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134 REPERTORIO AMERICANO QUÉ HORA ES. OXU Sobre la formación del maestro Abundan en la pedagogia moderna las expresiones: educación social, desarrollo de la íntegra personalidad del educando, trabajo socializado, etc. expresiones todas que subrayan la importancia de capacitar al joven para integrarse en un equipo, laborar en grupo y actuar sin complejos ni prepotencias en una colectividad disciplinada democráticamente.
Es el imperativo del momento que vivimos y una reacción en contra tanto del individualismo egocéntrico del siglo XIX, como de los totalitarios del XX que en la última guerra precipitaron a la cultura europea a una catástrofe sin precedentes.
Educación social es un término ambiguo y complejo que conviene analizar para no caer en malentendidos que nos extravíen. Cuál es la piedra angular de la vida en grupo, cuál es aquel factor sin cuya concurrencia perece. Un desarrollo económico más o menos parejo, una cultura semejante, la aceptación voluntaria a un régimen legal, jurídico o cívico? Sin duda; mas, la luz de la experiencia, nos parece previo, básico y más esencial que todo eso, la capacidad y la voluntad de someterse a ciertas normas éticas. Sin un apoyo moral, el derecho es burlado, las relaciones humanas quedan a merced de los rapaces; se desvirtúan y se desquician hasta malograrlos, los beneficios incluso de la democracia, las técnicas, el derecho y la cultura.
Ilustremos estos asertos con ejemplos de la vida diaria. Necesitamos un obrero, un gasfiter. Indagamos cuál puede servirnos. Fulano de Tal. Conoce a fondo su oficio y trabajará muy bien hasta el momento en que se emborrache, deje la tarea a medio hacer o sencillamente la abandone. Otro: un empleado público atiende una oficina de importancia, dadas su inteligencia y preparación. Es muy capaz de servirla con singular acierto; empero la atención y rectitud con que expide sus informes están en relación directa con la generosidad o las influencias del solicitante. Este médico se tituló con votaciones óptimas; es poseedor de una técnica que ha costado años de instrucción y miles de pesos en equipos y profesores. Desgraciadamente, acepta muchísimo más trabajo que el que puede atender, o mercantiliza su vocación o se niega a servir a quien no lo puede pagar. La ley la del comisariato, por ejemplo ha sido dictada con el más sano de los propósitos de servicio al pueblo. Pero ¿de qué valdría si aquellos en cuyas manos se confia su realización fuesen venales, traficantes y especuladores? En una esfera más amplia, la agonía, la tortura de millones de seres en los campos de concentración o bajo el macabro martilleo de las bombas, nos están convenciendo de que el investigador que posee la más adelantada de las técnicas, suele colocarse al servicio de una crueldad sorda a toda misericordia humana.
Estos seres recibieron una alta educación, participaron de los bienes máximos de la cultituye nuestra intima personalidad. Es decir que mientras el maestro cree en la posibilidad de educar a otros, él mismo suele pensar Lecturas para maestros: Nuevos hechos, que nada ni nadie puede influir tanto sobre nuevas ideas, sugestiones, incitaciones, él que le haga variar. La única evolución que perspectivas y rumbos, noticias, revisio acepta es la que se verifica bajo su propia nes, antipedagogia.
tuición o anhelo.
La verdadera educación, como la más valiosa sabiduría no estriban, sin embargo, en enseñar o en saber algo, sino en despertar la (En el Rep. Amer. Envío de la autora, apetencia para esforzarse en aprender más y más, en seguir ininterrumpidamente un camien Santiago de Chile. no de superación.
tura, aprendieron el empleo de técnicas refi Difícil y delicada tarea, la de educar al nadas. Las malograron por desdén, ausencia u adulto. Volvamos los ojos, entonces, a las olvido de una doctrina moral que orientase escuelas normales y a los institutos pedagósus actividades hacia el bien de todos. Pode gicos en donde se les reúne en la edad infinimos, pues, inferir que fundamento último tamente fecunda de la juventud y en donde y esencial de una colectividad que desee per puede guiarles el consejo, el ejemplo o la perdurar y vivir en justicia, paz y bienestar, es suasión. Mas, si en alguna disciplina, nuesel factor ético.
tra metodología es rudimentaria, es en la enPor muchos siglos cada tipo de moral ha señanza de la moral. Sabemos que la prédica sido acompañado de una clase de religión: ayuna del ejemplo y que éste desprovisto de la necesidad social de aquella buscó un apoyo esa efusión cordial y esa simpatía humana en el mandato de los dioses para adentrarla que nos incita a imitarlos, no sólo son estéasí más profundamente en el ánimo temero riles sino aun contraproducentes. Ante tamaso de las multitudes. La fecundidad de su ñas dificultades, muchas escuelas se cruzan de obra, sin embargo, puede medirse menos por brazos. Es como si de antemano se declarasen la importancia que conceden a la obediencia vencidas, como si de antemano sus maestros del rito como a la inculcación de los precep se resignaran a ser instructores, y no consetos morales. cuando el hombre moderno jeros ni guías en la ciencia suprema del vise refiere a éstos ya no lo hace con referencia vir y perdurar.
a un tipo de divinidad cualquiera, sino a su Educación social es lo que nos falta en contenido humano, de servicio social. No nuestros planteles, afirman los más avanzados hay moral sin religión, afirman algunos cre pedagogos. Mas. cómo realizarla sin maesyentes. La verdad es otra: que no hay socie tros que hayan sido preparados desde su judad sin moral. Si ésta falla, la sociedad se des ventud en esta ardua, delicada y compleja disintegra y perece.
ciplina, sin personalidades depuradas y vaAhora bien. es posible enriquecer el ba lientes, capaces de defender su posición y sus gaje ético del educador en forma tal que le convicciones con las armas de la filosofía, de habilite para ser el guía de la generación jo la cultura, del conocimiento del mundo en ven, y si lo podemos. qué técnica, qué meto que actuamos y sobre todo del ejemplo de dología emplear para conseguirlo? Porque to sus propias vidas?
do cuanto empeño y dinero se gaste en la pre Estas líneas son una invitación a meditar paración del maestro será vertido estérilmente en la responsabilidad que cabe a las escuelas si olvidamos su máxima tarea: la de servir normales e institutos pedagógicos en el éxito a, la superación espiritual. Por otra parte, o en el fracaso de la renovación que deseamos el educador que todos conocemos, acaso no en nuestro sistema didáctico, porque en úlrequiera una preparación de esta especie, por timo término es la personalidad ética del proque ya la posee, o quién sabe si no admite que fesor la que va a decidir.
intentemos influir sobre él. El adulto se resiente, se ofende de una intromisión en ese Amanda LABARCA reducto inexpugnable e irreductible que consEl temor de Dios (Envío de Alfredo Cardona Peña, en México, No fueron los fantasmas, ni los bultos, tuve siempre miedo de todo esto y nunca me ni los ruidos misteriosos de la noche, ni los atreví a ir más allá de mis fuerzas. Conocí aparecidos, ni los muertos, ni los vivos, ni el gentes que lo habían hecho y algunos que diablo, sino Dios, lo que me aterró en mi ni traté me contaron cosas tremendas.
ñez. El viento, dándose de golpes contra las Los pájaros agoreros, porque podían anunpuertas, quejándose por las rendijas, bregando ciar la muerte de mis mayores, era algo que por entrar por las troneras, dando vuelta a la evitaba, cantando o silbando en las noches casa, sí, solía espantarme; pero era un temor para no oírlos o para espantarlos y alejarlos.
pasajero. El aullido de los perros que yo aprenEl alcabarán, el tecolote que anuncian la muerdi a identificar con el motivo que lo provo te del indio, y que cantan todo el año, pero caba, también alguna vez me inquieto, pero al que sólo oímos y damos crédito cuando justamente por saber su causa, pronto lo ol alguno agoniza en la familia. Así, un triste vidaba, y volvía a quedarme dormido. Nun desenlace, prueba que cuando el tecolote y el ca pude ver lo que los perros veían; por eso alcabarán cantan, el indio muere. Pero no era aunque un hombre sepa la razón de sus au nada de esto mi terror. Tampoco lo eran las llidos, puede quedarse tranquilo, pues lo que visiones, siempre propicias cuando alguno esmás espanta es todo lo que entra por los ojos. tá próximo a morir, sobre todo de esas enferPara que un hombre vea lo mismo que ven medades de por sí mortales. Una de esas enlos perros, dicen los indios, requiere que se fermedades que lo matan a uno desde el moponga en los ojos lagañas del animal, pero yo mento en que se declaran, aunque se siga ca Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica