34 REPERTORIO AMERICANO nar las trincheras del inglés, de la primera a No recuerdo si están en Ausencia o en un encargo de categoría: preparar la colección la última, y no extraviar la suya, volviéndo otro libro los demás Romances de Torres de clásicos brasileños que se publicará en inse rehén adentro de su victoria inglesa. Rioseco. En Madrid me los leí, siguiendo en glés. esta labor, recia como un tala en GoEsta operación de ensanchamiento del alma ellos la vuelta rotunda a España que él hace yaz, él quiso añadir un recreo que se resolviepara que en ella quepan dos dioses, sin que uno junto con muchos de los nuestros. Esta re his se en buen servicio, y dió en Río un curso elimine al otro, es un trance apurado y no panización poética tiene por causa dos grandes de Conferencias sobre literatura Hispanoamenos duro por ser invisible: toda una proe fascinaciones: la del Romancero al fin desa mericana. Durante dos meses, profesores, esza. la proeza se dobla cuando el vival es graviado como una sacra escritura racial que critores y amigos de nuestra lengua, fueron al nada menos que el inglés, y se triplica si el dimos como valetudinaria, aunque estaba más Instituto Brasil Estados Unidos a escuchar hombre puesto en la encrucijada es un poeta. moza que nosotros mismos, y la fascinación unas clases metódicas sin sequedad, calurosas Porque, aunque nos rehusemos a aceptarlo, de García Lorca, que renacería de raíz a copa sin enfásis y vivas de comienzo a fin, como hace ya mucho que la poesía universal dejó el continente criollo.
unas criaturas anímicas. Nuestra Ana Amelia el meridiano solar de la latinidad virando ha Siguiendo su ruta de regreso a Castilla, el (3) fué una vez más patrocinándolas, genecia Inglaterra.
chileno alcanzó la gracia o milagro que lo rosa hacia la gente hispana.
Así y todo, el poeta Torres Rioseco supo a gran los peregrinos aún antes de llegar a JeruCONSUMADA CORTESIA. Los poetas tiempo que solamente el borracho tira por la salén. Gracia se llama aquí al grupo de sus de Río de Janeiro buscaron, por su parte, uventana su hacienda moral, por alarde de eu Elegías mayores, de las que conozco tres, na manera casi mediterránea por la gracia del foria, y hay que admirarle su terca lealtad. dos de las cuales abren a plena dignidad el Con estrategia fina aprendió de canto a canmanuscrito de su libro próximo. En ellas totrueque gremial, de expresar su estima y su gratitud al huésped que, en la lengua es más to el inglés que manda en su hospedería y en dos los componentes de los poemas definitihermano que visitante. Once de ellos tradujesu Universidad, dándoles su día cabal como vos se dan la mano y cierran el círculo de la ron los poemas de una Antologia de Toel buen trabajador; pero como el obrero fiel creación consumada. Estas Elegías arrastran, rres Rioseco poniendo en ello su técnica de a sí mismo, dejó noches y vacaciones para su con la lentitud de su ritmo prócer, una cauda propia alma. eso que Hamamos nuestra de moaré de dignidad, un patetismo genuino gente fogueada en la fragua dura de la traducción.
alma. tal vez sea un polen divino más la y un señorío intimo y formal.
La peor desgracia que soporta hoy la obra primera leche terrestre, es decir, un pasado sin Los que recelamos de las viejas combinacomienzo, y un extranjera, es la traducción de primerizos y presente que no existe sino ciones métricas y las tenemos por catalépticas atolondrados, especie de Carnaval en el que al pasar. Ella, por lo tanto, se llamaría me sin resurrección posible, nos quedamos aqui ellos se dan por despedidos de las leyes del moria, y nuestro hombre se ha salvado de la dudando de nuestra convicción. El logro tráfico y de las reglas de la danza. La libeamnesia, la muerte en pie y sin calavera mon es completo y nos empuja, con los de Bernárración es plena, porque los autores, unos esda.
dez el argentino o el Scarpa chileno, al bortan muertos y otros viven a dos mil kilómetros El patriotismo interior y sedentario del que de de la rectificación. Las metáforas de orden de distancia, y falta, además, la policía greno salió nunca, es virtud sin prueba, violín clásico se aparean sin choque con las modermial que ata je la bárbara euforia editorial.
en caja que no conoció la interperie; la chile nas; los ritmos anchos de la lira de GarcilaLas bacanales suelen encender y doblar el denidad de Torres Rioseco ha sido batida so rebautizada como la estrofa de fray Luis por la atmósfera más castigadora que exista para de León en el siglo XVII columpian sin acoro de los que no entran en la juerga, y asi los traductores de Torres Rioseco, gente del la manufactura exótica: los Estados Unidos. dormecerlos un amor y una desdicha del simás subido pundonor poético, se han puesto Allí se triza el alemán, se cuartea el judío y glo XX, y el odre viejo no bosteza ranciedad, a una labor de calidad apurada que signifique se disuelve el latino no europeo.
sino el vaho fuerte de las materias que se queun recorderis a los desaforados.
dan intactas: sales o trementinas.
SU POESIA. El nudo de Torres Rioseco La dádiva es cuantiosa bajo su forma leve: con la poesía, le ha dado, además de la sal EL CANTO ESPANA. En el coto este cuaderno acairea desde el Pacífico a Guavación íntima que cuento, varios libros de más o menos plácido de la poesía de Torres nabara, unos poemas dignos de expansión y apoemas, de los cuales sólo dos están conmigo: Rioseco esta es la tierra vulcánica. Hay azudemás da testimonio de una técnica de traduc Mar sin tiempo y Canto a España. fres, hay lejías y plomos derretidos. Muchas ción que madura en Brasil bajo la mano de El primero lo llenan el terrón natal que se manos escaldadas se apartarán del poema con con varios maestros.
llama Talca, y las playas de Montevideo, que la irritación del que olvida que las palabras El transporte trasvase será arriesgado nosotros tenemos por griegas, mirando su lar tienen también función ignea; se azorarán siempre. El lugar común de que la traducción ga reverberación de arena y poesía inagota cuantos no vieron ni tocaron las brasas sino de la poesía española al portugués es una noble.
los tizones ya fríos de aquel infierno.
nada, arranca o de superficialidad o de ignoEn Mar están contadas las mieles las La serenidad melancólica del poeta desapa rancia. La traducción dentro de dos dialectos acedias de los regresos. El poeta halló su rece por entero en este Canto. El español salidos de una misma lengua el catalán al bien como todos lo ballamos después de u irremediable no quiere desentenderse y ahorrar provenzal, o el genovés al siciliano aún en nos años: intacto y volteado, mejor y otro. se y se lanza a la hornalla: al cabo todos en ese paso mínimo, deja estropeos o cicatrices. Un a causa de las mejorías. Excepto la mon nuestra raza somos más o menos salamandra colombiano comentaría el hecho con su linda taña y el río, allí ha mudado todo.
y saltamos a la llama.
afirmación de que la lengua es muy señoLa poesía de Mar es una vajilla que conA nadie se le ocurrirá entrar con un termora.
tiene todavía piezas modernistas, aunque la ma metro francés para tomar los grados de una En la Antología del chileno trabajaron yoría sean alfarería criolla. Hay una voluntad fiebre de pano africana. Quien lea así, sólo virtudes egregiamente artesanas; el deseo subrayada de hacer tono menor, y el cuader reparará en el desorden visceral del Canto bien hacer para bien honrar; el acatamiento no se resuelve en una cinta de acuarelas pro y en la incontinencia del lenguaje. Algunas al ritmo externo y al interno a veces a los vincianas y playeras además de dos buenos ro veces la literatura se quema a sí misma para dos; un espíritu de juventud que no amomances para Leopoldo Lugones y González dejar su sitio a una realidad que lleva las jama ni biela los versos, sino que les guarda la Bastías. El tono mayor del poeta, al cual de entrañas en sus manos. Las gentes han excutemperatura; el dominio de los demonios bemos el segundo Caupolicán de nuestra li sado las escatologías o extremismos verbales que llamamos palabras (Luzbeles ennegrecirica (2. se sumerge por entero en Mar sin en nuestra picaresca y hasta las celebraron dos del mucho pecar. y doña Lealtad altiempo. para subir más tarde a la superficie, en pleno, no se espanten aquí de que un homTexto Ajeno inocente que nos fían para como el cachalote, en el Canto a España. bre de filialidad insólita en la América nuesque le hagamos pasar el río riesgoso, es decir, La delicadeza, la ternura de aquellas gua tra declare a su madre a la hora misma de ser el límite.
ches en que él cuenta las facciones trocadas ella fouillée aux pieds por propios y extraTodo esto lo sobreestiman y agradecen los de su pueblo, no se dirían salidas de este chi ños, a la vista de un mundo negociador y emchilenos del Brasil.
leno macizo que parece venir siempre de un pedernido.
campeonato de regatas o de natación. Es Por otra parte, el Canto a España que Rio de Janeiro, abril de 1945.
jugarreta de los fuertes gotear estas mieles de dará como la poesía entrañable a Torres Ríocuando en cuando y darnos con ello primero seco y la más humana en cuanto a entrañable.
sorpresa y después gozo. EL PROFESOR. Arturo Torres Rioseco, buen consejero y óptimo traductor del alma (3) Ana Amelia Carneiro de Mendoza, poeta (2) El primero es el de Rubén Darío.
ibera para los americanos, vino a Brasil jefe de la Casa del Estudiante.
con 11 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica