Carmen Lyra

REPERTORIO AMERICANO 107 merosas reflexiones me han interesado. Me cerraron el paso; pero ellos quitaron las re latinoamericano en la literatura, y quiero quedo con ganas de saber más cosas de jas de la intriga envidiosa, los muros de in incluir en ella un cuento de la señora CarOsejo, hasta llegarlo a comprender con emo. diferencia e incomprensión, y se salieron men Lira. Como carezco de su dirección, ción histórica. Me parece que sigue iacomcon las suyas.
he pensado que Ud. tendría la amabilidad prendido. hasta luego, jóvenes de Superación.
de hacer llegar a sus manos la adjunta auCréame suyo affmo. estimador y amigo, Que tenga a menudo noticias gratas y contorización, rogándola que me la firmase y soladoras de Uds. cuenten con este amiJ. GARCÍA MONGE.
me la devolviese, junta con una breve nota go y servidor sobre su vida y su obra. Quedaré sumaP. La lectura de los 15 Documentos GARCIA MONGE mente agradecida a Ud. y a ella. Quisiera del péndice me ha movido a buscar más Costa Rica. Abril de 1947.
que al propio tiempo la dijese que en mi Documentos y así tomarle el pulso directaniodesta opinión no hay nadie que la iguale mente a hombres y sucesos. Lástima que no en el tipo de cuento que hace.
se publiquen con frecuencia papeles viejos. Son dos párrafos de una carta de la El libro abarca desde el Popol Vuh y los Por ahí llegaríamos a la intuición de nues Sra. Harriet de Onís, en New York tra historia. Ud. lleva mucho adelantado en City, al Sr. García Monge. Agosto primeros historiadores de Indias hasta los esa dirección. Lo felicito de 1941.
escritores de nuestros días. Lo estoy termiDando, y lo publicará la casa Knopf de esta «Quiero molestarle para pedirle un favor. ciudad. Dígale a la señora Carmen Lira que SUPERACION Estoy preparando una Antología de folklore recibirá un ejemplar tan pronto aparezca.
Así llaman estos jóvenes editores su periódico. Es un nombre bien escogido; los anima, UN LIBRO DE JINESTA los guía. La vida útil se define como superación. La conciencia no es más que un Por RAFAEL HELIODORO VALLE continuo superarse, así como el descenso (En el Rep. Amer. deplorable implica falla, o flanqueza de conciencia. Hacia arriba, pues, y adelante!
Carlos Jinesta: Mar y pensamiento. valiosa producción de Jinesta: José Martí México, DF, 1947, 96 Son jóvenes y tienen mucho que hacer en Costa Rica. Rubén Darío en Costa Por las acuarelas de esta exposición van con el tiempo: sin impaciencias, porque hay Rica. Tierra y espíritu. Guía de Junpasando en suave desfile islas con pája tas de Educación. Cromos. y los que ha que esperarar a los 30 años. Poco a poco, se ros, aguas con perlas, velas y pescadores dedicado a enaltecer las figuras de algunos llega lejos.
felices, y también la sonrisa del sol de tierra costarricenses de primera calidad: Juan Busquen el trato frecuente con los Padres adentro. Porque ha preferido Carlos Jinesta Mora Fernández, Braulio Carrillo, Juan Americanos. Ellos son los precursores y ponerse anteojos azules para pasear por uno Rafael Mora, Juan Santamaría, Mauro Ferde los litorales más llenos de luz a la sornández, Carlos Gagini, Claudio González promotores, aconsejan, palanquean, guían.
dina. los que baña el golfo de Nicoya. Rucavado, Manuel María Gutiérrez y Omar Cítense en su nombre en cualquier parte, instalar su caballete y escoger los finos lápi Dengo.
por las tardes, por las noches, y pónganse a ces de color que le hau permitido traducir EJEMPLOS leerlos con cuidado. Constituyan Sociedades su visión de un mundo en miniatura.
de Amigos y siéntense a la mesa rodante; En Costa Rica el pequeño gran país. Un jaguar policromo, de rara y adhay unos verdes y púrpuras en que la mirable belleza, traído de la calida Chira en comenten, proyecten, sueñen cosas grandes. vehemencia tropical se aplaca al ser untados 1935, se exhibe en el Museo Nacional para (Costa Rica, para acrecer, necesita de con humilde reverencia sobre la corteza del los golosos investigadores de la arqueología jóvenes en amistad y diálogo. el ideal edu roble. Con esa técnica en que el color vivo Los pobladores de Chira maravillaban ancativo de la Palestra. En discordia y dispuse adhiere a la epidermis del árbol metálico, taño a los güetares y corobicies con el prota, no y no; en gritos, empellones y patear ha querido Jinesta construir sus acuarelas digio de esa indastria en que campean esde bolas, no y no. Creo que en el porvenir en prosa. Son apuntes para un poema nati píritu e ingenio. Se exhumaron de las vista, en los que a veces se deslizan, can sepulturas de los indios. águilas, abejones habrá muchas sociedades constructivas así tando al aire libre, esas palabras en que de y caimanes, de barro. Es Isla de Nacien nuestra América; Amigos de Bello, de rrite sus aromas el folklore. Son las palabras miento. Todo despide de sí un tesoro de Sta. Teresa, de Don Quijote, de Cervantes, de las gentes sencillas, que trabajan, aman aroma. Se ve un golpe de sálamos y guácide Montalvo, de Bolívar. la lista es lary sueñan, dejándose llevai por el rumor de mos vestidos de hoja nueva. Cae la luz rola carreta pintada.
ta en colores. La tierra palpita de historia.
ga, por dicha. Pero esos colores de mar y de tierra aden Como en otro tiempo los naturales, nos constituyénse también los jóvenes en tro permiten fugarse hacia la parábola parece oír la música de sus ocarinas, de sus vigilias silenciosas; hay que defender a los una de las formas puras, de la palabra y pitos de caña hueca, de sus tambores con precursores de mixtificaciones y comedias y entonces el mar y la sal, el viento alegre y parches de piel de iguana, del juque gemideformaciones calculadas; hay que mantelos tejados le llevan al diálogo con las vo dor, de la chirimía y el quijongo quejoso esnerlos en su integridad, en lo propio y gerces que fluyen del pensamiento innumera tremecidos con el aria de Hunaphú Coy. ble. La conversación de Voltaire con José al brillo de candiles alimentados con aceite minativo de sus vidas y obras; y así, no en Enrique Rodó es una de las páginas que de coco guerreros chorotegas con el pecho nichos, o embalsamados, que trabajen. Hay convidan a leer con atención sostenida este afuera derramando fuerza y salud: en la tanto que hacer en nuestra América en los libro. Páginas en las que palpita la emoción coronilla uva borla de cabellos recogidos en campos del Espíritu creador! Nos hacen falterruñera, soterrada, que está crepitando alto: el labio inferior agujereado al centro, en los más entrañables poetas de Costa donde luce un botón de oro. Mientras en ta las mesas de la comunión, el audatorio, la Rica, desde el gran Aquileo Echeverría piraguas, en su vecindad, guiados por el són fe, la esperanza. En la medida que veamos hasta Alfredo Sancho, uno de los novi de un caracol velan los enemigos en sombra a los precursores con indiferencia y desdén simos.
y quietud; al acecho de una oportunidad en esa medida nos mantendremos chatos, en Los cónsules Darío, Neruda, Carrera para la sorpresa y el asalto, deseosos de arreuna situación subalterna, colonial. Creer, Andrade han empleado bien su tiempo, batar sus hornos, sus moldes, sus ocres; y dándonos unas letras más hermosas que las y de conocer el secreto de la cocción de la crear, acrecer, ha de ser la consigna redenbancarias, pero también Corpancho, Icaza, arcilla milagrosa, invento de algún primititora.
Reyes, González Martínez los diplomáti vo Palissy de la selva (pág. 17. no se desanimen, jóvenes. Sin tropie cos trabajan, es decir, escriben para mayor zos, sin dificultades, no hay éxito seguro.
gloria de las letras. No ha querido Carlos 29 (Cantando emprende la ruta. Hace una larga jornada y siente poco el cansancio Los que más han hecho en nuestra estirpe Jinesta ser la excepción de esa áurea regla, hispánica, son las mujeres y hombres que y por eso se apresura a darnos ese ramillete porque anda gozosa, Al anochecer la mendide flores doradas en que arden y brillan la ga enciende el corazón y encuentra lumihallaron más dificultades. Pasaron por locos perla cordial y el pensamiento de nácar.
noso el camino en la sombra. pág. 89. y majaderos, y los cuerdos desdeñosos les Este libro viene a incorporarse a la ya México, marzo 1947. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional. Costa Rica