REPERTORIO AMERICANO 65 SON DOS POEMAS DE ISAAC FELIPE AZOFEIFA (En el Rep. Amer. BOOZ HABLA AMOR PERDIDO HALLADO Y aconteció que entrendo en Bethlehem, to.
da la ciudad se conmovió por razón de ellas.
Ruth, 19 LA LLEGADA Ni rosa mi aire.
Tierra quiero que seas.
Porque digo tu nombre y brotan las espigas.
El rostro de las gentes forece como un muro iluninado. sé que estás aquí.
y sé que ya has entrado en la ciudad, como un río de leche y miel, como una procesión de banderas, como un ángel desde el cual Dios nos habla más cercano Dónde hallar el reposo. Dónde el alma abandonar, dormida, en esta noche.
Ha vuelto el ángel otra vez, el ángel de la desesperada soledad. Su espada hiende mi oscuro corazón de hombre, Eroncha el haz solidario de mis nervios y arroja sal al río de las lágrimas.
Ella está allt. Cercana y lejos. Duterme.
La noche está a su lado, encima, en torno.
untándole fatiga y dulces sueños.
Oh, mis manos inútiles, mi voz desesperada!
Oh, la inútil urgencia desvelada de hallar su vos, de retener su mano.
Despierta! Ven! Levántate! Establece el suave vuelo de palomas que sin querer te nace de la frente.
Pulpa de tierno trigo, bajen tus manos a mis párpados rebeldes.
Siéntate aquí. Que el ángel enemigo huya, cuando tus manos en mi frente hagan profundo el sueño mío y mi vida profunda.
Entonces Booz dijo a Ruth: Oye, hija mía, bo vayas a espigar a otro campo ni pases de aquí.
Ruth, 28 LAS ESPIGAS Te he mirado de lejos.
Te he visto babajar sobre la tierra.
Nacían las espigas de tu mano.
Tus pics iban sembrando la semilla de las cosechas futuras.
Tu aliento levantaba un dulce viento de primavera sobre el campo.
Inclinados sobre tu nombre, bebian, el vino de la vida las cosas y los hombres.
Entonces me acerqué y vi fu alma. te ofrecí mi corazón como un desierto sin dueño.
La sola y sombría estrella de mi alma.
Retiróse a dormir a un lado del mouton. Botonces ella vino calladamente.
Ruth, EL SUEÑO Aquí estás.
Desperté en esta noche tenebrosa.
Sobre la tierra pura había tendido mi fatiga.
Sobre un lecho de espigas desatadas.
y ahora estás aquí bajo la noche.
En qué instante y de dónde.
Del vasto cielo vmiste, o viniste del fondo de la tierra Me estremecí y palpe.
y eras tú.
y tu silencio me rodeaba semejante a la noche sobre el campo.
Mi alma cae en tres pupilas apenas con la oscura resistencia del último deseo.
Mirame. Mirame. Penetra por mis ojos.
Húndeme en ti mirándome. Poséeme.
Quiero pertenecerle. Deshacerme en moléculas dulces inundándote.
Anonádame en ti mientras me miras.
Oh, qué dulce descenso hacia tu alma!
Se abre mi corazón como una rosa resucitada; gira mi corazón como un pájaro loco.
Mi corazón, de vuelta del sollozo Entra en mis ojos. Húndcte.
En mis ojos anégate.
Viértete como un vino en mi. Fecúndame. en silencio total, el alma entregue al instante perfecto el don perfecio. Yo wi tu estrella descender al fondo de esta cuenca vacía de mi alma.
Mi corazón es la campana única de eslas bodas celestes.
Aleluya!
Mi mano está en tu mano para siempre.
Cómo cortar las venas enlazadas!
Como una estrella dulce tu corazón invade mi alma, que desde el fondo de la tierra ha venido a encontrarte.
Te levanto en los brazos y establezco la muralla de miel de mi ternura.
Aleluya!
Booz, pues, tomó a Ruth, y ella fué su mujer.
Ruth, 13.
LA FIESTA Me has redimido.
Este es mi cuerpo. Esta es mi alma. Esto poseo.
Libre en tus brazos.
Profundo en el regreso de conocer tu espíritu.
Sereno en la apacible dulsura de tu angustia, Bebe mi vino.
Come mi pan.
crucemos los campos donde duermen las espigas de mañana.
Bauticemos el día con tu nombre con mi nombre.
Costa Rica. Febrero de 1947.
Oidme. Esta es mi vida. He regresado.
Pero no he vuelto solo.
Ya no estoy solo. Oídlo. Ella va al lado mato.
y en mí, dentro de mí, come mi sangre mi alma. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica