas el jugo o la pulpa de la idea. Su procedimiento es de depuración de las mismas formas, de supresión de toda línea o masa considerada superflua, para desnudar la idea cada vez más. La idea así, medio desnuda, participa con facilidad de las luces inherentes y superpuestas de los planos de la emoción y del pensamiento puramente intelectual o filosófico. Estimula el sentimiento anhelo al mismo tiempo que la comprensión. La semidesnuda idea, cualquiera que ésta sea, excita las facultades de apreciación con igual fuerza que la belleza femenina semivelada excita más poderosamente la apreciación sexoinstintiva del hombre normal.
Dentro de estos campos se mueven temperamentos diferentes que se valen de distintos elementos para conseguir sus mejores expresiones: con el color los impresionistas con la línea y la masa los neo clásicos beber o Máscara que representa un ciervo Tejido hecho de corteza de árbol Panamá. Siglo XIX.
René Harnoncourt, una de las prominentes figuras del Museo de Arte Moderno de Nueva York, acaba de organizar una exposición comparativa de 21 piezas de arte contemporáneo, aparejadas con igual número de obras arcaicas, que prueban, hasta cierto punto, que el linaje de las obras modernas puede llegar a encontrarse arraigado en el pasado cercano o lejano y que de manera primitiva, como en la manera superintelectual de hoy día, se dijeron las mismas cosas. Se propone Harnoncourt replicar a aquellos opositores que sostienen enfáticamente ser el arte actual: irreverente, confuso, loco y, en la mayoría de los casos, mera chacota de desocupadas imaginaciones estimuladas por la ignorancia o la irresponsabilidad de una crítica snob y por la gente de negocios de arte así como de los organizadores de exhibiciones exhibicionistas, y que dicha expresión desbasada no tiene precedentes y mucho menos derivaciones de ninguna especie con las expresiones históricas. Por lo expuesto en el Museo de Arte Moderno se puede decir que hay prototipos de estas cosas de hoy en las que se hicieron hace siglos en distintos tiempos y regiones y que siempre que se intentó una expresión personal de profunda sinceridad, muy particularmente en épocas y regiones donde la técnica era feble, estaba en formación o había decaído en extremo, aparecieron esas características de síntesis depurativa que indican el esfuerzo de simplificar la trasmisión o la tradición sin sacrificar la belleza.
Al calor de esta controversia y al margen de esa interesante exposición, nacieron los conceptos aquí pergeñados sobre distinaspectos del arte contemporáneo, un simple close up de las reflexiones del momento, descubrió en él los poderes de otra Naturaleza mucho más compleja: la expresión individual.
Entonces dejó de mirar hacia afuera y comenzó a traducir el mundo que percibía con su conciencia. Al principio reaccionó por intermedio de la percepción sensoria y expresó lo que se oye y se ve, no lo que él oía y veía.
Todos oímos y vemos y nos ponemos sin dificultad de acuerdo en una esfera convencional, consciente o no, donde el rojo es rojo y el azul es azul. Pero. cómo hacer que, fuera de lo convenido, el otro (compañero del camino de la vida) supiera exactamente como era mi rojo y cómo era mi azul? Había que traerle al mundo de mi conciencia para lograr esta indispensable y deleitosa comunión. Cómo entraría él, el otro, en mi jardín murado.
sino entregándole la llave de la puerta en el muro: la llave, la clave. El está ansioso por venir a mi privado ambiente y hacerlo propio; esto creo yo, esto es justificado porque mi mundo interno es el más maravilloso de los mundos. En esto estamos (una vez más. buscando la clave, para que el otro pueda entrar al mundo nuestro, tos BAIXENCE Figura de oro de Chimbayan Colombia. 1400. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica