366 REPERTORIO AMERICANO DE LA ESPERA Conchanácar en cristal! Espumas que hacen un tul tenue entre la oscuridad.
La niña de la sombrilla casi gris de tanto azul está desnuda ante el mar. Espero que vendrá! quien no espera, como por un designio de la suerte, la emoción ruda y a la vez viajera de la vida y la muerte.
Espejos de plata gris! Lamparitas de cristal!
Dos cuerpos borrosos junta la trémula oscuridad!
Mece las barcas el mar como entre brumas de tul y de lejos, en la orilla, la sombrilla, tirada en la playa azul Esperar. Esperar! Eso es la vida. Aunque fuese a mentir por esperada!
Una verdad perfecta y preferida que es todo y nada. no sentir si llega o retenida en la frase no dicha darla el viento.
Procelosa, fugaz, desconocida, desnuda en la mitad del pensamiento.
LA VOZ Nuestra voz es un grito que ha girado mil siglos y nuestro cuerpo un átomo que hacia la tierra va.
Nuest:o dolor un canto y más que canto un signo del gran misterio errante de la inmortalidad. luego no saber qué se ha esperado. no saber qué fué lo que la muerte pudo llevarse, sin habernos dado, este bello dolor de esperar siempre.
Porque viene de arriba y hacia allá sube el alma.
Porque hacia el halo de oro de la luz va el amor.
Porque nuestra palabra ya no es sólo palabra y nuestra pesadumbre ya no es sólo dolor.
EVOCACION DE LA ALONDRA MUERTA La voz sobre la tierra germina cual semilla y un día no lejano nos da su fruto astral.
Cierra tus ojos poeta para la maravilla y despierta el espíritu para la eternidad.
De Stella Sierra. Tomado de Calle 6, de la sección Ficción y Realidad que tan acertadamente dirige Rogelio Sinán. UN POEMA DE STELLA SIERRA Alondra muerta flor de sol y cielo, te dormiste a mis plantas como si un viaje de certera flecha atravesara mudo esa tu blanca irradiación de nardos.
Tú bordaste el tapiz de la mañana mañanita de julio limpia y pura con el eco indeciso de tu vida ya tota. La hoz de plata rozó aquella campana leve y mágica!
Era tu última queja. yo miraba en plena caricia de mi sueño tu pico negro abierto para el canto del adiós sin retorno!
Tú sabías del trino y de la miel de la corola virgen; de los juegos del sol en la pradera rosa, verde y lila.
Era tu manto de vellón de cielo y tu frágil cobija fué la noche. EVOCACION DE LA ALONDRA MUERTA (En el Rep. Amer. Envío del autor, en San José de Costa Rica, mayo de 1948. En la poesía moderna en lengua españo Una obra de arte no admite comparación la, este poema de Stella Sierra alcanza, sin du externa; habrá siempre que valorarla de acuerda, el alto nivel de las realizaciones clásicas. do con ella misma. Sin embargo pongamos Su línea arquitectónica se desenvuelve en unos a la par de otros, pétalos de las dos roequilibrio perfecto, entrañando, sin desbordes sas el poema de Shelley, el poema de Stella acres ni ángulos complejos y punzantes, el do Sierra en intento de valoración cualitativa, lor de la elegia: dolor ennoblecido que se con por su semejanza, en el plano de la creación vierte en melancolía serena y que, sin desindi estética.
vidualizarse, sobrepasa lo anecdótico particular y adquiere valor universal, permanente. Shelley: Las calidades clásicas de este poema residen en su levedad, en sus imágenes, en su From the earth thou springest like a musicalidad. Recordamos las Odas de Fray cloud of fire.
Luis. Se alza la emoción sin pesantez agonizanS. Sierra: te, como columra dórica, como vara de nardo, como claro chorro de fuente, sostenida en una Eras prisma de oro, reina del aire, con pura gracia de alas de luz.
Las imágenes se adecúan a la expresión del tus dos alas combas!
esencial lirismo sin desperdicio, en un acoplamiento de planos sutiles. Llegan directa Shelley: mente al alma fecundándola con su originalidad legítima, como que han surgido sin es In the golden lightning of the sunken fuerzo, sin rebusca artificiosa, de una intui sun, er which clouds are brightning, thou ción rica en inéditas valoraciones de la belle dost float and run: like an unbodied joy za del mundo.
whose race is just begun.
Sus imágenes son precisas; preciosas, sin. preciosismo, fuertemente cargadas de un natu Sierra: ral poder evocativo que como un halo mágico las circunda. Tú bordaste el tapiz de la mañana El poema se da plasmado en esencia de mañanita de julio limpia y pura con el eco musicalidad sin estridencias; su línea melódica indeciso de tu vida ya rota. La hoz de plata se va moldeando en unidad perfecta con su rozó aquella campana leve y mágica! Era tu forma, como en las sinfonías de Beethoven. última queja. Evocación de la alondra muerta de Stella Sierra es de la misma estirpe lírica de La Ambos son poemas de la misma calidad Margarita de Andersen; de El Príncipe Fe lírica, como dos bellas rosas son dos bellas liz de Wilde sin el lujo recargado y sin rosas, en la múltiple belleza del jardín.
la fastuosidad policromática del gran Oscary, sobre todo, es de la misma vena lírica de Carlos Luis SAENZ La alondra. de Shelley. Cómo se alboiozaba tu garganta melodía desnudacuando te me ibas recta hacia la cumbre ignorada del alba!
Eras prisma de oro reina del aire, con tus dos alas combas!
Pero te veo aquí, dulce renunciamiento, dormida para siempre.
Ya no palpitarí. loh nunca, nuncalese adorado corazón de nardos que dormía en tu pecho de cristal.
El pico agudo, negro. qué solicita ahora de la nube de oro. Muerta alondra de luz de mis mañanas, abre tu pecho herido y recogeme humilde.
encerrada por siempre en tu añoranza. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica