REPERTORIO AMERICANO 405 las cosas: La mansedumbre del agua, Una noche calentita, Miguelillo, Sintió un deseo incontenible de llelos sauces mirándose en el río, el se estirándose para crecer pronto, se que. gar a la orilla del río, a mirar, aunque creteo de los banibúes, el silencio de do dormido en la hamaca de su casa. no fuera más que eso, la puerta celas piedras, la interminable Davega Entonces se le repitió el sueño dispa rrada de aquella membrujada casa de ción de las hojas amarillas, los osos y ratado que había sufrido otra noche. cartón. en donde se había alojado los dragones. Bailaban los sauces y los bambúes, todo su mundo interior.
De tarde en tarde, Rita Camacho y las piedras grises del río jugaban Dió un salto salió corriendo cuesbajaba al río a llenar su tipaja y enton con aros de agua. veces pasaba Ri ta abajo, quebrando ramas como un ces el corazón del pescador de barbudos ta sin tocar el suelo. Luego las nubes huracán. Se abrió campo entre los soñaba como una tambora.
borraban la casa y todo desaparecía, bambúes y vio a Rita Camacho. Hola, Miguelillo. Has pescao menos Aquello, lo único que era ver Vió a Rita Camacho. y vió algo mucho?
dad, porque todo era falso: el río, los más. Vió que alguien la besaba. Un Así, así. Ai va pa usté el más arboles, la casa, las nubes, menos ¡El guapo del lugar. Nada menos que Juan grande.
Dolor! Después. Aquella casa! La Ramón Santana. a los pies de la muchacha caía lo casa de Rita Camacho, surgía de nue. Fué un beso que no acabó nuncal.
mejor de su pesca. Así habría querido vo y era una casa de cartón con las también arrojar su corazón adolescen puertas de papel. iQué fácil era romte, gravde y deshojándose como una per aquella puerta. Miguelillo qui. Aros de agua. Circunferencias chira de plátano.
so correr a romperla, pero estaba sem luminosas que se extendían turbuleuPasaban los días y la tortura no brado en la tierra y. cada dedo de tas. Enormes, como toda una vida.
pasaba. Miguelillo Ureña, siempre sus manos se prolongaba en uua caña Luego. el eterno silencio de las junto a la poza del río, con el alma de bambú delgada, nudosa y amarilla. piedras. Los bambués hablando en colgando de los hilos de una mirada Para llegar a donde estaba Rita Ca secreto. El arrullo encubridor del amorosa, blasfemaba y sufría, arrojar macho había un camino que duraba agua, la constante navegación de hodo piedras en la mitad de la poza. Pie un siglo. jas. la noche llena de limadura dras que originaban círculos. concénde estrellas.
tricos que crecían muriéndose, silenciosos, guardando el secreto de su Miguelillo Ureña se desperto.
Costa Rica, 1946.
herida, lo mismo que quien no tiene a nadie a quien contarle sus augustias.
LIBROS RECIENTES DE LA EDITORIAL LOSADA Una tarde llena de humo de sol, Arthur Schnitzer La señorita Elsa Huida val otros Ensayos. De Kelsen se ha dicho: llegó Rita Camacho a la orilla del río a las tinieblas. Traducción directa de constituye incuestionablemente el principal balanceando el racimo jugoso de su Vogelmann. Ilustraciones de Ontañón. jurista de la época. cuerpo y, mostrando al conreír sus En la Colección La Pajarita de Papel En la Biblioteca Teoría e Historia de las dieptes como el belloncito blanco de Son dos novelas. El autor es austriaco.
Ciencias: los juaquiniquiles, preguntó a Migue Su obra, considerada como una «crítica inBertrand Russell: Nuestro conocimiento lillo con ingrata coquetería: tencionada de la superestructura bohemia del mundo exterior como un campo para el. Te gusto?
viepesa, de la bohemia feudal» por otro método científico en la Filosofía. Introduc.
nombre.
ción por el Prof. Florencio Jaime. TraEl pescador de barbudos habría queducción de Ricardo Velzi.
rido contestarle: Q1e si me gusEn Las Cien Obras Maestras de la Liteta. Me pregunta usted que si ne Iatura y del Pensamiento Universal La poesía francesa del Romanticismo. Antología ordenada por Enrique Diez Canedo gusta. Pero no vé que me estoy EI NO 39. Montaigne Ensayos IV. TraducLos grandes románticos. Los precursores de nuriendo poquito a poco por su cul ción de Constantino Román y Salamero.
las tendencias modernas, Los peruasianos, pa. Pero no vé usted que estoy a EI NO 40. Aristófanes: Lisistrata. Las Tes Los simbolistas, Los poetas nuevos, Las punto de echarme a llorar. Pero no moforias. Las Ranas. Traducción y notas escuelas de vanguasdia.
de Federico Barabar.
sabe usted que cuando un muchacho Karl Vossler: La poesía de la soledad en de mi edad se enamora así, de una muEn la Biblioteca Contemporánea: España. Traducción directa de Ramón de jer toda hecha, llora y maldice la Serna Espina. Francisco Vera: Breve Historia de la Mablasfema como una montaña ardiendo. temática. No me dirijo a los especialistas. Un motiyo poético, el de la soledad, da que no encontrarian nada nuevo para ellos ocasión a Karl Vossler para recorrer la hisY nada dijo. Bajó la cabsza como con en este lib ito. ino al hombre que tiene un toria de la poesía española desde la lejana vergüenza y se atrevió a sonreír un mínimo de cultura matemática la de los Edad Media hasta la declinación del Siglo poquito. Un poquito apenas.
primeros cursos del Bachillerato, por ejem de Oro: lo trovadoresco, lo renaceatista y Adios. Miguelillo, ahí te dejo pio y que quiere conocer la génesis y el lo qui tista: el sentimiento religioso de la desarrollo de la ciencia llamada exacta con soledad y sus juegos devotos. etc. cou tus barbudos.
una pedanteria que hay que combatir porY Rita Camacho se fué, llevándose, En la valiosa Biblioteca Conocimiento que la Matemática, como todas las disciplide la Editorial PLEAMAR, y distribuidos por para doble martirio, su reflejo en el nas científicas, ni estuvo, ni está, ni estará la editorial Losada, estos dos libros agua de la poza.
nunca afortunadamente en una situación Caryl Haskins: Las Hormigas y el Que si la quiero. repitió mental definitiva, sino en perpetua movilidad y en Hombre. Traducción directa por el Dr. Femente Miguelillo Ureña, iQué si te constante revisión. lipe Jiménez de Asúa.
quiero. Habría querido también En la Biblioteca Filosófica. Estudio de la vida de las hormigas, cuya decirle. Espéreme usted, dentro de Raymond Aron: Introducción a la Filoso semejanza con el hombre es innegable.
cinco años tendré veinte. Esperar fía de la Historia. Traducción de Angela León Campbell y Luigi Jacchia: Historia de Gaos.
cinco años, se dolió. Cinco años. de las Estrellas variables. Prólogo del Prof. Sí! esperaré cinco años. Mil años. Nnestro estudio se desarrolla simulta Bernhard Dawson. Traducción directa si fuera necesario! Entretanto tengo neamente en tres planos que llamamos, pa por Wernes Schiller.
ra simplificar, epistemológico, trascendental, que trabajar. pero. si trabajo, filosófico. Estrellas que pulsan, estrellas que explo ¿Quién la mira. Eu la Biblioteca del Instituto Argentino tan, estrellas que giran vertiginosamente una alrededor de otra, nos revelan cosas in ¡Cuántas ganas sintió de no querer de Filosofía Jurídica y Socials: sospechadas sobre las dimensiones y la la, para volver a ser feliz. Hans Kelsen: La idea del Derecho Natu estructura del Universo. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica