EDITOR: GARCÍA MONGE.
1Repertorio Americano EXTERIOR: EL TOMO (30 numeros. dólares TELEFONO 3754 CORREOS: LETRA En Costa Rica: Suscrición men. 00 CUADERNOS DE CULTURA HISPANICA El suelo nativo es la única propiedad plena del hombre, tesore común que a todos iguala y enriquece, por lo que para dicha de la persona y calma pública, no se ha de ce der ni fiar a otro, ni hipotecar jamás. José Martí.
Giro bancario sobre Nueva York la hoguera azuzan locos contra tu fe otra vez.
Se quejó tu mirastro. Te imaginas acaso que es un lecho de rosas el fuego en que me abraso?
dijiste al pusilámine y te escuchó la historia porque en verdad te digo que el lecho en que reposas podrá no ser un lecho de perfumadas rosas pero en el celebraste tus bodas con la gloria.
RESURRECCION de su Tenochtitlán, te impreco! Adónde está el tesoro de tus amplios canales y tus teocallis, di?
Huitzilopochtli ta muerto y al grito en que lo imploro responde la liturgia del mistico Rabi.
el proceso docente, en el marco histórico de las diversas épocas que el presenta.
El tomo que tengo a la vista, de la obra que usted proyecta, consigna la más valiosa recopilación de documentos referentes al problema de nuestra cultura, que se hayan recogido hasta el presente en un solo haz. Pero esos documentos adquieren unidad en la valiosa conexión histórica con que usted los enlaza y en la cual al crítico o el lector alcanza a encontrar el alma misma de nuestro pueblo, durante la colonia, en los productos objetivados espíritu. la unidad histórica por usted establecida se llena de vida en los diversos contentarios que Ud. va tejiendo a todo lo largo del libro, con apoyo en su dilatada experiencia docenta.
Hizo usted muy bien en dedicar esta obra a su distinguido hermano, Lic. Alfredo González Flores, el probo estadista que a su paso por el poder, trazó con decisión y ejemplar patriotismo rutas firmes en el ámbito de la justicia social.
Crea noble amigo, que usted me ha proporcionado uno de los ratos más felices con su admirable libro. Un acierto verdadero es la reproducción que usted hace al final del mismo, de las exposiciones profundas y admirables con que nuestro excelso Florencio del Castillo, intervino en las Cortes de Cádiz.
Con mi felicitación más entusiasta, reciba usted, mi reiterado afecto y simpatía, No bailan ya las indias el oxtum al sonoro vibrar del teponaxtle, ni adorna el copil. li la testa del guerrero ni en sus andas de oro luce el cruel Moctezuma su tentel de rubi.
Yo sé lo que se hicieron tu gloria y tu grande y déjame en el éxtasis que canta la proeza de leyenda y milayro que contemplando estoy: Como el fénix que surge del fuego que lo abrasa, renacen las virtudes que fueron de ta raza en la gesta fecunda del México de hoy!
EL INDIO Aguilar Machado.
El indio es una sombra que vive de añoranzas: Los sepulcros de Mitla, los triunfos de Ahuitzol; que devora en secreto su fe y sus esperanzas y entona los cantares de Netzahualcoyol.
ASI ES MEXICO Visión de un costarricense (Envío del autor. San José, Costa Rica, setbre del 45)
El indio es una sombra que en vagas lontananzas (La selva es un infolio y el monte un facistol)
lee presagios sangrieglos, agudiza sus lanzas y cree en la imparzettable divinidad del sol.
LA PROFECIA El tiene sus profetas y aguarda su Mesías: Zapatas y Maderos y Cárdenas. Los dias pasa eta espera del algo que no sabe que és.
Quetzalcoatl. profeta Cuahutemoc agoniza y agoniza la gloria de las tribus de Aztlán.
Los teules han vencido y ha mucha que en la liza humillada y vercida quedó Tazochtitlán.
El indio es una estrofa de una epopeya trunca en cuyo opreso numen gravitaz más que nunca las veinticinco libras del casco de Cortés.
Gabriel Ramos Valverde.
Cortés lloró en Fopotla, pero ahora su risa conmueve los teocallis que desiertos están y el sol cada mañana, al despuntar divisa la cruz de los cristianos sobre Teotihuacán.
Quetzalcoatl tú hablaste del huracán que arrasa los campos en que moran los hijos de tu raza, dijo el huehue tendido en su lecho de agave con voz débil y lata, con voz débil y grave; y en su tostro de estatua que el dolor estiliza hubo un rictus de odio que quiso ser sonrisa.
EL TORMENTO Fué inútil el intento del osado Cortés; la sangre de los reyes obediencia reclama y al ascender del fuego la crepitante llama fingió un vasallo amante besondote los pies.
Oro, queremos oro! Que no está la avidez con lauros satisfecha. Tus tesoros! exclama la soldadesca ruda y al verdugo que inflama (Dibujo de Sánchez. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica