286 REPERTORIO AMERICANO no ¿Qué es luz y qué es sombra?
Meira Delmar seres que más pertenecen a la muerte que a la vida. En el Rep. Amer. Las funciones vitales, eso que oscuramente el sabio da en llamar instinto con acento opre Lenta vara de espinas demorada sobre de resabios retóricos, de flaquezas de expresión, sivo sencillamente porque no ha llegado a el pávido asombro de la carne hasta el lí de todo énfasis, de todo exceso. En Alba de descifrar su contenido vital, es el lastre y el mite rojo de la herida. Largo viento insis olvido se hermana, a la corrección formal de asiento de la misma vida. Un ser que ha pertente descuajando raíces afianzadas en el las estrofas, la vibración de una finísima sendido la voluntad de dominio, de procreación, gozo. y en la tierra con luz de la sonrisa. sibilidad, que dice su mensaje con muy puro la curiosidad y el anhelo de elevarse armóniFuente espesa y amarga, ya la sangre acento. Sin embargo justo es reconocerlo camente en el plano de la vida, es ya un ser golpeaba con júbilos alzados la redonda también a veces su lirismo se resentía de que ha empezado a negarse. Ya no hay en él pared de las mejillas. Caían los paisajes de cierta facilidad muy apta para lograr cierla condición integral del ente vivo.
la infancia como frutos maduros en sus ta popularidad, pero ajena a esa estilización Nada dice contra el progreso moral del mieles y los dedos negábanse, trenzados y a ese ahondamiento de zonas anímicas que mundo que el ser deformado delinque, que el la sabida fruición de recogerlos. Desalado ballamos en la gran poesía contemporánea. Y, ser oscurecido peque, que el extraviado ignore huracán de locas manos arrancaba los sue precisamente, en su segundo libro Sitio de la armonía social. Tendríamos ante nosotros ños como hojas al propio corazón estre amor, Meira Delmar. realizando una evoluun ser de especie distinta en el hombre que con mecido. el odio derramaba sus cenizas ción digna de todo elogio, dentro de las caractela tara alcohólica, sifilítica, epiléptica o de si enfrente de los ojos anegados subía la rísticas de su sensibilidad ha buscado y hacualesquiera otras naturalezas patológicas, acpresencia de los lirios. En la noche de pár llado nuevas formas de expresión, más sutiles, tuase como una maravilla. No podemos argupados abiertos arcángeles rebeldes inicia más densas, más sugestivas, como puede vamentar acerca del hombre partiendo de verban la sórdida teoría de la duda. Incré lorarse por ejemplo en el poema que inidaderos despropósitos lógicos.
dulas palabras retorcidas cortaban como al cia esta nota. Sus propios romances, que en El progreso cultural y biológico de la esfanjes la garganta de pronto aridecida. Alba de olvido constituían uno de sus méritos pecie no presupone, ni implica, la desintegraPero siempre, detrás de la mañana con su más destacables, son en Sitio de amor más mución del hombre mismo, la desintegración de rostro de niño iluminado el Angel de mi sicales, más límpidos, más esenciales, en su don su ser. Tomar la excepción de una crisis para Guarda aparecía.
de síntesis y en su gracia imaginativa.
deducir principios filosóficos de esta naturaleEl léxico de Meira es rico, pero no fronza, es ir contra la verdad que pretendemos El fino y denso poema que acaba de leerse doso (no confundamos ambas expresiones. abordar en nuestro vuelo.
figura en el más reciente libro de Meira Del Su adjetivación es necesaria para expresar camar, titulado Sitio de amor. Meira Delmar es balmente un estado de ánimo, o para sugerirlo. VIERA ALTAMIRANO.
colombiana y forma, con Marzia de Lusigan, uno de los aspectos más bellos de Sitio de Blanca Isaza de Jaramillo Meza, Luz Stella, amor reside en esas canciones que Meira le ha Maria Teresa Blanco y otros más, el cuadro susurrado al mar, en esa costa colombiana donde la nueva lírica femenina de su bellísima pa de sus sueños vagabundean.
tria, patria de democracia y poesía.
Creemos que el nombre de esta escritora El primer libro de Meira Delmar, Alba de no debe ser olvidado siempre que se hable (Envio del autor)
olvido, apareció en 1942. Señalamos entonces de la actual poesía americana.
la presencia de un auténtico temperamento Gastón FIGUEIRA. Podríamos definir la una, dejando de inpoético, que en plena juventud aparecía libre Montevideo. 1948.
volucrar la otra? No.
Luz y sombra existen, en lo que definimos como luz y como sombra.
Definimos donde hay luz y donde hay sombra tomando como base la máxima luz y (En El Diario de Hoy. San Salvador, la máxima sombra que puede apreciar el ojo El Salvador. Mayo 30 de 1948. humano: que también podríamos llamar la mínima luz y la mínima sombra apreciables.
El hombre tiene que ser, antes que todo, do el profeta las ve despegarse de la tierra, has Desde luego sería absurdo negar que amun ser vivo. El hombre no debe despegar sus ta caer en el engaño de creerse impuros por bas, luz y sombra, son principios antagoniraíces de la tierra, no debe divorciarse de la poseer un cuerpo, es deber del profeta recorcos, representativos de estados diametralmente vida. Una generación que desapareciese co darles que también deben vivir de la tierra.
opuestos, como lo son, por ejemplo: el frío mo un coro de ángeles que se pierde en las La guerra nada dice contra el progreso mo y el calor; sin que por esto dejen de ser temnubes por haber roto sus vinculaciones con ral de la humanidad. Un pueblo que por cir peraturas más o menos elevadas. En el caso de el mundo, sería una generación suicida. La cunstancias históricas se ve precisado a un es la luz y la sombra, podríamos llamar: estados misión del hombre es hacerse dueño de la tie tado de hambre y oscuridad, o que ve llegar de visibilidad.
rra para tener en ella, como un pedestal, un al enemigo a sus fronteras, tiene el derecho Tampoco podríamos negar que existen insitio desde donde medir la grandeza y sentir la de hacer la guerra para vivir. El hacer la gue finitos estados de luz y sombra, porque nuesbelleza de lo otro.
rra no dice nada contra ese pueblo. El choque tros sentidos sean incapaces de captarlos.
La condición inexorable de que el hombre de la barbarie contra los mármoles y las insti Además, concebimos un punto neutro, cono despegue sus pies de la tierra es paralela a tuciones atenienses no dice nada contra los mo aquel en que ambas manifestaciones tiela condición esencial de que no quite su frente bárbaros. Si la barbarie hubiere permanecido nen igual intensidad.
del cielo. Un hombre que se divorciase del en su cubil, acosada por el frío y el hambre, Si pensamos en esto, desde el punto de ideal, de la verdad, de la belleza, del mundo superpoblada y empobrecida, se habría suici vista real de que la luz y la sombra son infide los valores, de la substancia misma de su dado. Su deber era romper las murallas que la nitas en sus manifestaciones, llegamos a la historia, sería un ser negado a sí mismo: de encarcelaban, lanzarse a la vida, aunque su conclusión de que cualquier intensidad de luz jaría de ser hombre para convertirse nueva lanzamiento implicase la destrucción de las y sombra, puede ser, la Absoluta Luz o la Mímente en la mansa y oscura bestia del campo. ajenas civilizaciones. El primer deber del hom nima Sombra, o viceversa.
Bien baría en soltar la herramienta de su ma bre es vivir.
Esto depende de la base de apreciación.
no, en abandonar la noción agitada en su men Un pueblo que no reaccione y en la Si la luz y la sombra son infinitas en su te y arrojar como un harapo el amor de su forma compatible con su saber y su poder dual aspecto de manifestación, deducimos, corazón.
ante el riesgo de la muerte y la opresión, es pues, que son eternas; y siendo lo infinito atriEl hombre es cosa de lo alto, pero tam un pueblo que ya no tiene derecho a engen buto propio de la Divinidad, encontramos así, bién es cosa de lo bajo, de la tierra. Cuando el drar, a perpetuarse. Si un anátomo hiciere la el origen de la luz y la sombra en la divinidad Maestro dice que no sólo de ideal vive el bom disección escrupulosa del hombre que en el ca misma, y siendo la Divinidad: Uno Indivisibre, nos recuerda que también vive de pan. so de necesidad dejó de reaccionar en la forma ble, es, pues, la Absoluta Luz y la Absoluta Cuando el profeta ve a las multitudes lanzar primitiva, encontrará en sus vísceras el testi Sombia con todas sus gradaciones, y por lógise como fuerzas ciegas exclusivamente tras los monio ineludible, fatal, de que ya había emca lo Neutro.
bienes materiales, es su deber recordarles que pezado a morir. El hombre y el pueblo que no Manuel MARROQUIN MORENO.
también viven y han menester del ideal. Cuan se defienden son apenas cadáveres ambulantes, San José, Costa Rica. 1947.
La ley del vivir Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica