RUPERTORIO AMERICANO 141 RADIUS Calle del Variedades. TELEFONO 4692 Espejos de todas las clases Cuadros Marcos Objetos tallados Souvenirs Oleos y Acuarelas Vidrios para sobre de muebles y para Automóviles SERIEDAD RAPIDEZ EFICIENCIA nidad espiritual. Pues la acción luminosa revelará la fe y creará para cada día el gozo de vivir y de servir.
Heberto SEIN.
bres. Por tanto, buscan lo que es de Dios en todos los hombres y en todas las cosas.
Movidos por un espíritu de profundo respeto a la vida y personalidad humanas, espíritu que se inspira en el Cristo, quien vino a redimir a los hombres íntegramente (espiritual, social y económicamente. los cuáqueros no pueden participar en empresas de destrucción humana tal como la guerra, ni en el espíritu que la engendra o la alienta, ni en movimientos de prejuicio racial o de opresión económica o social. la vez que los cuáqueros se oponen a la guerra con profunda convicción y ansían persuadir a los hombres del supremo deber humano y divino de no prestarse para la destrucción de sus semejantes, su auxilio internacional se extiende a las víctimas de las guerras, persecuciones u opresiones no importa quiénes sean.
La religión de los Amigos se basa en la fe en esa Luz Interior o revelación directa del Espíritu y de la voluntad divina en cada alma que sinceramente la busca. La experiencia ha enseñado que cuando el hombre calla da a Dios oportunidad de hablar. En sus reuniones los Amigos se entregan a la meditación, o la oración dinámica. Sus reuniones no tienen liturgia. Se basan en un silencio reverente consagrado a la comunión intima con Dios, esa comunión que es la esencia de toda vida y de toda obra que Dios ha inspirado a través de los siglos.
En esa reunión, cada persona se siente libre para compartir de su experiencia espiritual con los demás. Hay quien en ese silencio hace examen de su conducta, hay quien se siente unido con los demás en la búsqueda intima y sincera de la verdad, hay quien abre su corazón en sencillas palabras, hay quien lee un mensaje del Evangelio o de una carta conmovedora, hay quien experimenta ese profundo regocijo al recibir la visión de la tarea que le es encomendada por el Espíritu que a través de nuestra humanidad doliente y de nuestras obras imperfectas abre caminos a su multiforme expresión. Pues los cuáqueros creen que tal vida espiritual abarca toda la vida, y se extiende a todos los problemas humanos.
La Sociedad de los Amigos, camina y lucha junto con todos los hombres de buena voluntad animados de un ideal elevado, no importa cuáles sean sus conceptos filosóficos o religiosos. Ansía ver a los hombres unidos en obras constructivas, puras, inspiradas en una visión clara de justicia social mundial y un sentimiento profundo de viva confraterEn San Juan de Puerto Rico consigue Ud. la suscripción a este semanario con: VICENTE CO. Box 241 Nota: La Sociedad fué fundada por Jorge Fox, de Leicestershire, Inglaterra, por el año de 1650. Los miembros de la Sociedad se Jlaman Amigos. El nombre Quaker (cuáquero. el que se estremece, del verbo to quake, estremecer, vibrar, fué aplicado por primera vez a los Amigos en 1650 por un juez que lo aplicó a Fox quien había dicho al magistrado que debería estremecerse ante la palabra de Dios.
En Caracas, lo consigue con: Doña Celia de Maduro Apartado 281 De la religión de los Amigos, expresó lo siguiente el psicólogo William James. Varieties of Religious Experience. 1902. La religión de la Sociedad de los cuáqueros que Fox fundó, es algo que es imposible de encarecer demasiado. En una época de falsedades fué una religión de veracidad, arraigada en lo espiritual dentro del hombre, y constituyó el retorno a algo más aproximado a la verdad primitiva evangélica que lo que la gente de Inglaterra jamás había visto. En cuanto nuestras sectas Cristianas de hoy evolucionan hacia la liberalidad, sencillamente regresan en esencia a la posición que Fox y los cuáqueros primitivos asumieron hace mucho tiempo.
Nobles agentes de enlace intelectual precede a la filosofía, es decir, lo material hace posible y asegura el florecimiento de lo espiritual. Lo de temer era que se pretendiese continuar indfinidamente por ese camino, acumulando riquezas que acrecientan la capacidad productora de la nación, en desmedro olvido de la curiosidad científica y de la inquietud estética.
Muchos vaticinios llevamos oídos sobre el porvenir de la inteligencia en el continente americano, heredero de los bienes espirituales del europeo y sucesor natural del mismo en la historia de la cultura. Recordaremos algunos conceptos de Paul Valéry expresados el 21 de noviembre de 1938 en la muestra del libro argentino realizada en París. Después de señalar los males absurdos de Europa y la enorme ansiedad que por entonces reinaba, dijo con palabra firme y honda convicción. Estas terribles condiciones son mucho más amenazantes para el porvenir de la cultura de nuestro viejo continente. Ya dejan sentirse y se comprueban en los más elevados dominios de la creación y el saber: una disminución sensible de valores. Qué será de nuestros tesoros y de nuestras esperanzas. si una guerra acaba anonadando a la deplorable Europa? Valéry dió él mismo la respuesta: Una América más libre, sabia y confiada que nosotros habrá recogido lo mejor de nuestras obras y habrá recibido quizás algunos representantes de nuestras tradiciones de cultura. No trabajamos sólo para nosotros, señores argentinos, sino para que nosotros no perezcamos del todo.
Esos conceptos, releídos a diez años de distancia después de haber sido pronunciados, justifican, en mucho, la visión casi profética del poeta que sabía meditar en la historia.
Para que los pueblos nunca perezcan del todo (Es un editorial de La Prensa de Buenos Aires, de agosto de 1948). Los hombres de pensamiento que casi dia Atlántico en busca de los nutridos auditorios riamente llegan a Buenos Aires son los más que brindan la capital argentina y las más nobles agentes de enlace intelectual entre Eu renombradas capitales provincianas. Nada pueropa y América. Los meses invernales, de in de ser más promisorio y simpático. Buenos tensa actividad cultural y artística entre nos Aires, desde sus más lejanos días, siempre asotros, coinciden, afortunadamente, con la épo piró a que por ella pasara algo así como un ca veraniega en los países del antiguo conti meridiano espiritual.
nente. Ello favorece esta clase de excursiones No se les ocultó a nuestros prohombres tan proficuas para la mente de los estudio del pasado la inmensa tarea que les aguardaba sos. Profesores eminentes, filósofos de obra para convertir al país en la nueva y glorioen jundiosa y universal, literatos de fuste, poe sa nación por ellos soñada. Vieron con clatas esclarecidos, filólogos, críticos de arte, pin ridad que la tendencia general se orientaba tores y maestros de la música, teólogos y exé hacia las profesiones y actividades lucrativas, getas de toda suerte, compañías que honran lo cual no era censurable, desde luego, pues la escena del teatro moderno, atraviesan el de acuerdo con la pretérita sentencia, la vida Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica