270 REPERTORIO AMERICANO sadas en que han desaparecido por completo los principios de la neutralidad y los derechos de los neutrales, para dejar en pie la máxima evangelista (seguramente quiso decir evangélica) de que el que no está conmigo está contra mi. De donde concluye, con aire rotundo y sin tomarse la pena de decirnos por qué, ni más ni menos que esto: No puede, por consiguiente, discutirse la conveniencia de cooperar con Estados Unidos para la defensa continental. tras de haber dejado establecida así la indiscutible conveniencia de cooperar a una defensa continental cuyos alcances legitimos y verdaderas finalidades no intenta siquiera esbozar, a excepción hecha de dejar sentado como principio cardinal el dogma de que servirá para sumarnos a una contienda entre Rusia y los Estados Unidos, y esto sin más ni más, simplemente por tratarse de Rusia por un lado y los Estados Unidos por el otro, hállase o no comprometida la defensa de nuestro continente y sean o no los Estados Unidos el país agresor; tras de eso, concluye afirmando que, en tales condiciones, el Presidente Alemán necesita toda la yuda que pueda prestarle el pueblo mexicano y textualmente declara que esa ayuda debe ser no sólo en forma de apoyo o respaldo incondicional, sino para el estudio y resolución de tan ingente y trascendental problema.
Para el licenciado Cabrera, pues, la defensa continental consiste en sumarnos, como sea, a la guerra contra Rusia. Para él, es indiscutible que debemos hacerlo. Bien es verdad qué al incorporarnos en esa extraña defensa continental (que a lo mejor nos lleva a defender el Continente Americano, digamos en Grecia o en los pozos petroleros del Cercano Oriente. al poner en práctica la alianza militar con los Estados Unidos, como él teme, es muy posible que el peligro de perder nuestra independencia y nuestra fisonomía de pueblo libre, se convierta en inmediata realidad; pero eso es secundario, lo esencial radica en que todos. convengamos en que es indiscutible la conveniencia de que, con nosotros a la cabeza, ningún país latinoamericano sea neutral en la guerra contra Rusia. Concebidas las cosas tal como el licenciado Cabrera las entiende, bien puede decirse que, en verdad, sólo contando con ese tipo de apoyo o respaldo incondicional (predicado ahora por quien hace cuarenta años fustigara duramente la famosa frase de aquel científico que en el Jockey Club habló de apoyo incondicional al viejo Díaz, y por incondicional, listo para los convertidos el día de mañana en realidallegar a la ignominia. sólo contando con ese des, impulsadas por intereses de clases o por tipo de apoyo, repetimos, podría un Presi prejuicios.
dente llevar a cabo tan siniestra empresa.
Por fortuna, podemos ser amigos de los Por fortuna, frente a la tesis del apoyo in Estados Unidos, sin tener que entregarles, a condicional al Presidente, que desemboca (por cambio de la amistad. que se vería transforque para eso está hecha) en la guerra san mada automáticamente en servidumbre el ta contra Rusia, se alza la tesis del apoyo manejo de nuestro ejército, el control de nuesconsciente, y por consiguiente condicion ins tros puertos y fronteras, el dominio de nuespirado en anhelos de paz y verdadera defensa tras carreteras y nuestros campos de aviación, de la América.
ni la elaboración y aplicación de nuestra poEsta última es, sin duda, la tesis del puelítica arancelaria y comercial. México no es blo mexicano. La otra, la de quienes están un platanar centroamericano, ni una isla del dedicados a preparar un ambiente de guerra Pacífico, por más que haya todavía mexicaen los países de Latinoamérica, se basa en un nos que con tal de tener automóvil propio, truco que es indispensable exhibir y denunciar desearían que lo fuese, aunque sin atraverse a con toda claridad. Consiste, como lo hace el confesarlo.
licenciado Cabrera, en dar grandes voces de Los Estados Unidos no son ni un país alarma sobre el peligro de que perdamos nues de monstruos, ni un país de insensatos. petra independencia y nuestra nacionalidad si nos sar de que por las diferencias de lenguas y de rehusamos a celebrar una alianza belicosa y costumbres, los dirigentes de ese pueblo no aventurera; pero no para empujarnos a re entiendan la psicología y los resortes íntimos chazar (como cualquier ingenuo ciudadano de la conducta de los latinoamericanos, miden pensaria. sino precisamente para lo contrabien a estas horas lo que significa para ellos rio, para llevarnos a aceptarla. a cambio de la amistad con todo el continente y saben los que el gran socio en la empresa, el león feroz peligros inmensos que encerrarían veinte puey omnipotente nos deje seguir gozando, en blos hostiles a su lado.
forma generosa, de la autonomía y la liber Por fortuna, la oportunidad para negociar, tad. que estábamos a punto de perder. si existe. Si sabemos ser hábiles, y sobre todo, si nos hubiéramos rehusado. en otras pala alcanzamos a ser moralmente valientes, podebras: con el coco de la invasión, como ni mos conservar nuestra nacionalidad con autoños nos llevan a cumplir la faena de la alian nomía. si además, renunciamos al espejismo za. Ingenioso el procedimiento, no se puede de salir de la pobreza por el fácil camino de negar; aunque la maniobra sea tan vieja co la venta sin dignidad y por añadidura sin tamo la humanidad!
lento.
Por fortuna, las cosas no son ni tan neLo fundamental es jugar con entereza. gras ni tan simples. Por fortuna, no es verdad hacerlo limpiamente, sin trapacerías de argenque el destino nos plantee como macabra distino. Los Estados Unidos deben saber con preyuntiva, de extremos igualmente inadmisibles, cisión cuáles son los límites de nuestras conla esclavitud en nuestro propio territorio, por cesiones y cuáles los motivos de nuestra resisuna parte, o la provocación inmediata de una tencia a ir más allá. Conociendo la mecánica guerra suicida, por la otra. Hay impulsos bé real de nuestros actos, sus propios intereses les licos en ciertos sectores reaccionarios de los llevarán a una articulación equilibrada y amisEstados Unidos, que ciertamente son un fenó tosa. Si por ignorancia de lo que es nuestro meno de barbarie atómica; pero mueve a risa país, pretenden entrometerse en el manejo de pensar que por el mero hecho de no entregar nuestro cjército o suprimir nuestras aduanas nos incondicionalmente, por resistirnos a to para vecho de sus mercancías, habrá que mar parte en una empresa que en los propios decirles, lisa y llanamente: no. lo entenEstados Unidos levanta opositores de tanta derán. Como entendieron, cuando en los priautoridad moral y de tan fuerte prestigio co meros días de 1942 trataban de ocupar bases no el ex Vicepresidente Henry Wallace, territoriales en nuestra Baja California y las México va a ser arrasado y ocupado su terriautoridades militares mexicanas les dijeron rotorio. Más bien parece que las voces pesimistundamente: no.
tas, aparentando dolerse de peligros que no Por eso, muy al revés de que el Presidenaconsejan combatir, esconden el anhelo de ver te Alemán necesite respaldo incondicional del pueblo mexicano, lo que le hace falta es el apoyo consciente en estrecha sujeción a las condiciones de patriotismo y eficacia que han de caracterizar su gestión. En vez de incondicional ha de ser el apoyo más sujeto a requisitos. Sólo subsistirá mientras la gestión sea sana. si se excede o se desvía, el pueblo dejará oir su protesta.
Débil sería la posición de nuestro Presidente, si a la hora de las negociaciones en Washington sólo pudiera dejar escuchar los balidos incondicionales de sus veinte millones de fieles ovejas, y no el argumento supremo, de la negativa incambiable de un pueblo entero!
Los pueblos de Latinoamérica apoyan la defensa continental. Pero con una condición precisa: que no se quiera amparar con ese nombre, ningún género de aventuras expansionistas en otros continentes, o de luchas encaminadas a la conquista violenta del predominio universal. El sistema interamericano de defensa funcionó eficazmente en la guerra pasada.
sólo cuando el ataque de Pearl Harbor patentizó una tangible y no buscada amenaza ge RADIUS Calle del Variedades TELEFONO 4692 Espejos de todas las clases Cuadros Marcos Objetos tallados Souvenirs Oleos y Acuarelas Vidrios para sobre de muebles y para Automóviles SERIEDAD RAPIDEZ. EFICIENCIA Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica