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REPERTORIO AMERICANO 83 ANTONIO URBANO EL GREMIO agarran como glotones al hombre vivo y chupan sus partes vitales. Por cada hombre locomotor hay tres o cuatro gorreros que se agarran a él, como si confiriesen un gran honor a la sociedad viviendo a su costa. Mientras tanto llenan las iglesias y mueren y resucitan de vez en cuando. No tienen otra cosa que hacer que pecar y arrepentirse de sus pecados.
Pero en tanto que Thoreau no hizo más que dejar constancia de lo que veía, alabando lo hermoso y lamentando lo feo, Marx y Engels, más activos y más realistas, dieron a quien más le interesaba, al proletariado, una arma con qué atacar al estado burgués y a sus sirvientes y defensores. Esa arma conserva aún, como en el primer día, su fuerza y su violencio. Proletarios de todos los países, uníos!
Esperemos, a ver qué resulta.
TELEFONO 2157 APARTADO 480 ALMACEN DE ABARROTES AL POR POR MAYOR San José, Costa Rica EL FANTASMA METE AHORA MIEDO EN AMÉRICA Por Enrique ESPINOZA. En Babel. Marzo Abril de 1948.
Santiago de Chile. cien años del célebre Manifiesto de simple panfleto verdaderamente inspirado junMarx y de Engels en otros tantos idiomas to a todas las insensateces, a tanto el centiya su arranque shakesperiano, que Alberti metro!
ha puesto en verso español, aun despierta en En un ensayo aparecido en el número 24 nuestra burguesía el mismo eco histérico que de Babel bajo la firma ilustre de Thomas Mann obtuvo casi de inmediato en la vida del viejo y el título de Fantasmas verbales. pueden continente, al ser publicado en Londres a co leerse los siguientes conceptos del más grande mienzos del 48.
de los novelistas de nuestro tiempo: En efecto, ahora como nunca: un fan Creo estar libre de ser considerado un tasma recorre Europa, el mundo. Mas por precursor del comunismo. Sin embargo, no cada obrero impávido que le dice con el poe puedo menos que ver en el terror del mundo ta: Camarada. otro, por lo menos, apega burgués ante la palabra comunismo, en ese pádo a la iglesia o a la gleba, se hace cruces y nico del que tanto tiempo ha vivido el fascisni siquiera sueña escapar alguna vez a su tris mo, algo supersticioso e infantil, la estupidez te condición de siervo asalariado.
fundamental de nuestra época. Esta palabra se ¿Qué mucho entonces que, para seguir parece realmente a un fantasma con que se manteniéndose ocioso, remache hoy tal estado asusta a los niños. El comunismo es el Pedro el petimetre nacionalista, hijo o abogado del Botero de la burguesía, exactamente igual copatrón, que, desde luego, es enemigo acérri mo lo era en Alemania la Social democracia mo de la clase trabajadora organizada en ge allá por 1880. Entonces, bajo Bismarck, era neral?
la encarnación de todo arrasamiento sans cuHay un montón de disfraces para ocultar lottista, y de subversión catótica. Oigo aún al esta verdad. El más antiguo y socorrido es el director de nuestra escuela gritarnos, cuando de la patria en peligro, a la que se impone algunos chicos traviesos de entre nosotros hasalvar no importa como ni a qué precio. la bían dañado a cuchillo bancos y mesas. Os espera de un conflicto exterior, el interno en habéis portado como socialdemócratas! Hoy tre las fuerzas de arriba y abajo es más que diría. Como comunistas! Pues el socialsuficiente para improvisar legiones de hacha dendócrata se convirtió entre tanto en un buen y tiza según la fórmula española.
muchacho que no inspira miedo a nadie.
Pero el marroquismo franquista made por si fuera poco, el autor de La monin Germany se muerde de continuo el rabo taña mágica concluye su alegato en esta forma achacando a medio mundo su propia inspira inequívoca: ción foránea. Comunidad, he ahí la raíz del terrorífi.
El conservador, católico, apostólico y ro co vocablo comunismo. con que Hitler himano, así como el rotario de cualquier marca zo sus conquistas. No me cabe duda alguna o mercado, es autóctono según su escaso jui de que el mundo se mueve nolens, volens. cio; pero el infeliz que presta oídos al Mant inconteniblemente hacia una forma de vida fiesto secular: extranjero, extranjero en toda la para la cual el epíteto de comunista es tolínea. Desde Juan Justo a Luis Franco y davía el más apropiado, es decir, hacia una desde Recabarren a Juvencio Valle. Porque el forma de vida de comunidad, de dependencia burgués, teniéndolo todo, no tiene lógica. Re y responsabilidad mutuas, de común derecho pite ad nauseam el mismo argumento nazi en al consumo de los bienes de esta tierra, simla prensa fascistizante que ayer estuvo plemente a consecuencia de la conexión entre Mussolini y ahora está con Franco.
el espacio terrenal, su empequeñecimiento por Aquí y allá, es cierto, intenta emular a la técnica y la familiarización del mundo en Marx y Engels, pues el Manifiesto, el Mani el que todos tienen derecho de ciudadanía y fiesto por excelencia, le sigue quitando el sue cuya administración interesa a todos.
ño una centuria después de lanzado en el exi Esto podía ser pensado y expuesto ante lio y no a toda página de diario precisamente. un vasto auditorio, en los Estados Unidos, a ¡Luminoso ejemplo de lo que puede un fines de 1944. Ahora, después de la pintoresca inquisición de Hollywood, no puede osarlo ya nadie sin verse arrastrado a los Tribunales como extranjero. Ni siquiera un artista como Thomas Mann. si a tal punto llega el histerismo patriótico en el país de Whitman, Thoreau y Emerson, de tan fuerte tradición libertaria. qué barreras no le opondrá, un poco más al sur, el celo inquisitorial de un Trujillo, un Somoza, un Moríñigo? Como el generalísimo Franco, estos déspotas sostienen todavía que la letra negra.
desde luego entra en la cabeza de los niños con sangre, y que con sangre sale también de la de los hombres, la letra roja. Pero las ideas, como enseñó Sarmiento, no se matan. Se mueren solas o se hacen inmortales.
Por eso resulta inútil meter en la cárcel a quienes las formulan. Procedió acaso de tal modo Inglaterra, cuando Marx y Engels declararon con máxima claridad en 1848: Es hora ya de que los comunistas den a conocer al mundo abier tamente, su modo de pensar, sus fines y sus tendencias; que opongan la fábula del fantasma del comunismo un manifiesto del partido. En verdad, a cien años del Manifiesto, la burguesía se ha uniformado en todas las latitudes de la tierra contra el espectro del cuarenta y ocho. Lo que viene a confirmar la vigencia universal del reto irónico que le formulan Marx y Engels en las últimas líneas de su ardiente alocución. como el miedo es mal consejero, inflando al fantasma la burguesía sólo consigue difundirlo. Una labor contraproducente que Lenín denunció a tiempo con su habitual rudeza. He aquí sus palabras:. Cuando la burguesía americana, desorientada por completo, detiene a miles de individuos ospechosos de comunismo, y propagando por todas partes la nueva de conjuraciones bolcheviques, crea un ambiente de pánico; cuando la burguesía inglesa la más seria de todas las burguesías del mundo con todo su espíritu y toda su experiencia comete inverosímiles tonterías, funda bien dotadas sociedades para luchar contra el comunismo, crea una literatura especial en torno al comunismo y toma a su servicio un personal suplementario de críticos, agitadores y sacerdotes, nosotros debemos saludar y dar las gracias a los señores capitalistas. Trabajan para nosotros.
Nos ayudan a interesar a las masas en la naturaleza y valor del comunismo.
Hoy, cuando para defender la democracia (con minúscula. en el Brasil como en el Paraguay, Nicaragua o Santo Domingo, la burguesía indígena recurre a esta propaganda suicida, y con el estado de sitio, establece la con Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica