Imperialism

Repertorio Americano Tomo XLI CUADERNOS DE CULTURA HISPANICA San José, Costa Rica 1945 Sábado 10 de Marzo Año XXV. No, 983 No. 17 tuae Volcar el espíritu hacia los auténticos Homenaje a Sucre valores de la epopeya americana es rastrear en impetuosos corazones, impulsos. febrero de 1795 de febrero de 1945)
designios, tristezas, alegrías, sacrificios, triunfos y abatimientos, las raíces humaIntuición cívica de un Libertador nas de un mundo que desplegaba sus Por el Prof. Carlos Monge Alfaro fuerzas en las alas de sus águilas liber(Tomado de Diario de Costa Rica. Atención del autor)
tadoras, en busca de autenticidad; es buscar el calor íntimo, la espiral de los hétransitó por los campos del orgullo, de roes, sus arrebatos, su idealidad y su realismo, su amor, grande amor por esla vanidad y mucho menos de la ambita América que construyeron con sanción. Podemos seguirlo en sus años de máxima gloria, desde el de diciembre gre y verbo, en que la generación bolivariana se impuso la tarea de darle de 1824 (Victoria de Ayacucho. hasta nuevo sentido histórico. Un espíritu resu asesinato en las montañas de Berruedentor cuya presencia espiritual toca muy cos y, a pesar de haber figurado en ocade cerca nuestra concepción del mundo, siones como indiscutido Jefe del Ejército Libertador, en otras, que sentimos como luz interior en nuescomo distinguido tros afanes de cimentar una patria demilitar de la Gran Colombia, no encontramos acto suyo cente, equilibrada, gobernada por homque contrarie su bres inspirados en la visión mesiánica de personal línea de humildad, ausente de los libertadores: he ahí la férrea y arambición. Habiendo triunfado militar quitectural figura civica de Antonio Jopolítica y Idiplomáticamente. hubo de sé de Sucre, dotado de una muy bien ord esplegar en la liberación del Alto Perú un tacto finísimo para sincronizar sus ganizada personalidad. Sobresalió entre los artífices de América, no sólo por la actos políticos con el pensamiento de Buenos Aires y la lucha contra las tenespada, proyección de su prometeico bradencias imperialistas del Brasil. en el zo, que empapada en sangre y tierra fué índice de victoria, sino por su cerebro Alto Perú, mostró desprendimiento que Organizador, múltiple y su elevada comindica con claridad que Sucre se entreprensión moral de lo que significa la ligaba con todas las fuerzas del alma a bertad de los pueblos.
la realización de sus ideales, los cuales traía hacia sí al par que definía el Las circunstancias le obligaron a desvivía con tanta profundidad de espíritu, momento histórico de esa América inque no alcanzaban sus triunfos a concubrir y a estructurar la nacionalidad bo quieta y rebelde, un estorbo. El alma de liviana, a conducirla en momentos difímover las fibras de la vanidad y la Bolívar como la de los dioses griegos, ambición. Para él las lides militares resciles, en sus primeros balbuceos. El ven defectuosa al mismo tiempo que sopondían a la necesidad de hundir en la cedor de Ayacucho que cerrara el ciclo ñadora, dinámica, poética, adherida a un tierra sagrada de América nuevos ideade las grandes batallas alejando de las ideal que se identificó con su vida misles, nuevo sentido de vida, nuevo amacostas americanas la apetencia ibérica y ma, irrumpió con fuerza en hombres que trastornando la política de la Santa Alian le tenían envidia o poseían una vida el largo peregrinaje de la historia. Descubrimos liberza, engendró en su propia voluntad e in interior poderosa. Hubo entre Sucre y el tador un virtualismo que lo condujo a teligencia al estadista juicioso, sereno, Gran Libertador una ininterrumpida herprofundamente su profesión juez civil no obstante su inspiración mi mar. dad en ideales, como si fuesen Zeus de militar que en ella, se elevó hasta el litar; al hombre que atravesó el tempes y Apolo. Consultábalo a menudo el Manivel del sacerdote. Oigámosle esta fratuoso mar de las pasiones políticas sin riscal de Ayacucho, principalmente cuan se y presentémosla como ejemplo en essufrir influencia alguna, con sabiduría, do le tocó actuar en la difícil y diplo tos tiempos de agudo materialismo en que Sentido de las proporciones que descon mática campaña del Alto Perú. Ciertas se atropellan apostolados y profesiones: cierta a quienes conocen las tremendas frases revelan al general que se sentía Habiendo de mi parte exterminado ambiciones y rivalidades de los jefes de a sí mismo hijo sumiso del Torrente de la revolución de independencia.
con el Ejército Libertador los últimos los Andes. Oigámosle: El libertador restos de la tiranía peninsular, y no Antonio José de Sucre es de la gene va a entrar en vuestro territorio, visitan tocándome como soldado auxiliar interración de los epónimos bolivarianos; de do los Departamentos (se refiere a los venir en asuntos domésticos, he conaquellos que se formaron dentro del ám pueblos de Chuquisaca y Potosí) de que cluído mi comisión; y en consecuencia, bito de Bolívar al dominar honbres, él ha hecho una bella conquista para la llamándome mis deberes militares hacia (pasiones; al sobreponerse a una geolibertad. Los sentimientos de gratitud donde está la mayor parte del ejército, grafía loca como es la del Continente; que habéis mostrado al ejército, conver me vuelvo a fin de este mes. Algunos dejáronse arrastrar también por pode tidlo, todos hacia el genio enviado por años después, en momentos en que Borosas fuerzas que soltaron las amarras la Providencia para salvar al Perú y pa lívar confrontó la más aguda crisis de de la prudencia en plena lucha. Su ca ra formar de la América el asilo de la caudillos y militares que destruían los rácter reflexivo, su poca o ninguna amjusticia y de la razón. quién se re cirnientos de la Gran Colombia, Sucre bición, su humildad en la gloria, su es fiere, a un Hombre o a un Dios? Conpropuso, según nos lo cuenta el prócer clarecido talento militar, hicieron de él trariamente de lo que les acontecía a e historiador José Manuel Restrepo, se el hijo espiritual del Gran Libertador, los generales que eran recibidos por los prohibiese durante un período no menor el colaborador ideal capaz de llevar a países libertados en forma esplendente y de cuatro años a los generales en jefe y electo con exactitud cuanto pensara u entusiasta, ciñéndoles corona de lau a los militares que hubiesen desempeordenara Bolívar. Otros generales sintie reles, Sucre, consciente de lo que hacla, ñado altos cargos en la década pasada, ron en la presencia del eximio caraque del significado histórico y por tanto re ser presidente o vicepresidente de la reño, su seductora personalidad que a lativo sus personales hazañas, pública.
necer en en este amar tan a no Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica